Ganadería: ¿por qué la campaña 2023/24 fue un electrocardiograma?

Guillermo D. Rueda

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Periodista. Círculo de Periodistas Deportivos de Bahía Blanca. Fue redactor de la revista Encestando (1985-2000). Desde 1987 trabaja en el diario La Nueva Provincia (hoy La Nueva.). Pasó por las secciones Deportes, La Región y La Ciudad, donde se desempeña actualmente. Está especializado en periodismo agropecuario desde 2001. Miembro de la Asociación Bonaerense de Periodistas Agropecuarios. Responsable de las páginas webs de la Asociación de Ganaderos (AGA) y de Abopa.

Más allá de las (imprevisibles) cuestiones climáticas de una inversión a cielo abierto, la actividad ganadera en el país está casi siempre ligada a los vaivenes de la economía de los gobiernos de turno.

Así entonces, una de las conclusiones es que la campaña 2023/24 se inició con un panorama de precios —para la hacienda, en dólares— muy deprimido y que, al final, concluyó con una mejora en relación a la previa.

Estos indicios surgen del último reporte de rentabilidad ganadera del Grupo Cencerro, donde también se precisa que el comienzo estuvo marcado por (altas) expectativas en función de recuperar los daños generados por la campaña 2022/23 que, como se recuerda, contuvo una de las más devastadoras sequías de la historia. Así entonces, no pocas empresas comenzaron esta etapa con la imperiosa necesidad de levantar pasivos que no se pudieron cancelar por la escasez de la cosecha anterior.

Tal como se cita en el primer párrafo, algunos cambios se produjeron a partir de diciembre de 2023, con la asunción del nuevo Gobierno; entre ellos, la eliminación de algunas restricciones a las exportaciones de carne vacuna. Con los cultivos implantados, para los meses de septiembre, octubre y noviembre de 2023 el panorama ya lucía diferente.

Ezequiel Cruz, director operativo de la entidad, explica la previa de la campaña de esta manera: “Con la mayoría de los clientes tomamos decisiones acerca de la compra de insumos y de formas de financiación. En ese momento también destinamos tiempo a analizar las expectativas de devaluación e inflación que se proyectaban a futuro. Vale acotar que, en la campaña 2023/24, las decisiones de inversión fueron hechas en el primer semestre en razón de una presupuestación temprana y los flujos de fondos a 12 meses proyectados. De esta forma, muchos pudieron anticiparse a la devaluación y licuar gran parte de los costos productivos”.

Por los cambios en las condiciones de mercado, se trabajó para comprender cuáles eran las nuevas reglas y, así, tomar con mayor claridad las resoluciones de compra y venta.

Margen de rentabilidad. / Fuente: Grupo Cencerro.

“Esto se realizó en cada empresa construyendo los márgenes proyectados de las unidades de negocio, tomando en cuenta costos de oportunidad e involucrando aspectos económicos, financieros y patrimoniales de cada una. Con esta metodología se resuelve en el día a día, evitando esperar que los efectos del contexto político y económico impacten negativamente en los negocios”, añade Juan Ballester, también director operativo del grupo.

Tras aquel inicio considerado “deprimido”, los precios se recompusieron por dos razones: los incrementos de la inflación y el tipo de cambio (a fines de 2023).

“Asimismo, la productividad fue una buena campaña. El factor climático acompañó con mejores condiciones respecto de 2022/23 a favor de un mayor régimen de precipitaciones y los índices de las diferentes regiones del país volvieron a situarse en niveles promedio históricos”, amplía Cruz.

“Si nos referimos a los costos, es necesario mencionar que la siembra de pasturas y verdeos que se consumieron el primer semestre se realizaron con insumos a valores altos, algo que, afortunadamente, se revirtió para la segunda mitad del año. Esto se dio, sobremanera, con los herbicidas y algo en fertilizantes. Los costos operativos, como son los casos de los productos veterinarios y demás, han sido altos a valor dólar. ¿Por qué? Porque sencillamente siguieron el ritmo de la inflación. Y el hecho de tener durante el segundo semestre un tipo de cambio estable generó un encarecimiento de esos costos”, explica Cruz.

¿El vaso medio lleno? “Teniendo en cuenta los resultados de cada cliente y cada región, la foto al cierre de 2023/24 nos mostró que hay una mejora de los precios en dólares de la hacienda con respecto a la campaña anterior”, admite Ballester.

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