Bahía Blanca | Viernes, 19 de abril

Bahía Blanca | Viernes, 19 de abril

Bahía Blanca | Viernes, 19 de abril

En el día de su cumpleaños, Carlitos Spaccesi deja la puerta abierta

El entrenador de básquetbol hoy festeja los 68. Desde hace 50 es un referente de la esquina de Charlone y Viamonte, a 100 metros de Pacífico, su club. ¿Volverá? En realidad, nunca se fue...

Spaccesi y su típica sonrisa. Fotos: Rodrigo García y archivo-La Nueva.

 

Por Fernando Rodríguez

Twitter: @rodriguezefe

Instagram: ferodriguez_

(Nota publicada en la edición impresa)

 

   Charlone y Viamonte es la esquina de Spaccesi.

   “Mi Viejo (Carlos) arrancó el 30 de octubre del ‘62, exactamente dos años después que nació Maradona. Tenía bicicletería; al año abrió una venta de repuestos para bici y yo empecé con la ferretería, con él, en el año ’70. Ahora llevo 13 en la cerrajería (sobre Viamonte)”, repasa.

    Carlos siempre será Carlitos, a pesar de que hoy cumple 68 años. 

   —Dicen que entrenador se es toda la vida. ¿Coincidís?

   —Eso dicen, je. Lo que pasa que uno va perdiendo el fuego de la continuidad. Yo estuve involucrado hasta 2018, cuando ascendimos con Pacífico. Al año siguiente decidí descansar un poquito, aunque creo que va a ser definitivo. Trato de ir al club y a los partidos, pero cualquier excusa me sirve para quedarme en casa.

   Simple y sencillo, a esta altura Carlitos se conforma con que la vida le siga regalando lo que tiene a diario: “Salud y poder compartir con mi familia, mi señora (Mónica Blanco), mis hijas (Jimena y Camila) y mi nieto (Alejo, de 6 años)”.

Carlitos, en la cerrajería, rodeado de recuerdos.

 

   Ya en la semana recibió por anticipado un regalito que esperaba desde que comenzó la cuarentena: poder visitar su casa de Sierra de la Ventana, el lugar donde acostumbra a oxigenarse, para después regresar a su lugar de siempre.

   “En el negocio estoy todas las mañanas. Y las salidas –a domicilio- las hace Maurito Richotti (asistente técnico de Villa Mitre en la Liga Argentina)”, contó.
Richotti es justamente un apellido que Carlitos tiene internalizado.

   —¿Marcelo, el tío de Mauro, fue “tu” jugador?

   —¡Sin dudas! Lo dirigí desde los 5 años hasta Primera en Pacífico. Es más, en su momento se sorprendieron cuando lo puse con 15 años en Primera. Fue un jugador extraordinario. El responsable de hacer grande a Pacífico en la Liga.

   —¿Qué significa el básquet en tu vida?

   —Todo. Empecé de chico al básquet, después me dediqué al fútbol. Jugué hasta el ‘74 y en el ‘70 salimos campeones invictos de Reserva. Los últimos años practicaba los dos deportes, pero era solo entusiasta, ¿eh?. Sí, me gustaba más jugar al fútbol.

Campeón de Reserva, 1970. Spaccesi, el dueño de la pelota.

 

   De pibe era delantero, en Reserva y Primera lo ponían de mediocampista, aunque se sentía cómodo jugando de 2 o de 6.

   “Llegué a jugar un partido en Primera, contra Sporting, en el ‘74”, asegura.

Campeón de Tercera, 1973. Arriba, desde la izquierda, Montecchiari, Ponzielli, René Martinelli, Alberto Pons, Scheffer, Eduardo Pons y Salvatori. Abajo: Jorge Belleggia, Blázquez, Juan C. Belleggia, Spaccesi, Huerga y Horacio López.

 

   En esa época disfrutaba paralelamente del éxito con el básquetbol. En el ’73 fue campeón de Tercera y en el ’75 de Segunda con el verde.

Campeón de Segunda, 1975. Parados, desde la izquierda, Jorge Belleggia, Montecchiari, Scheffer, Ávila, Capdeville y René Martínez. Abajo, De Battista, Ponzielli, Spaccesi, Juan Carlos Belleggia, Eduardo Pons y Salvatori.

 

   —¿Por qué te inclinaste por el básquet?

   —Me parece que me era más a fin a cómo veía las cosas. Lo veía mejor de lo que lo jugaba.
Involucrado desde 1969 en la dirección técnica, Spaccesi fue pasando por diferentes categorías hasta llegar a la Primera.

   Ya en 1970 empezó a tener lugar como DT de las selecciones bahienses y de Provincia.

   —¿Quedaste más identificado por los resultados que conseguiste a nivel selecciones que con los clubes?

   —Sí, ni dudarlo. Yo tenía buena relación con los jugadores y armábamos buenos grupos.

   —¿Ese era tu fuerte?

   —Sí. Después intentábamos jugar y ganar. Los triunfos ayudan.

   —¿Qué Provincial recordás más?

   —El de Pergamino (1984). Se definió en la última pelota, contra el local. Hubo salto en nuestro aro, lo ganó Pettorosso, Merlini se la pasó al Mofle Horvath, cerrando con doble y falta (105-100). Muy emocionante.

Bahía, 1984. Arriba, desde la izquierda, Bruni (utilero), Spaccesi, Scolari, Pettorosso, Frisón, Toranzo, Macharashvilli y Jaskowsky. Abajo: Almendra (masajista), Richotti, Merlini, Marcelo Allende, Calvo y Horvath.

 

   —¿El más duro fue el que perdieron contra Pergamino, en el ‘85 en Punta Alta, donde tenían muchas figuras?

   —Ese fue bravo... Durísimo. Lo teníamos medianamente asegurado y nos lo dieron vuelta.

   —¿El Argentino que más recordás es el que ganaron en Neuquén, en 1981?

   —¡Sí! Fue la aparición de Pichi Campana en Córdoba. Lo que son las cosas: recién lo conocimos el partido previo a enfrentarlo en la final.

Provincia, 1981. Parados, desde la izquierda, Carlos González, Velasque Ibalo, Pacchetti, Ibarra y Adolfo Scheines. Abajo: Meschini, Santini, Merlini, Faggiano, Aréjula, Duffy y Pagella.

 

   —¿Dirigir Liga Nacional te quedó como deuda pendiente?

   —No, no. Me hubiese gustado, pero nunca se dio.
Carlitos dejó su huella en Tres Arroyos (de 1982 al ‘86 en Costa Sud), Banda Norte de Río Cuarto (‘87), Brown de Madryn (‘88, ‘89 y ‘90), Huracán de Tres Arroyos ('97) y hasta tuvo un paso por México, en la Universidad de Reynosa, al límite con Texas, en 2007.

   —¿Te inclinabas más por dirigir menores o de grande fuiste descubriéndolo?

   —Siempre me gustó hacer trabajos individuales con los menores, más que dirigir equipos. Ya con los grandes era otra cosa. 

   —¿Qué significa Pacífico para vos?

   —Es mi segunda casa. Te diría casi mi familia. Siempre me llevé bien con todos.

En Castelli y Charlone, Carlitos junto a tres de los mejores jugadores de la historia del verde: el Gringo Belleggia, Lucio Redivo y Marcelo Richotti.

 

   —¿Siempre fuiste de unir más que de confrontar?

   —Sí. Me gusta que el club vaya para adelante. Siempre les decía a los muchachos: “Lo mejor está por venir”. Y es así.

   —Por lo que decís, la nostalgia no te empuja a pensar que todo lo pasado fue mejor.

   —Son diferentes etapas. Incomparables. Lo que hicieron Fruet, Cabrera y De Lizaso fue extraordinario. Tienen que estar ellos tres arriba en la foto y, abajo, Pepe Sánchez, Ginóbili y Montecchia.

   —¿Cómo ves el básquet en general y al club en particular?

   —El básquet no me gusta cómo se está jugando. Me parece que se tira mucho de afuera. Pero bueno, hay que seguir viendo y evaluando qué es lo correcto. En cuanto al club, se desprendió de algunos jugadores menores que excedían el nivel y a eso tiene que apostar Pacífico, a tener una cantera y sacar jugadores.

   —¿Te gustaría volver a ser parte?

   —Ehhh... No me desagradaría supervisar aspectos individuales de algunos jugadores.

   —Bueno, con esto, ya a los 68 años podés ratificar que entrenador se es toda la vida.

   —Te diría que sí, ja, ja...

   Carlitos lleva el entrenador adentro. Le nace a cada momento. Los años pasan, su pasión por el básquetbol no envejecerá jamás.

   ¡Que los cumplas feliz...!

 

Lo mejor como DT en Bahía y con las Selecciones


   1971: Fue asistente técnico de Bill Américo Brusa en el Segundo Campeonato Argentino sobre sillas de ruedas.

   1977: Dirigió al seleccionado bahiense de juveniles que terminó tercero en el Provincial de Pergamino. Y ascendió a Segunda con Velocidad.

   1979: Con Bahía fue campeón Provincial de Juveniles. Dirigiendo a Provincia se adjudicó el Argentino Juvenil, en Formosa. Subió a Primera dirigiendo a Napostá. Y fue campeón de Cadetes Menores con Pacífico.

   1980: Tercero con Provincia en el Argentino de Mayores disputado en Rosario. Con Bahía terminó tercero en el Provincial de Juveniles jugado en La Plata. Campeón Provincial con el seleccionado Mayor, en Zárate.

   1981. Campeón con Bahía en el Provincial de Mayores, en La Plata. Se consagró campeón Argentino de Mayores, en el Argentino de Neuquén. 

   1982: Subcampeón con Bahía, en el Provincial de Mayores disputado en Mar del Plata.

   1983: Campeón Provincial de Mayores, con Bahía, en Olavarría.

   1984: Consiguió el título con Bahía, en el Provincial de Mayores jugado en Pergamino. Fue tercero con Provincia en el Argentino de Mayores desarrollado en Misiones.

   1985: Segundo con Bahía en el Provincial de Mayores disputado en Punta Alta.

   2000: Ascendió a Primera con Pacífico.

 

También puede interesarte

 

   * El costado solidario de Nicolás Paletta viene acompañado de una buena base

   * Javier Sánchez: "Me gusta más el fútbol que el básquet"

   * Joaquín Sánchez: "Sentí miedo; me preguntaba '¿qué me está pasando?'"

   * Alberto Pedro Cabrera, mucho más que el nombre de una Avenida

   * El misterioso amor de Monachesi con el básquetbol

   * Nació en Italia, creció en Bahía y el básquetbol le abrió las puertas de España

   * El partido más corto de la Selección bahiense y la dura sanción a Fruet

   * Se perdió un Juego Olímpico por 50 dólares y después tuvo revancha

   * El cliente que sorprendió a Segal en el kiosco y le puso música a su vida

   * Burkert-Robinson, la gran elección de Pacífico y un embarazo que cambió el destino

   * Ugolini, el mensajero de Villa Mitre, hoy siente alivio por la decisión que tomó

   * Ramallo: "A los 15 años quedé solo y no salí de caño"

   * El triunfo de la selección bahiense que dio la vuelta al mundo

   * La noche que McSweeney, el extranjero de Olimpo, quemó las redes de Pacífico

   * Herman Banegas y sus vivencias detrás del muro de la cárcel

   * El sorpresivo regreso de Pepe Sánchez al básquetbol local

   * Secuelas de la historia de Eddie Roberson Jr. y su padre

   * Dos Ginóbili en cancha, otro en el banco y el menor en la tribuna

   * La furia del clima derrumbó a Estrella y su gente volvió a ponerlo de pie

   * La visita de Chaney a la ciudad y la curiosa historia del video que le llegó de Pepe