Las cinco esquinas y una adecuación que deberá esperar hasta (al menos) 2026
Remodelada en 2023, desde entonces sufre inundaciones con cada lluvia debido a la mala resolución de sus desagües pluviales. Ya están definidos los trabajos a desarrollar, pero no serán a corto plazo.
Es periodista, ingeniero civil y docente de la Universidad Nacional del Sud en materias relacionadas con el Patrimonio arquitectónico y el planeamiento urbano. Ha publicado notas en revistas Vivienda, Todo es Historia, Obras & Protagonistas y Summa +. Participa en varios micros radiales referidos a la historia de Bahía Blanca. En dos ocasiones recibió primera mención por parte de ADEPA en el rubro Cultura e Historia.
“Estamos avanzando en la elaboración del proyecto que permitirá desagotar de manera adecuada el agua que hoy se acumula en el lugar”.
El detalle fue brindado a este medio por el Licenciado Gustavo Trankels, titular de la secretaría de Obras Públicas e Infraestructura municipal, en referencia al estado de situación del sector de las cinco esquinas en Villa Mitre, remodelado en 2023 y que desde entonces sufre inundaciones con cada lluvia debido a la mala resolución de sus desagües pluviales.
La obra fue heredada por la actual gestión municipal en una situación de extrema complejidad, por un lado porque la empresa contratista había paralizado los trabajos unos meses antes por conflictos con la administración de Héctor Gay, había tareas pendientes, la necesidad de resolver la cuestión legal para retomar los trabajos y, para colmo de males, se verificó que el diseño de los desagües pluviales era completamente inadecuado para evacuar en tiempo y forma el agua.
Desde entonces se fueron planteando distintos caminos a seguir: desde realizar una intervención integral incluso modificando algunos detalles del diseño que incluyó la peatonalización de una cuadra de calle Falucho y el ensanche de veredas de dos cuadras de Garibaldi.
Ante la complejidad del tema, la municipalidad contrató los servicios de profesionales de la Universidad Nacional del Sur, para contar con un diagnóstico integral de la situación y disponer de propuestas técnicas para resolver el mal funcionamiento mencionado. Con ese informe en sus manos se comenzó a trabajar en el desarrollo de una respuesta.
El agua a Washington
Trankels confirmó a este medio que la obra que se adoptará está definida, más allá que todavía falta verificar detalles para que la misma sea viable.
“Nuestros profesionales establecieron que lo mejor es reconstruir las rejillas y bocas de tormenta con una dimensión adecuada y conducir el agua hasta el pluvial existente en calle Washington, que tiene capacidad suficiente para recibir ese caudal”, detalló.
El punto que puede complicar ese proyecto es la posible existencia de interferencias –obras de las diferentes prestadoras de servicios— que pueden complicar ese tendido.
“Tenemos la respuesta de varias de esas empresas, nos queda esperar alguna más que nos confirme que no hay instalaciones que afecten el trazado. Una vez que eso esté definido trabajaremos en el proyecto integral para hacerlo ejecutivo y establecer un presupuesto”, agregó el funcionario.
En cuanto a los tiempos que maneja el municipio, se mencionó que la obra no se realizará este año.
“Una vez que sepamos la inversión que requiere, la idea es incluir una partida en el presupuesto 2026 y esperar que la misma sea aprobada”, puntualizó Trankels.
Esto sugiere que, en el mejor de los casos, es posible que el año que viene se licite la obra, aunque tampoco es una certeza.
Por último, consultado sobre si se evalúa realizar alguna modificación al diseño, que para algunos vecinos no resultó adecuado, Trankels mencionó que no se considera una intervención en ese sentido.
“No vamos a modificar nada de lo realizado. Hacerlo exigiría demoliciones y cambios de mucha complejidad, que no estamos en condiciones de realizar. Nuestro objetivo es que el lugar no se inunde y que los pluviales funcionen”, finalizó.
Porqué se hizo
“Peatonalizar el corazón de Villa Mitre, ponerlo en valor y generar una centralidad donde los vecinos vean atendidas todas sus necesidades sin tener que irse del barrio”. Este es el concepto que manejó la anterior administración cuando decidió intervenir en Falucho y Garibaldi.
Como suele ocurrir en estos casos, si bien la municipalidad hizo reuniones previas con vecinos e instituciones del sector buscando consensos, una vez que se puso en marcha la obra surgieron voces de otros vecinos e instituciones que hasta ese momento quizá no habían prestado atención al tema, cuestionando el proyecto, por caso la peatonalización de Falucho, que en principio incluso impedía el acceso vehicular y prohibía el estacionamiento (esta medida fue luego modificada)
Textual del proyecto
“La Dirección de Planificación Urbana ha realizado un análisis urbano de Villa Mitre, donde fueron estudiados antecedentes históricos, cartográficos, normativas e infraestructura urbana. Dicho estudio se complementa con una evaluación de la trama urbana actual. Un conteo de la circulación de autos sobre Falucho estableció que no cuenta con una dinámica que justifique su carácter de Avenida”.
“La intención de la peatonalización es favorecer la vinculación de sectores comerciales allí emplazados e impulsar la consolidación de un nuevo eje comercial”.
¿Son cinco?
Hacer peatonal Falucho derivó en una modificación del trazado de las cinco esquinas al incluir dos de ellas en una nueva esquina. Esta es una manera de “leer” el diseño: ahora son cuatro esquinas pero una de ellas contiene dos. ¿Entonces? No existen hechos, solo interpretaciones, escribió Friedrich Nietzsche.