La preocupante ola de infecciones sexuales en Bahía Blanca
Los casos de VIH se disparan en nuestra ciudad y la región y generan un alerta sanitario. Se detecta un caso cada dos días. También crecen los contagios de sífilis.
Recibido en 1993, acumula 28 años de trayectoria en el periodismo local. Ex jefe de la sección Deportes y La Ciudad y actual secretario de Redacción de La Nueva. Ex profesor de los dos institutos de Periodismo de la ciudad. Especialista en temas deportivos, sociales y gremiales.
La Región Sanitaria I, con cabecera en Bahía Blanca, enfrenta una crisis de salud pública marcada por un aumento explosivo de infecciones de transmisión sexual (ITS), particularmente el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH).
Las cifras locales superan las expectativas, reflejando una tendencia nacional preocupante y poniendo en duda la efectividad de las estrategias de prevención.
En Argentina, se estima que alrededor de 17 a 18 personas se contagian de HIV por día. No obstante, la situación en Bahía Blanca y su área de influencia es particularmente alarmante: la región registra aproximadamente un caso nuevo de VIH cada dos días.
Lo que va del año (hasta fines de noviembre) evidencia un salto dramático. Los registros oficiales de Región Sanitaria indican que se detectaron 165 casos de VIH, lo que representa un aumento del 214 % en relación con el año 2020.
Estos números marcan que los índices están por encima de lo esperado.
Cabe recordar que Región Sanitaria I abarca un vasto territorio que incluye, además de Bahía Blanca, a municipios como Adolfo Alsina, Gonzales Chaves, Coronel Rosales, Coronel Dorrego, Coronel Pringles, Coronel Suárez, Guamini, Monte Hermoso, Carmen de Patagones, Puán, Saavedra, Tornquist, Tres Arroyos y Villarino.
Alza sostenida
El incremento en los diagnósticos de VIH va de la mano con una preocupación reinante por el aumento de esta y otras enfermedades de transmisión sexual.
A nivel nacional, la tendencia es igualmente desfavorable. Los casos de sífilis aumentaron un 38,5% en los últimos tres años.
El Ministerio de Salud notificó 36.917 casos de sífilis en 2024, y ese registro ya fue superado en las primeras 45 semanas del 2025, siendo el más alto desde que existe el dato.
Este contexto regional también refleja la gravedad de la situación. Jorgelina Scuffi, epidemióloga de la Región Sanitaria I, aseguró que los números locales están alineados con la tendencia nacional.
Precisamente, Scuffi detalló la magnitud del problema con otras ITS: “los números en nuestra región van en consonancia con lo que vemos a nivel nacional. Tenemos registrados 360 casos de sífilis en lo que va del año, algo que era impensado hace tan solo 5 años; es un salto del 400%. Es una gran preocupación porque no solo hablamos de sífilis sino también de VIH, gonorrea o herpes, entre otros, que siguen ascendiendo”.
A nivel nacional, se estima que 140 mil personas viven con VIH. De ellas, una porción significativa obtiene un diagnóstico tardío: el 44% según registros del Ministerio de Salud de la Nación.
Además, se calcula que un 17 % de las personas que poseen VIH no lo saben, o aproximadamente un 13% lo desconoce, lo que subraya la urgencia del testeo. La mayoría de los infectados son varones (69%), mientras que el 30% son mujeres cis y el 1% personas trans.
En el ámbito provincial, las estadísticas muestran que el 99% de las transmisiones se dan por prácticas sexuales sin protección. Cada año se registran cerca de 1.500 nuevos diagnósticos, con un promedio de edad de 35 años y una proporción de 2 hombres por cada mujer diagnosticada.
Combinación letal
Ante el aumento de enfermedades "tan fácilmente prevenibles", los especialistas señalan múltiples factores de riesgo.
Jorgelina Scuffi, de Región Sanitaria I, puso el foco en las barreras sociales y económicas que impiden la prevención.
En este sentido, la epidemióloga declaró: “podemos estar hablando de falta de acceso a la prevención, porque las ETS están atravesadas por cuestiones sociales porque son tabú. A veces nos cuesta ir a consultar ante alguna sospecha o posible contagio. Otra pata puede pasar por lo económico, teniendo en cuenta el precio de un paquete de preservativos. Luego está la desinformación que es enorme, y cuando se junta todo esto, el combo es letal”.
Por su parte, la doctora Valeria Valko, especializada en ginecología, también destacó el papel crucial de la educación y el acceso en la contención del virus.
“El acceso a preservativos, la posibilidad de realizar consultas médicas de manera confidencial y la educación sexual integral son herramientas fundamentales para reducir las infecciones de transmisión sexual, prevenir el VIH y promover hábitos de cuidado entre las y los jóvenes. En Argentina se estima que unas 140.000 personas viven con VIH y que el 13% aún desconoce su diagnóstico, lo que refuerza la importancia de testearse y de mantener estrategias de prevención combinada”.
Clarificando conceptos
Una de las confusiones que persiste en la población es la diferencia entre VIH y SIDA.
El VIH (Virus de Inmunodeficiencia Humana) es un retrovirus que afecta principalmente las células del sistema inmune, debilitando las defensas del cuerpo. Almacena su información genética en ARN y, mediante una enzima especial, transforma su ARN en ADN para insertarse en las células del huésped, obligándolas a fabricar más virus. Este mecanismo explica por qué el tratamiento debe mantenerse de por vida, ya que los fármacos controlan la replicación, pero no eliminan el material genético integrado.
La infectóloga Silvina Ivalo retomó los conceptos básicos, explicando: “El VIH es el virus de la inmunodeficiencia humana. Produce una infección del sistema inmunológico, frecuentemente asintomática durante la primera fase, y puede durar meses o años sin manifestarse clínicamente”.
Por otro lado, el SIDA (Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida) no es lo mismo que el VIH. El SIDA es la etapa avanzada de la infección por VIH, que ocurre cuando el virus ha dañado gravemente el sistema inmunitario y se desarrollan complicaciones. Si la infección se controla adecuadamente, la mayoría de las personas con VIH nunca desarrollarán SIDA.
Ivalo añade que el SIDA “es la forma en que se expresa el estadio avanzado de la infección por el VIH, cuando ya existen manifestaciones clínicas significativas y enfermedad. En general, transcurren años antes de su aparición”.
En Argentina, más del 98% de las infecciones se producen por relaciones sexuales anales o vaginales sin preservativo. La transmisión también puede ocurrir por compartir agujas o elementos cortopunzantes, o durante el embarazo, parto o lactancia si no hay cuidados adecuados. Sin embargo, el VIH no se transmite por abrazar, besar, compartir mate, vasos, platos, duchas o baños.
Avance científico clave
Los avances biomédicos han transformado radicalmente la vida de las personas con VIH. El tratamiento antirretroviral, que consiste en la combinación de fármacos de alta eficacia, logra frenar por completo la replicación viral hasta niveles indetectables en la sangre en el 95% de los casos con adherencia adecuada.
Este logro no solo evita la progresión al SIDA sino que también introduce el principio I=I (Indetectable = Intransmisible).
El concepto I=I implica que una persona con carga viral indetectable mantiene su sistema inmunológico funcional, no transmite el virus por vía sexual y, fundamentalmente, su esperanza de vida se vuelve similar a la población general.
La doctora Valeria Valko precisó que esta evidencia científica demuestra que “una persona con VIH en tratamiento y con carga viral indetectable durante al menos seis meses no transmite el virus por vía sexual”.
Desafío de la juventud
La prevención del VIH se entiende hoy como un enfoque combinado que complementa el uso de preservativos (externo o interno), que sigue siendo esencial, con estrategias farmacológicas:
1. PrEP (Profilaxis Pre Exposición): Un método preventivo para personas sin VIH con mayor riesgo de exposición, que ofrece una eficacia cercana al 99%.
2. PEP (Profilaxis Post Exposición): Una medicación de emergencia que debe iniciarse dentro de las 72 horas posteriores a una situación de riesgo.
A pesar de estos avances y herramientas, la juventud es el grupo que más preocupación genera. Los datos de UNICEF muestran que 370.000 jóvenes de 15 a 24 años contrajeron VIH en 2024, pero la cobertura de testeo en este grupo es baja, alcanzando menos del 30% en algunas regiones.
La infectóloga Ainoha Vilariño explica que el aumento de ITS se debe, entre otros factores, “al inicio de las relaciones sexuales a edades tempranas, el uso inconsistente de métodos barrera y la falta de información clara”.
Vilariño añade que el grupo joven concentra gran parte de los nuevos diagnósticos porque “se testean menos”.
Silvina Ivalo enfatizó la importancia del diagnóstico oportuno.
“Realizar un test anual es lo recomendado para aquellas personas sexualmente activas. En situaciones de riesgo, podría realizarse con mayor frecuencia”.
Testeo gratuito
El diagnóstico oportuno es crucial, ya que brinda mayores posibilidades de mantener la calidad de vida y permite que la infección, con tratamiento adecuado, se convierta en una enfermedad crónica.
En Argentina, el test de VIH es un paso simple, voluntario y confidencial. Es gratuito en hospitales o centros de salud públicos de todo el país, no es requisito presentar documento de identidad u orden médica, ni ayuno para realizarse la prueba.
En Bahía Blanca, el acceso al testeo se garantiza en diversos puntos:
--Centro de Prevención y Promoción "Héroes de Malvinas": Caronti 76. Lunes a viernes de 11 a 14 hs. Se realiza sin turno ni orden médica.
--CPA (Centro de Prevención de Adicciones): Necochea 945. Lunes de 8 a 12.
--CAPS Ingeniero White: Lautaro y Paul Harris. Horario: 16 a 18.
--CAPS San Dionisio: Pacífico 200. Martes y jueves de 8:30 a 10.
--CAPS Antonio Menghini: 25 de Mayo 396. Horario a coordinar.
Además, la cobertura de tratamiento y la asistencia integral están garantizadas por el sistema de salud en la provincia de Buenos Aires. La Región Sanitaria I y el Hospital Penna ofrecen la atención integral y los medicamentos necesarios para el tratamiento. Actualmente, más de 20 mil personas reciben tratamiento para VIH en el subsistema público bonaerense.
Los datos de la Provincia de Buenos Aires indican un esfuerzo sostenido en la prevención: durante 2024, se distribuyeron 11.614.752 preservativos, se ampliaron los efectores de diagnóstico rápido y se iniciaron cerca de 150 tratamientos de PrEP.
El desafío para Bahía Blanca y toda la Región Sanitaria I es claro: transformar la creciente preocupación estadística en una acción concreta, recuperando la prevención activa y garantizando que el acceso al diagnóstico, que es gratuito y confidencial, se convierta en un hábito para la población sexualmente activa. Solo con información clara, acompañamiento profesional y redes de contención, será posible evitar que el "combo letal" de tabú, costo y desinformación continúe haciendo estragos en la salud pública.