Confirman la megainversión de una planta de GNL en Bahía

Redacción de La Nueva.

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El presidente Alberto Fernández confirmó en su discurso de hoy ante la Asamblea Legislativa que la megainversión de las petroleras YPF y Petronas (Malasia) para construir una planta de GNL con el gas producido en Vaca Muerta tendrá como sede el puerto de Bahía Blanca. 

Días atrás, emisarios de ambas firmas se habían reunido en nuestra ciudad con el titular del Consorcio de Gestión del Puerto, Federico Susbielles, para realizar una reserva de tierras en la zona costera. 

De todos modos, aún no se había ratificado que la inversión, que en una primera etapa insumirá unos 10.000 millones de dólares, se realizaría en nuestra ciudad, ya que también se hablaba de la posibilidad de una radicación en la provincia de Río Negro.

Fernández explicó que "sobre finales de agosto de 2022 firmamos un acuerdo entre YPF y Petronas" para construir un gasoducto de más de 600 kilómetros y una planta de licuefacción. 

Un paso más para la llegada de una megainversión al puerto de Bahía

“Será utilizado para llevar el gas de Vaca Muerta a Bahía Blanca, procesarlo allí y exportarlo al mundo a través del Atlántico”, manifestó en la inauguración de las sesiones ordinarias del Congreso de la Nación.

A principios de febrero, durante una visita a nuestra ciudad, el gobernador bonaerense Axel Kicillof se había referido a este proyecto, asegurando que “todo indica que va a ocurrir en Bahía Blanca”.

“Bahía, con su Polo Petroquímico, tiene un potencial enorme. Cuando esté terminado el gasoducto Néstor Kirchner nos dará disponbilidad para ampliar las plantas y avanzar en la industrialización del gas en todas sus formas”, agregó.

Beneficios y desarrollo

Esta iniciativa permitirá el desarrollo de áreas de shale gas en Vaca Muerta, la construcción de la infraestructura de transporte hacia la costa bonaerense, de una planta de licuefacción y una terminal marítima que se podría localizar en Bahía Blanca.

Todo ese desarrollo generará miles de puestos de trabajo, impulsará el desarrollo de nuevas industrias y fortalecerá la economía de miles de pequeñas y medianas empresas, además de concretar el esperado proceso de industrialización del gas natural de Vaca Muerta, la segunda mayor reserva en su tipo del mundo.

También atenderá la demanda mundial de gas, donde permitirá sustituir a fuentes de energía más intensivas en carbón, contribuyendo a reducir las emisiones de gases efecto invernadero.