Con "La Industrial" cerró la panadería más antigua de la ciudad
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Mario R. Minervino / mminervino@lanueva.com
Luego de 96 años de funcionar en manos de la misma familia, cesó de manera definitiva su producción la panadería La Industrial, ubicada en calle Sarmiento al 300, una de las más antiguas de la ciudad.
Su historia se remonta a 1922, cuando el comercio fue adquirido por Nazareno De Angelis, comenzando a operar en calle Zelarrayán 269.
En ese mismo lugar funcionaba, desde 1900, la panadería homónima, propiedad de Miguel Caviglia, que había iniciado su actividad unos años antes en un local de Estomba y Roca.
Aquí se plantea entonces la posibilidad de dar continuidad a la antigüedad de la panadería, asumiendo que el cambio de propietario no interrumpe esa línea, con lo cual la trayectoria de La Industrial supera el siglo.
La masa
En sus primeros años, La Industrial promocionaba su elaboración electromecánica de pan caliente, "mañana y tarde", además de la especialidad en galleta marinera. Si se discaba el teléfono 1249 se podían hacer pedidos a domicilio.
A Nazareno lo siguieron al frente del comercio sus descendientes, Camilo, Néstor y, actualmente, Mariano.
Precisamente éste último realizó, el sábado 15 de septiembre, la última horneada de pan, una producción que ya no era para la venta en el local propio --que cerró a principios de año-- sino para proveer otras bocas de expendio.
La panadería ocupaba desde 1934 al inmueble de calle Sarmiento 330, el local de planta baja un casona de dos plantas de líneas art déco.
Ese lugar quedó ahora desocupado, mantiene su mobiliario, algunos de cuyos componentes son verdaderas joyas, por caso una caramelera y una de las primeras balanzas eléctricas que llegó a la ciudad.
Las causas del cierre se relacionan, en parte, con la actual situación económica, el incremento de las gastos fijos, aunque también pareciera ser un ciclo cumplido porque, según mencionó su propietario, "la panadería sigue siendo buen negocio".
"La Industrial" cierra una parte trascendente del comercio local. Su nombre, propio de los usos de otros tiempos, compartió el rubro con las panaderías La Estrella, La Moderna, La Vencedora, La Hermosura, La Porteña y La silenciosa, entre tantas.
La más antigua
No es fácil establecer con precisión cuál es la panadería más antigüa de la ciudad. A veces a los propios dueños les cuesta establecer sus fechas fundacionales. Porque no siempre el negocio tuvo el mismo nombre, o se han vendido sus fondos de comercio o se han mudado.
Los datos disponibles y confiables indican que las dos panaderías más antiguas de la ciudad están en Villa Mitre.
De 1910, La Flor del día, en Falucho y XX de Septiembre. De 1917, La Primavera, de Washington 154.
En este segundo caso el lugar se llamó primero La Favorita, luego algunos empleados compraron el fondo de comercio y se mudaron, con lo cual "se llevaron el nombre". Desde el 21 de septiembre de 1971 lleva el nombre de la estación de las flores. Una panadería del centro, La Nueva Sirena, figura en algunas guías de la ciudad de 1908, aunque con una ubicación distinta a la actual.