Elecciones en Francia: partidos de derecha e izquierda rechazan una coalición con Macron
El Nuevo Frente Popular, de izquierda, le exige que reconozca que son ellos los que consiguieron la mayoría relativa de bancas.
La carta del presidente Emmanuel Macron a los franceses, enviada cuando se dirigía a la cumbre de la OTAN en Washington, enfureció a unos y a otros del espectro político. Si bien la segunda vuelta de las elecciones legislativas no produjo una mayoría clara, Emmanuel Macron, decidió tomarse su tiempo para reestructurar su sistema de gobierno.
Tres días después de la segunda vuelta de las elecciones legislativas, el Presidente de la República pidió a las “fuerzas políticas que se reconocen en las instituciones republicanas” que lleguen a “compromisos”, condición que plantea para nombrar un primer ministro.
En su carta a los franceses, publicada el miércoles en la prensa diaria regional, el presidente pidió encontrar “compromisos”, condición previa que condiciona el nombramiento de un primer ministro correspondiente a este arco parlamentario. Con la esperanza de acelerar la “aclaración” que pidió, descartando a la ultraderecha de Reagrupación Nacional (RN) y la ultraizquierda de La Francia Insumisa (LFI), parte del Nuevo Frente Popular, que salió primero.
La derecha conservadora no piensa formar una coalición con él . El Nuevo Frente Popular, de izquierda, le exige que reconozca que son ellos los que consiguieron la mayoría relativa de bancas, en una elección donde —según el presidente— “nadie ganó” tras su inconsulta decisión de disolver la Asamblea Nacional y llamar a elecciones anticipadas. Aunque perdió, la ultraderecha consiguió avanzar con más bancas. La mayoría absoluta es de 289 bancas en Francia.
El Nuevo Frente Popular, con el mayor número de diputados (182) en la nueva legislatura, exige gobernar y enviar a uno de los suyos como primer ministro al palacio de Matignon.
El fundador de Francia Insumisa, Jean-Luc Mélenchon, dijo en su red social: "Es el regreso del veto real al sufragio universal". Se burló también el ex candidato presidencial, que denuncia "travesuras" e insta a Emmanuel Macron a “inclinarse " ante el veredicto de las urnas.
El secretario nacional del partido comunista francés, Fabien Roussel, cree que el Presidente de la República "debe aceptar los resultados de las urnas" y "permitir a la Asamblea constituir un gobierno en el marco de una mayoría relativa".
"Es una negación de la realidad", dijo Roussel cuando Macron argumenta que “nadie ganó". Roussel pidió al Jefe de Estado que "deje de evitar el resultado" del domingo. Lo acusó de estar "en una forma de negacionismo". Su líder, Marine Tondelier, también recordó que “Emmanuel Macron fue el único que decidió esta disolución”.
“Que ahora saque las consecuencias de su resultado”, pidió. En cuanto a la parlamentaria ecologista Sandrine Rousseau, atacó la comunicación del Elíseo: "Una carta de prestigio dirigida al pueblo para decirle que no le importa".
“La única coalición es contra Macron”
Desde la Asamblea Nacional, Gilles Le Gendre, un ex macronista, periodista económico y ex fiel al presidente, sintetizó el nuevo espíritu. ”La Macronia se acabó. La única coalición que existe es contra el presidente de la República”, dijo. Macron ni siquiera le anunció que no iba a ser postulado como diputado tras la disolución de la Asamblea Nacional. Como él, hay ex macronistas furiosos.
El problema para Macron es el voto de censura para quien elija, que hará caer su gobierno por el Parlamento. “Llamaré a mis amigos a censurar este gobierno si el primer ministro proviene del Nuevo Frente Popular”, amenazó Gérard Larcher, republicano conservador y presidente del Senado.
Lo mismo hará Jean Luc Mélenchon con la Fuerza Insumisa. Francia está bloqueada con este resultado, con una escena de inestabilidad “a la italiana”.
Pero antes probablemente la izquierda se movilice con una gran marcha a Matignon para recordarle a Macron “que debe respetar los resultados de la elección”. (Clarín)