¿Cómo es el fondo de cese laboral que impulsa el gobierno?
La Comisión Nacional de Valores creó un nuevo régimen de fondos de inversión destinados a ceses laborales.
Recibido en 1993, acumula 28 años de trayectoria en el periodismo local. Ex jefe de la sección Deportes y La Ciudad y actual secretario de Redacción de La Nueva. Ex profesor de los dos institutos de Periodismo de la ciudad. Especialista en temas deportivos, sociales y gremiales.
La reforma laboral que impulsa el gobierno nacional desde el año pasado representa un cambio significativo en la regulación laboral de Argentina, buscando modernizar el marco normativo y sustituir esquemas vigentes por décadas.
Esta iniciativa, que se espera traiga cambios en el transcurso de este año y el próximo, abarca diversos derechos laborales como las indemnizaciones por despido y las horas extras.
La Comisión Nacional de Valores (CNV) ha desempeñado un papel crucial en la implementación de una de las reformas clave: el Fondo de Cese Laboral.
Un nuevo paradigma
La CNV, en colaboración con el Ministerio de Economía, ha creado un nuevo régimen de fondos de inversión destinados a ceses laborales. Este sistema busca sustituir la indemnización por antigüedad estipulada en el artículo 245 de la Ley de Contrato de Trabajo N° 20.744, así como otros rubros indemnizatorios.
El presidente de la CNV, Roberto Silva, señaló que esta propuesta tiene el potencial de "transformar profundamente la forma en que se implementan y acuerdan las indemnizaciones".
Cabe recordar que el Sistema de Fondo de Cese se establecerá mediante los Convenios Colectivos de Trabajo (CCT) y será administrado a través de Fondos Comunes de Inversión Abiertos (FCI) o Fideicomisos Financieros (FF), con la CNV como autoridad de supervisión.
Las principales características de este fondo son:
--Definición flexible: Las cuotapartes o valores fiduciarios podrán ser definidos a nivel individual, empresarial o sectorial.
--Aportes del empleador: Las partes tendrán la libertad de establecer el porcentaje de la remuneración o monto fijo que aportará el empleador, así como la periodicidad de dichos aportes.
--Inembargabilidad: Los fondos serán inembargables.
--Exclusividad de suscripciones: Los instrumentos creados bajo este régimen solo podrán recibir suscripciones vinculadas a contribuciones y/o aportes de empleadores y trabajadores.
--Cesión condicional: En caso de aportes realizados por los empleadores, las cuotapartes y valores fiduciarios estarán cedidos con condición suspensiva a favor de los trabajadores, la empresa o el sector correspondiente.
--Acceso al finalizar la relación laboral: El empleador realizaría un aporte periódico (un porcentaje del salario) a un fondo o cuenta específica a nombre del trabajador, y al finalizar la relación laboral (por despido sin causa, renuncia o jubilación), el trabajador podría acceder a ese fondo acumulado.
--Cotización en el mercado de capitales: Se propone que estos Fondos de Cese Laboral puedan cotizar en el mercado de capitales, permitiendo a los trabajadores decidir cómo invertir ese monto aportado en previsión de su desvinculación. Los empleadores también podrían optar por contratar un sistema privado de capitalización.
Beneficios y riesgos
Los promotores de esta reforma, incluido el gobierno, sostienen que la medida fomenta los valores de la libertad económica y dinamiza el mercado de capitales. En cuanto a las indemnizaciones, se espera que el nuevo sistema traiga los siguientes beneficios:
--Reducción de litigiosidad: Al ser un sistema de aportes preestablecidos, se buscaría disminuir la cantidad de juicios laborales relacionados con indemnizaciones, combatiendo la "industria del juicio" señalada por empresarios.
--Mayor previsibilidad para empleadores: Las empresas tendrían un costo de despido más previsible y distribuido en el tiempo, lo que podría fomentar la creación de empleo formal.
--Mayor movilidad laboral: Para los trabajadores, el fondo sería un capital acumulado que los acompañaría a lo largo de su carrera, facilitando la transición entre empleos y reduciendo el miedo al despido.
Sin embargo, la iniciativa ha generado diversas reacciones y críticas. Algunos sectores sindicales y juristas laborales expresan preocupación por una posible desprotección del trabajador ante despidos injustificados si el fondo acumulado no resulta suficiente, o si el sistema de capitalización no garantiza el valor real de los aportes.
Otros desafíos incluyen la definición del porcentaje de aporte y su sostenibilidad a largo plazo, así como la necesidad de un mecanismo de transición claro para no perjudicar los derechos adquiridos.
Es crucial destacar que la adopción de este Fondo de Cese Laboral es optativa para los gremios y debe ser acordada en el marco de las CCT.
Otros cambios
Además del Fondo de Cese, la reforma también modifica las causas que los empleadores pueden utilizar para despedir sin tener que pagar indemnización, conocidas como despido con justa causa.
Se introdujeron como justa causa motivos relacionados con medidas sindicales, como la participación en tomas de empresas o bloqueos del establecimiento, o acciones que afecten la libertad de trabajo mediante una medida de fuerza, intimidaciones o amenazas.
En estos casos, el empleador debe intimar al trabajador para que cese la conducta injuriosa antes de proceder al despido.
En cuanto a las horas extras, la Ley de Contrato de Trabajo y la Ley de Jornada Laboral establecen una jornada máxima de 8 horas diarias o 48 semanales.
Las horas extras se pagan con un recargo del 50% en días hábiles y del 100% en sábados después de las 13 horas, domingos y feriados, con un tope de 30 horas mensuales o 200 anuales. Si bien este esquema busca proteger al trabajador, el sector empresario lo ha considerado demasiado rígido.
La reforma busca flexibilizar la implementación y compensación de las horas extras. En el proyecto de ley, se estipula que el empleador podrá disponer "de manera colectiva" del régimen de horas extras, utilizando formatos como banco de horas o francos compensatorios, en lugar de pagarlas.
En resumen, la reforma laboral impulsada por el gobierno de La Libertad Avanza busca un cambio de paradigma, con el Fondo de Cese Laboral y la flexibilización de las horas extras como ejemplos claros.
El objetivo es dinamizar el mercado laboral y fomentar la productividad, pero la clave estará en lograr un equilibrio entre las necesidades empresariales y la protección de los derechos de los trabajadores en las negociaciones de los CCT.