Un parque acuático dentro de una gran caja de vidrio
Una caja de vidrio escalonada y facetada contiene un parque acuático en Francia.
Es periodista, ingeniero civil y docente de la Universidad Nacional del Sud en materias relacionadas con el Patrimonio arquitectónico y el planeamiento urbano. Ha publicado notas en revistas Vivienda, Todo es Historia, Obras & Protagonistas y Summa +. Participa en varios micros radiales referidos a la historia de Bahía Blanca. En dos ocasiones recibió primera mención por parte de ADEPA en el rubro Cultura e Historia.
Cuando en 1851 el jardinero Joseph Paxton diseñó el Palacio de Cristal para albergar la Primera Exposición Universal, realizada en Londres, su edificio horrorizó a muchos: una gran caja de vidrio sin referencia alguna a un estilo de pasado. Sin embargo, esa obra estaba marcando un nuevo camino para la arquitectura. Esa es la estética que sigue este impactante parque acuático ubicado en Naully-Romainvilliers, Francia.
La dirección de los vientos y la trayectoria del sol determinó la distribución del proyecto, protegido de los vientos invernales y abierto a las brisas frescas en los climas cálidos.
Como una escultura de origami, el parque se asemeja a un paisaje que se despliega, culminando a unos 35 metros, un paisaje construido que se eleva hacia el cielo. Si bien contrasta con la topografía relativamente plana del lugar, no aparece como un elemento impuesto sino como una extensión del paisaje.
Ubicado junto a una gran extensión de agua, el parque combina jardines colgantes y juega con el agua y la transparencia. Las terrazas se utilizan para oxigenar el lago y se suman cascadas, niebla, vapor y plantas acuáticas.
La estructura ofrece un mirador hacia el interior y con vistas de Villages Nature y del paisaje.
Todo vida
A medida que el origami se despliega, crea espacios con paneles de vidrio que dejan entrar la luz y brindan una sensación de continuidad entre el interior y el exterior. En la parte superior, una cúpula transparente permite nadar mientras se contempla el cielo. La estructura y la cubierta se han optimizado para acentuar esa presencia del cielo.
A nivel del agua, existe una completa continuidad con el exterior: los bañistas pueden salir sin obstáculos.
El proyecto, con su acumulación de niveles, se amplía con soláriums, terrazas y restaurantes. Una barcaza-auditorio llega a distintas horas para ofrecer espectáculos.
La entrada al parque se conecta con una explanada alrededor de un foro y un polideportivo. El vestíbulo, que da al lago, conduce a los vestuarios y al parque, una extensión de agua salpicada de islas de diversos tamaños y funciones.