Sportivo se fue con bronca, pero ganó y se animó a decir la palabra "campeón"
El tricolor derrotó anoche a San Lorenzo, como visitante, por 72 a 66. "Era un rival para medir dónde estamos parados", dijo su entrenador.
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Por Mauro Giovannini
Twitter: @MGGiova
Mail: mgiovannini@lanueva.com
El presente torneo local de segunda división llegará a su fin allá por junio del año que viene; sin embargo, es casi unánime en el ambiente el favoritismo por dos equipos para pelear bien alto.
San Lorenzo y Sportivo Bahiense se vieron las caras anoche en el Román Avecilla y, si la lógica acompaña, volverán a cruzarse más delante por los porotos grandes. Esta vez fue 72 a 66 para la visita, en el marco de la tercera fecha.
Eso sí, difícilmente se repita un inicio tan desigual como el de anoche.
La visita largó ¡16 a 0 al frente! jugando al ritmo de Joaquín Tuero, cargando el tablero ajeno y plantándose firme ante un San Lorenzo irresoluto.
El juego estuvo 3m15 sin goles y el local recién anotó a 2m24 del final del 1C, vía Branciforte.
"Estamos teniendo buenos arranques, pero obviamente no es real una diferencia de 20 puntos entre Sportivo y San Lorenzo. Y menos en un tiempo. Después se dio un juego friccionado, al que nos llevaron, porque a nosotros no nos gusta y tuvimos el temple para sacarlo adelante más allá de que nos equivocamos mucho en los últimos cinco minutos", le dijo a La Nueva. el DT Miguel Loffredo.
El arranque del 2C fue una continuidad más allá de que saltaron a la cancha varios relevos.
Así, dos triples de Depaoli y Manuel García le posibilitaron al tricolor lograr 20 de luz (9-29). Y más tarde, la máxima: 16-38 a 1m25 del descanso largo, tras bomba de Cristian Miguel.
"Fausto vino de última y nos está dando una mano muy grande. Lo conocía de El Nacional, lo dirigí ahí. Estuvo dos años sin jugar y ahora por suerte está acá con nosotros", contó el coach en relación a Depaoli, su alternativa de lujo para la base.
Claudio Queti movió los hilos y apeló a un cambio de predisposición para afrontar el complemento.
Además, fue clave que el dueño de casa empezó a anotar de afuera (hizo 0-10 en el primer tiempo): triples de Ferrari, Fortelli y Agulló despertaron a San Lorenzo en el 3C y poco a poco lo fueron metiendo en juego.
"Este un equipo que nos iba a servir para medir dónde realmente estamos parados. Nosotros buscamos salir campeón y sabíamos que San Lorenzo era un buen parámetro porque también se armó para estar arriba", sostuvo el Colo.
Si bien la diferencia continuaba siendo grande, Sportivo empezó a tener problemas en el traslado y cada vez anotaba de manera más espaciada.
El local recortó a 12 la ventaja en el amanecer del 4C y bajó la diferencia a un dígito (57-66) aprovechando 3m20 de sequía visitante.
Un triple de Asnaghi despertó al tricolor (57-79), aunque Ferrari, una bomba de Fortelli y una penetración de Agulló le devolvieron la esperanza a San Lorenzo: 64-70, con 58s por delante.
Allí, Sportivo gozó de viajes a la línea de Tajan que le cortaron el ritmo al local y, por fin, pusieron cifras definitivas al cotejo.
"Nos puso de malhumor el cierre porque controlamos el partido 35 minutos y nos nos puede pasar que al final erremos los caminos y nos apresuremos. Es mérito también de la defensa de ellos, que fue más allá del límite, pero estamos enojados porque no nos puede pasar, tendríamos que haber cerrado más tranquilos", señaló Loffredo.
"Ojo, también nos vamos contentos porque le ganamos a un rival directo, en una cancha muy difícil, contra un equipo que juega. Hay muchas cosas por mejorar", sentenció.
Síntesis
San Lorenzo (66): A. Agulló 14, N. Muñóz 0, F. Ferrari 20, N. Diez 0, P. Pollio 3 (Fi); J. Coria 4, S. Branciforte 5, M. Montanaro 5, L. Fortelli 15 y T. Soria 0. DT: C. Queti.
Sportivo Bahiense (72): J. Tuero 5, F. Sastre 8, Y. Asnaghi 9, T. Tajan 10, C. Miguel 17 (Fi); F. Depaoli 11, M. Ayala 4, M. García 8, E. Miguel 0 y S. Simón 0. DT: M. Loffredo.
Cuartos: San Lorenzo, 5-17; 21-43 y 43-57.
Tiros libres: San Lorenzo, 15-31 y Sportivo, 11-20.
Cinco faltas: Coria (SL) y García (SB).
Árbitros: Emanuel Sánchez, Nicolás Larrasolo y Santiago López Hoyos.
Estadio: Román Avecilla.