"Seguimos en una situación compleja", advirtió el secretario de Salud municipal

Redacción de La Nueva.

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   Pablo Acrogliano, secretario de Salud de Bahía Blanca, señaló esta mañana que "seguimos en una situación compleja más allá de las fases y de contar camas" y advirtió que "falta mucho para estar tranquilos", al analizar la influencia de la segunda ola de coronavirus en la ciudad.

   "En líneas generales, la situación no se ha modificado sustancialmente. Seguimos con un número alto de casos activos; si bien está con una tendencia a la baja, es un número alto y significa que los hospitales tanto públicos como privados siguen con una ocupación alta de camas de terapia y de clínica médica", detalló.

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   En diálogo con Panorama, por LU2, el profesional contó además que "preocupa que la zona está bastante alborotada".

   "Todo el sistema está en su máxima capacidad instalada y a eso hay que sumarle al agobio y el cansancio del personal de salud, que no tiene recambio. Por eso, desde hace tiempo venimos haciendo hincapié en el cuidado de los vecinos", mencionó.

   Eso, sumado al devenir de la pandemia porque parece que ha medida que vamos avanzando no nos da descanso —continuó—. Cuando parecería que está todo medianamente controlado aparecen cepas nuevas o circunstancias nuevas que obligan a uno a mantenerse alerta".

   Asimismo, Acrogliano ofreció su visión de las últimas decisiones que adoptó la Provincia para habilitar las clases presenciales en los distritos del AMBA y no en Bahía, que continuará en fase 2.

   "No parece haber una lógica de cómo se toman las decisiones. Si bien hay datos objetivos, uno mira partidos del conurbano que están en peores situaciones que Bahía Blanca y están dando clases. Esa lógica yo no la entiendo", respondió.

   "Tenemos que trabajar para empezar a convivir con este virus; es algo lógico. No podemos estar eternamente recluidos", completó.