Bahía Blanca | Sabado, 20 de abril

Bahía Blanca | Sabado, 20 de abril

Bahía Blanca | Sabado, 20 de abril

No paran las estafas telefónicas: se denuncia un caso cada dos días

En poco más de un mes se recepcionaron 23 presentaciones. Un falso premio de una petrolera o la reparación histórica de ANSES son los “cuentos” más comunes.

Fotos: Pablo Presti-LN.

   No es novedoso el accionar de delincuentes que utilizan diversos discursos para engañar a las personas con falsos premios o supuestos pagos, con la única intención de obtener información de las víctimas y vaciar sus cuentas bancarias.

   En el contexto de la pandemia esa modalidad se exacerbó a lo largo del país, y nuestra ciudad y la zona no fueron la excepción.

   Durante los últimos 40 días, según fuentes oficiales, se recepcionó en la fiscalía bahiense un promedio de una denuncia cada dos días por un hecho de este tipo.

   Según la estadística del Ministerio Público Fiscal, durante el mes de julio se realizaron 19 presentaciones por estafas que tenían estas características, mietras que otras 4 fueron efectuadas en los primeros 10 días de agosto.

   Estos casos, según indicaron los voceros, son investigados por los fiscales Diego Conti y Marcelo Romero Jardín, quienes se encuentran al frente de las UFIJ N° 2, 7 y 8.

   A esos números hay que sumarle la cifra “negra”, de varios hechos no denunciados o tentativas abortadas. 

   “Periódicamente se informa y lleva adelante tarea preventiva, brindando una serie de consejos, pero los hechos siguen ocurriendo. Por estos días, con la gente hiperconectada por la pandemia, estos delincuentes tienen más tiempo y mayor cantidad de potenciales víctimas”, mencionó un vocero policial, consultado por “La Nueva..”

Sorteo ficticio

   Varias estrategias utilizaron los estafadores para abordar a las 23 personas que han sufrido este tipo de hechos en estos días.

   Una de ellas tiene que ver con el anuncio de un supuesto premio otorgado en un sorteo por una empresa petrolera de origen europeo.

   Uno de los damnificados contó que recibió un llamado realizado desde un número con prefijo correspondiente a Capital Federal, en el que una persona le indicó que había obtenido la suma de 200 mil pesos.

   El interlocutor (se identificó con un nombre y apellido) le refirió que para obtener el dinero debía concurrir a un cajero y realizar una transacción automática manual, exigiéndole además que no cortara la comunicación.

   Una vez que la víctima estuvo frente al aparato, esta persona le dijo que transferiría la llamada al Banco Central, para que un supuesto representante de esa entidad lo ayudara a completar la transacción.

   Allí entró en acción otro hombre, quien le indicó una serie de pasos para generar una clave token (de seguridad), la que debía proporcionarle para finalizar la operatoria.

   El hombre describió que siguió las indicaciones y tras concluir el trámite, con el delincuente siempre en línea, se retiró del cajero y permaneció en la puerta. Poco después, mientras aguardaba en el lugar, una persona se acercó y le advirtió que posiblemente se trataba de una estafa.

   Ante esto la víctima regresó al cajero y al ingresar en su cuenta advirtió el faltante de casi 100 mil pesos, que habían sido transferidos por los ladrones.

Otra variante

   Una modalidad repetida en los últimos meses es aquella en la que el delincuente se hace pasar por un abogado de ANSES.

   Una mujer denunció recientemente que un hombre la llamó a su casa (también desde un teléfono con prefijo de Capital) y le indicó que se desempeñaba como letrado del citado organismo, y que tenía para cobrar una suma de dinero correspondiente a la reparación histórica.

   El sujeto, que manejaba cierta información de la víctima, le pidió que se dirigiera al cajero más cercano y le brindara el número de un celular para seguir en contacto y ayudarla a realizar la transacción.

   Posteriormente el estafador se volvió a comunicar y la fue guiando en el proceso, pidiéndole que le indique el nombre de usuario, la clave generada y el número de documento.

   La víctima describió que esa persona le repetía que sea discreta y que no avise a nadie del llamado.

   Por último, le brindó los datos de un turno para un supuesto trámite que debía realizar en la sede local de ANSES y prometió que la volvería a llamar para confirmar el depósito.

   La damnificada mencionó que al no recibir esa comunicación regresó al banco y al chequear los movimientos de su cuenta notó que los delincuentes habían solicitado on line un préstamo de casi 300 mil pesos y un adelanto de haberes por unos 15 mil.

   También comprobó que ese dinero había sido acreditado a su cuenta y posteriormente debitados en 6 transacciones diferentes.

   Es dificultosa la investigación de este tipo de maniobras, admitió una fuente judicial.

   El vocero señaló que los pedidos de informes requeridos a entidades bancarias y compañías telefónicas tienen demoras, lo que atenta contra el resultado de la causa, ya que otorga tiempo a los estafadores para descartarse de elementos que pudieran comprometerlos.

   También indicó que estos individuos utilizan chips que adquieren fácilmente en comercios y que generalmente los datos de ese usuario no se corresponden con el destino que tuvo el dinero sustraído.

Casos que se repiten

   “Todos los días tenemos noticias de gente que se acerca o nos hace llegar su consulta por distintas situaciones relacionadas con premios que les dicen haber ganado o préstamos que sacan a su nombre como consecuencia de alguna maniobra en la que resultan víctimas”, sostuvo la doctora Pamela Cantero, asesora letrada de la Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC).

   Señaló que, en la mayoría de los casos, los damnificados son conducidos hacia un cajero automático, donde mediante engaños les quitan información para posteriormente solicitar préstamos on line y bloquear la cuenta del usuario, por lo que este no puede acceder para chequear los movimientos.

   “Para cuando la gente se da cuenta de la situación y puede desbloquear la cuenta de home banking se encuentra con el préstamo otorgado, el dinero retirado y cuotas a pagar de un efectivo que nunca solicitó”, mencionó Cantero.

   Desde el comienzo de la pandemia -según dijo- los hechos se han repetido, pero en los últimos días crecieron.

   Agregó que en esos casos “aconsejamos hacer la denuncia penal y concurrir al banco, para luego hacernos llegar esos elementos y ver si podemos realizar algún tipo de gestión. No aseguramos que los resultados vayan a ser favorables, pero ante la repetición de estos hechos los bancos están un poco más atentos y teniendo en cuenta de que le pasa a mucha gente”.

   También admitió que los delincuentes van modificando las modalidades que implementan.

   “Una que detectamos recientemente es la que  hace un estafador con una operación de compra por Internet, pidiendo los datos del vendedor para realizar el depósito del pago. Por ejemplo, compran algo por 20 mil y luego llaman a quien les vendió el elemento diciéndole que por error le depositaron 200 mil y le piden la devolución”.

   Cantero describió que el delincuente le indica al damnificado que lo van a llamar de su banco, cosa que ocurre poco después, pero es una comunicación de un cómplice del sujeto.

   “La víctima cree que realmente existió una equivocación y lo hacen ir a un cajero, donde le sacan información y finalmente terminan bloqueando su cuenta y sacando un préstamo a su nombre”.

   En este sentido, resaltó la necesidad de no brindar claves o datos personales a desconocidos.

   “Ningún banco llama a tu teléfono y mucho menos se queda en línea hasta que vos vayas al cajero. También hay que desconfiar ante el aviso de la obtención de un premio, porque las empresas tampoco te van a avisar a través de un WhatsApp o un llamado que ganaste una camioneta o 200 mil pesos”, cerró.

Fallo a favor de un consumidor

   El juez en lo Civil y Comercial de La Plata, Carlos Catoggio, hizo lugar a una medida cautelar a favor de un consumidor que sufrió una estafa y no solo le robaron dinero sino que le sacaron un préstamo.

   El consumidor pedía clemencia a la entidad bancaria porque debía afrontar un crédito de 153 mil pesos que no había pedido.

   El juez dijo que una de las obligaciones de los bancos es que los servicios que ofrece sean brindados "con total seguridad para el cliente".

   El Banco Central, según indicó en el fallo, tiene una normativa que impone a los bancos contar con mecanismos de seguridad informática que garanticen la confiabilidad de la operatoria.