El premio mayor de Quiniela Plus, otra vez en Bahía Blanca
-
- copiado al portapapeles
-
- copiado al portapapeles
A las 8.30 de ayer sonó el teléfono en la casa central de la agencia de lotería Casa de la Suerte, de Brown 334.
--Me parece que gané el Quiniela Plus-- dijo alguien.
--Cantame el número que está al pie de la boleta y te confirmo-- contestó el empleado de la agencia.
"Ahí fue cuando lo vi en la pantalla y me saltó que ese era el número ganador", agrega Daniel Guglielmetti, quien fue el encargado de dar la buena noticia.
El ganador de 485.401,46 es una persona de unos 45 años y de clase media, que aún no se presentó a cobrar el premio y que por miedo --según le comentó al agenciero-- no quiso darse a conocer.
Igualmente Guglielmetti contó que no se lo notaba nervioso.
"Por la cantidad de plata que ganó, realmente lo noté tranquilo, por más que cuando confirmó que era el ganador se puso un poco loco y me llamó como tres veces más".
La apuesta fue realizada en la agencia 740044, de San Martín 193.
"Es una persona que conozco de haberla visto jugar en otras oportunidades. A veces venía acá (por la sucursal de Brown 334) y si no jugaba en otra", agregó Guglielmetti, quien trabaja en este rubro desde hace 31 años y que ya en otras oportunidades ha dado la buena nueva.
La que más recuerda es la que le ocurrió hace unos 15 años.
"Teníamos un cliente que por muchos años jugó al mismo número en el Gordo de Navidad. Pocos días antes de una Navidad se va de Bahía Blanca porque la empresa en la que trabajaba decide levantar su sucursal. Lo tuvimos que vender fraccionado y fue el número ganador como con dos millones de dólares. Fue una alegría y una pena".
¿Qué es Quiniela Plus?
El juego fue instituido por la Provincia de Buenos Aires y cuesta un peso. El apostador debe elegir 8 números del 0 al 99. En la quiniela provincial nocturna se sortean 20 números y, si entre esos hay ocho coincidencias, se quedará con el premio mayor, pero también hay ganadores con 7 y 6 aciertos.
Los 20 números que salieron sorteados anteayer fueron 2, 3, 15, 18, 20, 27, 29, 39, 43, 51, 52, 53, 61, 77, 80, 82, 90, 94, 95, 98.
Los antecedentes de los últimos 10 años
* 9/11/2004. Un bahiense de unos 50 años ganó 365.340,77 pesos también en el Quiniela Plus.
* 19/5/2004. Un apostador "pegó" los seis números de "La Segunda" del Quini 6, ganando 3.517.661 pesos (sin descuentos). El millonario jugó su tarjeta en la agencia 72.507/00, ubicada en Chiclana 108.
* 9/3/2004. Otro conciudadano devino en millonario al embolsar 3.800.000 pesos, con el Loto Desquite.
* 3/11/2003. Un apostador de nuestra ciudad ganó 8.352.667 jugando al Quini 6 en la agencia de Alsina 293.
* 26/2/98. Una tarjeta confeccionada en Pigüé logró los seis aciertos del Quini Seis tradicional, obteniendo 3.298.347 pesos. Aquel sorteo, el 486, favoreció a los números 4, 5, 12, 17, 21 y 25.
* 11/3/97. Un riocoloradense se adjudicó el Quini 6, en su modalidad "Revancha", haciéndose acreedor a un premio de 967.516,96 pesos. La apuesta ganadora fue confeccionada en la agencia Nº 16 ubicada en la calle Irigoyen 162.
* 2/6/97. El Quini 6 se repartió entre dos tarjetas confeccionadas en Bahía Blanca y Neuquén, coincidiéndose, en ambos casos, en marcar los números 3, 7, 15, 18, 19 y 25. La jugada 448 del sorteo tradicional repartía 2.134.109 pesos (sin descuentos). Aquí, la apuesta se hizo en la agencia de O'Higgins 610.
Punto de vista
Ese miedo a ganar
El miedo que alguien puede sentir por ganar una suma importante de dinero es el reflejo de la grave crisis social que atravesamos.
La diferencia que existe entre la gente que no tiene recursos económicos con la que los poseen, deriva en este miedo que se siente cuando alguien se encuentra con una cifra importante de dinero de la noche a la mañana.
Entonces, surge una paradoja porque lo que debería ser un motivo de festejo, un hecho compartido con amigos, vecinos o familiares, se transforma en un miedo debido a que la situación puede derivar en algo grave. La alegría se ve opacada y genera inseguridad.
En otro contexto, donde la gente tuviera las necesidades cubiertas, el ganador podría salir a la luz sin tantos temores.
Además, apostar es otro de los hechos derivados de esta situación de pobreza. La gente ve una salida mágica en el juego porque siente que el trabajo no le es redituable.
Gabriela Santarelli, autora de este comentario, es Licenciada en Psicología.