Ingeniero White: la fuerza de una comunidad que se reconstruye
Tras la inundación del 7 de marzo, Unipar añadió acciones claves a varias iniciativas que ya tenía en marcha para el bienestar de la comunidad.
Si algo ha caracterizado a Ingeniero White en el último tiempo es la capacidad de resurgir. La resiliencia se convirtió en un lenguaje compartido: adaptarse, acompañarse, trascender en comunidad y volver a levantarse. Hablar de nuestra historia reciente nos remite, inevitablemente, a esas imágenes de calles inundadas y a la urgente necesidad de ser solidarios.
Hoy, con algo de distancia, cuando el agua ya corrió y empezamos a poner en palabras lo vivido, lo que más permanece es el recuerdo de los cientos de brazos extendidos entre vecinos.
Las redes de contención que se tejieron no nacieron de un plan, sino del altruismo que distingue a nuestra comunidad.
En ese contexto, colaboradores de Unipar salieron a las calles, dejando en pausa sus propias preocupaciones para brindar ayuda concreta. Se entregaron miles de litros de lavandina para facilitar la limpieza, desinfección y saneamiento de hogares e instituciones, instalando bines de lavandina en puntos críticos y proveyendo bidones a organizaciones sociales, de toda la ciudad, que se transformaron en motor humanitario durante la emergencia.
Pero el compromiso de la compañía no terminó allí. El mismo comité que coordinó la respuesta a la crisis siguió trabajando para acompañar a los vecinos en la etapa de reconstrucción.
Así nacieron dos acciones claves: el ciclo de talleres de salud mental (“Sanar después de la Tormenta”) y una campaña de abrigo.
Los talleres ofrecieron un espacio de escucha y diálogo, acompañados por un equipo profesional, para ayudar a cada vecino a procesar lo vivido a su propio ritmo. Un espacio de seguridad psicológica acompañado por especialistas en trauma y emergencias que arropó el espíritu de los participantes durante las primeras semanas después de la inundación.
Tiempo después, a través del Consejo Comunitario Consultivo, se lanzó una campaña de abrigo para aliviar el crudo invierno a más de 400 vecinos, entregando frazadas y cobertores.
Hoy, el compromiso sigue vigente. Durante el Mes del Corazón, Unipar a través de sus redes sociales y canales de comunicación lleva adelante una campaña educativa sobre cuidados cardiovasculares.
También se organizó una jornada de capacitación en RCP, uso de DEA y primeros auxilios en el Centro Scout Don Ernesto Pilling para dotar a los participantes con herramientas para actuar ante una emergencia.
El Vivero Unipar, un proyecto pionero que acerca al entorno industrial espacios verdes, continúa aportando a la sustentabilidad local. Lo hace a través de su apoyo al plan municipal Reverdecer Bahía, que ya permitió la entrega de más de 9.000 árboles -desde 2023- para reforestar la ciudad y que estará realizando plantaciones en plazas de la localidad antes de fin de año.
También mediante su sponsoreo al programa Huertas de la Ciudad que promueve crear huertas comunitarias en escuelas y organizaciones sociales, llegando a que cientos de alumnos tengan conocimiento sobre alimentación saludable.
Cada una de estas iniciativas es una muestra concreta de cercanía y compromiso. Son la manera en que Unipar honra su propósito de ser un socio confiable en todas sus relaciones, trabajando junto a los vecinos para construir un presente más seguro, saludable y sostenible.
En este año tan especial, se celebra el 140° aniversario de Ingeniero White reconociendo que los valores de su gente —solidaridad, esfuerzo y resiliencia— son también los que inspiran la cultura de Unipar.
“Nos sentimos orgullosos de compartir esta historia y de proyectar juntos un futuro de nuevas conquistas, siempre al lado de esta comunidad que nos vio nacer y crecer”, señalaron desde la compañía.