El gran gusto que se dieron Bianca y Flor Donati, y el triunfo de Pacífico más allá de la derrota
Las hermanas volvieron a compartir cancha, esta vez en el Verde, que consiguió el segundo subcampeonato de su historia.
Cuando la bronca y la tristeza por la final perdida empiecen a quedar atrás definitivamente, Bianca y Florencia Donati, al igual que todo Pacífico, rescatarán muchísimos aspectos positivos del 2023 que acaba de terminar en materia deportiva.
Para las hermanas habrá sido el año del reencuentro dentro de una cancha, y para el club el orgullo de volver a codearse de cerca con la gloria, tras conseguir el segundo subcampeonato de su historia.
El verde, además, siendo el único equipo que por segunda vez logra romper la hegemonía de finalistas en este siglo, entre Monte (vigente tricampeón), Universitario y Sociedad Sportiva.
"La verdad que dentro de todas las emociones que estoy viviendo en estos momentos, el resumen del año es súper positivo. Volví a disfrutar de tenerla en la cancha a Bian y eso no se paga con nada, más allá del resultado. Yo sé que me voy a mi casa contenta y el balance del año va a ser super feliz, eso es lo que me puede llevar como resumen", reconoció Flor, minutos después de caer en la final extra ante Monte por shoot out y luego de una larga charla con el plantel.
"Lo que pensábamos internamente -reconoció Flor- es que capaz en 2021 (NdR: primera final de la historia para el club), cuando tuvimos la misma chance, no estábamos tan preparadas como ahora. Esta vez lo afrontamos con otra cabeza, con otra decisión y eso se notó en la cancha. Le peleamos de igual a igual a un equipo que vino a buscar su lugar, que es el que ya tenían, y el equipo demostró ser súper compacto. Yo sé que eso se va a valorar mañana, no son las mismas pibas que hace dos años, y a mí me eso genera un desafío para el año que viene seguir superándonos y ver si podemos lograr dar el salto", se ilusionó.
Con el fin de poder estar cerca de Las Leonas, Bianca regresó de su paso por Europa (fue campeona en Bélgica) y eligió Pacífico para hacer base en nuestro país.
Incluso, pese a que durante toda la semana entrenaba en el CeNARD con el Seleccionado, lo que implicaba viajar de Buenos Aires a Bahía cada fin de semana que había partido.
"Elegí Pacífico por su gente, obviamente por mi hermana, por Mote (Javier Soquiransky) y la verdad que me voy contenta. Obviamente que con bronca y desilusión, porque siento que el partido (la final) era nuestro, que el equipo tenía todo para ganarlo. Me voy con esa cuotita de un poquito de angustia, pero lógica de jugar finales. Pero después, el resto es todo muy positivo", analizó la defensora del verde y también parte del plantel de Las Leonas que mañana debutan en otra edición de la FIH Por League.
-Valió la pena cada viaje y cada kilómetro recorrido...
-Sí, obvio que valió la pena. Todo valió la pena. Se los dije a las chicas, este equipo me volvió a dar muchas ganas de estar, por qué crecer, por qué uno juega al hockey. Estas pibas son muy humildes y tienen muchas ganas de seguir apretando el acelerador, creo que hoy se lo merecían. Nos iremos con bronca, pero estoy feliz de estar acá y compartir con ellas. Obviamente que llega fin de año y hay mucho cansancio y mucho viaje, pero hoy lo elijo y vuelvo a elegir. Porque la verdad que estar en mi casa con mi familia y con este equipo que te hace sentir como si estuvieras desde el día uno, no lo cambio por nada. Es algo que no se siente todo los días, así que estoy feliz.
-Flor, con el correr de los días me imagino que vas a poder ver con claridad un montón de cosas positivas que les deja este año, sobre todo pensando en lo que viene...
-Sí. Lo que más me gustó es la unión que formamos con el equipo y eso es algo que se va a mantener en los próximos años si Dios quiere. Son un grupo súper joven que tiene un montón de carrera por delante y eso es lo que me deja más tranquila. Dentro de nuestra experiencia le supimos transmitir todo lo que se siente en estos momentos y bajarle la ansiedad lo más que pudimos. En lo personal, últimamente cada año es un desafío, y tuve la oportunidad de compartirlo con pibas que tenían muchas ganas. Me lo transmitieron, me lo supieron hacer ver e hicieron que yo también genere eso. Creo que fue algo mutuo, fue obviamente compartido con los entrenadores que nos tocaron y con toda la gente del club que es hermosa y la defiendo a muerte, porque lo que nos entregó el club este año fue increíble.
-Desde su llegada, Bian dijo que Pacífico se la tenía que creer porque tenía con qué, ¿sentís que ese mensaje les llegó y es algo que también va a quedar pensando a futuro?
-Sí y lo sentí hoy (por la final extra) también en la cancha. Cada vez que salía alguien por tarjeta, no se notaba. Para el equipo eso era indistinto. La jugadora que más se lució en el otro partido contra Monte (victoria 3-0 en el balneario, por las semifinales de los playoffs) hoy estaba con yeso afuera (Yuliana Vallejos, autora de dos goles en la semi, se lesionó la mano en la revancha de la final ante Sportiva). Y el que vino a ver al equipo no tiene idea de que esa piba fue protagonista hace dos partidos, y eso es lo que valoro. Bian supo transmitir eso y nos trajo la cuota de confianza que al equipo le estaba faltando y sé que estas pibas ya tienen en su cabeza esa cuota de saber que pueden. No se nos dio en el resultado pero sí en actitud y eso es lo que nos va a quedar para lo que viene.
"En cada paso que daba en el club, dejaba una enseñanza"
En una institución simbólica de nuestra ciudad como Pacífico, el hockey es en estos último años la disciplina que mayor crecimiento tuvo dentro del club.
Con la inauguración de la cancha de césped sintético (octubre de 2018) como quiebre fundamental y muchísimo trabajo, el Verde ha ido sumando adeptos a la disciplina y, también, consiguiendo logros deportivos en Primera y categorías formativas.
"Todos en el club estamos super conformes, el crecimiento que ha tenido el hockey es impresionante, en cuanto a la cantidad de nenas y en cuanto al juego. El hockey ha sido la actividad que más crecimiento tuvo en el club, por lejos. Eso habla del buen trabajo que ha tenido la subcomisión, con personas muy buenas, que han trabajado a destajo, que han hecho una cancha que va a quedar para el club para siempre", señaló el presidente del club, Walter Iozzo.
"Uno a veces se pone ansioso por querer levantar una copa -admitió-, pero las cosas que se han hecho en el hockey del club son maravillosas. El crecimiento exponencial que ha tenido es tremendo: pasamos de tener 60 o 70 nenas y perder una Línea entera, a tener 400 nenas y varones también. Es un crecimiento que no lo tiene cualquier club. Eso es porque se hacen las cosas bien, la subcomisión de hockey, con Carlitos (Agesta) a la cabeza, es gente excelente, brillante, honesta y muy trabajadora", enfatizó el dirigente.
Ese buen presente y el desarrollo y trabajo constante le permitieron al club poder recibir a una jugadora de Selección como Bianca.
Entre muchas otras cosas, campeona mundial juvenil con Las Leoncitas, primera bahiense en disputar un Mundial Mayor con Las Leonas y protagonista de la época dorada de Monte y el combinado Mayor de la ABH.
"Tener a Bianca en el club fue una genialidad para todos, para las chicas y para todos en el club. Es una gran persona, más allá de lo que juega. Es una persona excelente que en cada paso que daba en el club, dejaba una enseñanza", reconoció Walter.
"El esfuerzo que ella hizo fue tremendo -agregó-, viajar todos los viernes antes de los partidos... Es una excelente jugadora, pero una gran persona. Yo destaco eso porque es lo que me encantó de ella desde que tuve la primera charla cuando vino uno de los viernes. Charlamos en el club y me encantó la sencillez que tiene, la humildad y todo lo que irradia cuando está presente en cualquiera lugar. Es una genia, realmente", insistió.
-¿Qué hablaron en esa charla o que pretendía hablar con ella?
-En realidad fue una propuesta de ella, que quería charlar conmigo, con la capitana del equipo y con la coordinadora de hockey. Yo no la conocía más que de verla alguna vez en el club, pero nunca me había sentado a hablar con ella. Y pensé, bueno va a exigir algunas cosas para poder venir. En mi cabeza iba pensando en eso y me encontré con todo lo contrario: ella se vino a poner a disposición. La charla significaba eso, quería dejarnos en claro que venía a ser una más, a colaborar, a jugar en el puesto que sea, a darle una mano a las chicas en lo que sea. Ahí me di cuenta que estábamos en presencia de una persona de bien, de una genia, una persona que tiene una calidad humana que sobrepasa los límites deportivos. Eso generó en el equipo mucha confianza también. En cada paso que daba en el club daba una enseñanza a las chicas, eso nos hizo crecer.
-¿Les llegó su mensaje de que el club se la tenía que creer porque tiene con qué?
-Sí, yo creo que sí. Porque no es casualidad estar en la final. Se hizo un buen trabajo, a pesar de que tuvimos algunas situaciones complicadas a lo largo del año. La llegada de Bianca fue la inyección anímica que las chicas necesitaban, porque que te diga una Leona "vos podés", ¡imaginate...! Hace un tiempo era difícil imaginarte estar en la final, se nos dio en 2021 y ahora lo logramos de nuevo. Creo que las chicas ahora saben que pueden, no se nos dio por cosas del deporte nada más. Fue una final pareja. Obviamente que queda el sabor amargo porque uno quiere levantar la copa, pero después decís: "no me puedo quejar, jugamos otra vez la final. Ya no es casualidad, una vez puede serlo pero ahora ya no". Hay un buen laburo y eso nos tiene que dejar contentos a todos los dirigentes, a los padres y a las chicas sobre todo.
-Que el club esté nuevamente en los primeros planos, la llegada de Bianca, el marco con el que se jugaron las finales y lo que genera eso en la barriada, seguramente se traslade a que un chico o una chica quiere arrancar a jugar o que alguien que ya está jugando se motive para seguir haciéndolo o mejorar... eso, me imagino, en definitiva es lo más importante de todo esto, ¿no?
-Cuando vos tenés triunfos deportivos siempre llama la atención al resto y, obviamente, que la llegada de Bianca fue un boom para todas las chiquitas del club. Es como si al equipo de básquet viniera a jugar un NBA, yo lo comparo así. La chica que juega al hockey y sueña con ser Leona y tiene una Leona al lado... ¡Imaginate!. Es un impulso enorme para el club, seguramente esto se va a traducir en la llegada de muchas más chiquitas. Nosotros estamos trabajando en consecuencia, al lado de la cancha oficial estamos construyendo un playón para tener otro espacio para albergar a todas las chicas y que nadie se tenga que ir a otro club. Porque uno le tiene que dar prestaciones a la gente, no es tener por tener y que después no tengan donde entrenar. Estamos trabajando con mucho esfuerzo, las cosas se logran así y después se disfrutan mucho más también.