El comienzo de una nueva era en Bahía Blanca

Maximiliano Allica

mallica@lanueva.com

Jefe de Noticias de La Nueva. Analista político y conductor del programa de actualidad "Allica y Prieta a las 12" que se emite por La Nueva Play. Ha hecho coberturas políticas en el país y en el extranjero. 

Empieza una nueva era política en Bahía Blanca con la llegada de Federico Susbielles al principal despacho de Alsina 65. Luego de 8 años, Héctor Gay y Juntos por el Cambio dejarán el gobierno, tras perder un largo invicto electoral.

La única certeza a esta hora es que el escenario cambió, pero todavía quedan varias preguntas acerca de cuál será el futuro tablero de relaciones de poder.

Con un JxC muy dañado por el tercer puesto, tanto en el orden nacional como local, es evidente que la alianza deberá como mínimo reconfigurarse, si es que no se termina rompiendo en todos los niveles.

La tríada Gay-Nidia Moirano-Santiago Nardelli esperará a ver cómo decantan algunos acontecimientos, especialmente el ballottage del 19 de noviembre, antes de empezar a mostrar sus futuros movimientos. Solo hay una afirmación por hacer: es ingenuo suponer que este esquema que lideró al distrito y a la región durante tanto tiempo pretenda jubilarse.

Sí está claro que quedó en una posición más débil y uno de los primeros pasos será detectar qué dirigentes se amilanan con la derrota y cuáles tienen vocación de participar de la reconstrucción.

En cuanto a los referentes, habrá que ver qué postura toma Gay luego de quedar fuera del Parlasur, si trabaja en los próximos meses para convertirse en eje de la reconstitución o se retira de la vida pública. Por ahora no existen definiciones concretas y es probable que él mismo no haya tomado la decisión final. Al menos, no se la comunicó a sus socios más cercanos.

Moirano y Nardelli se mantendrán como tándem, aunque reconociendo el nuevo papel de importancia que se ganó Andrés de Leo tras este proceso eleccionario. El todavía senador bonaerense demostró vocación de liderazgo y podría convertirse en uno de los grandes referentes de la oposición al susbiellismo en los tiempos por venir.

Pero es vital recordar un concepto anterior. Las nuevas formas que tome la coalición Juntos en el plano nacional marcarán el futuro de ese espacio en todos los distritos. Es probable que el nuevo armado se comience a ver con mayor claridad cuando se conozca al nuevo presidente.

Si Javier Milei gana sería natural que el espectro de centroderecha y derecha de Juntos se corra hacia ese espacio para fortalecer a un nuevo polo antiperonista, sobre todo si establece un pacto con Mauricio Macri. En cambio, si triunfa Sergio Massa, habrá que observar el movimiento del sector más centrista de JxC, en especial a muchos radicales y a aquellos que nacieron en el peronismo, como Emilio Monzó o el propio Horacio Rodríguez Larreta.

Sea como sea, habrá fugas.

Mirá también: ¿Massa o Milei? A quién van a votar los concejales bahienses de Juntos

Volviendo a lo específico de Bahía, la lógica simple indica que Oscar Liberman, que ocupó el segundo lugar en los comicios, se convertirá en un líder de la oposición. La pregunta es si el economista y empresario pretende seguir compenetrado en proyectar a LLA como estructura o si le tira más volver a la actividad privada. 

En su entorno aseguran que Liberman no duda: coordinará a los equipos mileístas para el ballottage e incluso a quienes se vayan sumando de otros partidos. Su proyecto, agregan, es crear un frente liberal que se sostenga en el tiempo, al margen de lo que ocurra el domingo 19. Y, claro, si Milei va a la Casa Rosada seguramente recibirá alguna propuesta del comando nacional. 

Los liberales locales consideran que el segundo lugar en Bahía con tan poco rodaje de campaña, más un eventual triunfo de Milei en el mano a mano con Massa en las urnas de nuestro distrito, serán una base potente para proyectar lo que viene.

Por supuesto, existe un interrogante superior. Qué pasará con Milei si pierde: ¿buscará que la "libertad siga avanzando" o se dará por vencido? Los políticos tradicionales, la casta, apuestan doble contra sencillo que si cae derrotado se derrumbará como un castillo de naipes.

Por lo pronto, muchas de esas definiciones son relevantes para Federico Susbielles porque marcarán tendencias, por ejemplo, en el Concejo Deliberante. Con el actual esquema, el jefe comunal electo asumirá con una fuerza de 8 concejales propios sobre un total de 24. Luego habrá 4 de La Libertad Avanza, 10 de Juntos y 2 que ingresaron con José Luis Espert en 2021 y que en estos tiempos fueron afines a JxC. Amplia desventaja.

Si bien cuando un Ejecutivo comienza siempre se le aprueban los primeros proyectos aunque esté en minoría, a modo de reconocimiento de la voluntad popular en las urnas, con el correr de los meses el juego de balances puede resultar más problemático.

Escenario político: el factor Massa, una de las claves del triunfo de Susbielles

El primer paso será trabajar en un presupuesto municipal que será presentado con prórroga para darle tiempo al susbiellismo a armar su propio organigrama de gabinete y distribuir los recursos. En campaña, el titular portuario dijo que modificará el sistema de secretarías para crear Agencias que atiendan los diferentes temas, dando participación a los referentes de cada actividad. Cuando se conozca el detalle de ese esquema multiagencial se vislumbrará con más claridad el perfil que buscará imprimirle a su gestión.

Susbielles ya tiene una buena plataforma de despegue, debido a que orbita en un sistema de planetas alineados, con la Provincia en manos de Axel Kicillof y también con la administración del Puerto, ya que al presidente del Consorcio lo designa el gobernador y a la hora de pensar en su reemplazo, sin dudas, pesará la opinión del "Chubi" (¿quién irá? ¿un político, un técnico?). 

Solo falta que Sergio Massa haga bingo con la Presidencia y se produzca un efecto derrame sobre Bahía para exhibir de inmediato el progreso en determinadas áreas, por caso en infraestructura de servicios básicos. Como en todo inicio, las expectativas son altas.

Por lo pronto, el intendente electo anunció tres nombres de su gabinete. Natalia Martirena, artista y coordinadora de los Organismos Artísticos del Sur, irá al Instituto Cultural; Virginia Pascual estará en Prensa y Comunicación; y Federico Montero, actual delegado del ministerio de Seguridad bonaerense y extitular de la Guardia Urbana, será el responsable de la Agencia de Seguridad, que tendrá bajo su mando a Defensa Civil, Emergencias, Centro de Monitoreo y Control del Tránsito, entre otras áreas.

Con la liberación de la banca de concejal de Montero, de paso, vendría a ocupar su lugar en Sarmiento 12 la actual edil Paola Ariente, permitiendo retener un escaño al sector de Marcelo Feliú, uno de sus principales aliados en este proceso.

A propósito, será interesante ver cómo distribuye el poder Susbielles en cuanto haga uso efectivo de la lapicera. El peronismo suele ser ramificado y demandante.

Como sea, está empezando una nueva era política en Bahía Blanca. Un amarillo saliente reflexiona: "La verdad, para el país que viene en el cual van a continuar los desajustes económicos, va a ser importante un intendente con línea directa para que le bajen recursos. A nosotros nos costó muchísimo tenerlos, sobre todo con Axel. Tiene sentido que, hoy, el gobierno le toque a Federico".

Y agrega: "Por supuesto, nosotros vamos a controlar que se cumpla todo lo prometido en campaña. Que fue mucho. Quizás demasiado...".

El peronismo bahiense ha vuelto al poder. Impulsado por la victoria, su primer desafío será militar el voto por Massa. Allí tendrá una nueva prueba de eficacia.