Bahía Blanca | Viernes, 19 de abril

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Tras un plenario de comisiones, el Concejo busca avanzar con la Tolerancia Cero en Bahía

"Las consecuencias de los siniestros viales producidas por consumo de alcohol es estadísticamente muy alta y además socialmente muy terrible", dijo el concejal Walter Larrea. 

   Tras un plenario de comisiones, el Concejo Deliberante busca avanzar con el proyecto de Tolerancia Cero en Bahía Blanca. 

   "Pedimos un plenario de comisiones, porque entendíamos que el proyecto se había demorado y queríamos saber cuál era el motivo. Ayer tuvimos ese plenario, integrado por las comisiones de Salud, Tránsito y Legales, para buscar consenso", contó el concejal del Frente de Todos, Walter Larrea. 

   El concejal explicó que hay una "dificultad técnica este proyecto de ordenanza, que es que una norma local no podría fijar sanciones o algún tipo de penalidad en medio de una ley provincial o nacional. Por eso estamos tratando de encontrarle una redacción técnica que permita a la justicia de faltas municipales, sin llegar a ser penalidades, pero que si tengan consecuencias para la persona que conduce con alcohol en sangre". 

   "Abogamos para que este prohibido, categórica y taxativamente, conducir vehículos aún con una existencia de alcohol en sangre menor a la que se tolera por la ley provincial. Ese tiene que ser el mensaje y la contundencia de la declaración política de uno de los órganos de gobierno local como es el Concejo Deliberante. Que está prohibido, penado y sancionado el conducir con alcohol en sangre", sostuvo Larrea. 

   En este sentido, dijo que están trabajando en lo que es una sanción administrativa, donde "la persona que tiene un grado de alcohol en sangre que no llega al 0,5 pero si pasa de 0, el artículo quinto de la ordenanza está previendo la obligación de cumplir con curso de educación vial, de concientización. El artículo sexto de la ordenanza también plantea como norma complementaria o como sanción subsidiaria pudieran desarrollarse tareas comunitarias en algún organismo público". 

   Y agregó: "A la persona que se le detecte ese registro de alcohol en sangre tendrá consecuencias pero no consecuencias que puedan se como el secuestro del vehículo o la imposición de una multa porque ahí debemos estudiar la coexistencia de la norma local pero lo que tiene ser muy categórico es que la voluntad política del deliberativo y el gobierno de Bahía Blanca es que no se puede conducir con alcohol en sangre". 

   Por último, Larrea remarcó que creen que "las consecuencias de los siniestros viales producidas por consumo de alcohol es estadísticamente muy alta y además socialmente muy terrible", aseguró Larrea. 

Mapa de accidentología en la ciudad

   De acuerdo con el mapa de accidentología del Municipio, del 20 de marzo de 2020 —cuando empezó a regir el aislamiento estricto— al 20 de abril de ese mismo año, se registraron 76 accidentes con 29 derivaciones a hospitales; y en el mismo período de 2021 se contabilizaron 157 accidentes, con 54 derivaciones y un desenlace fatal en la ruta 33.

   Lógicamente la menor circulación tuvo un impacto positivo en materia vial. Si se comparan los datos de Gobierno Abierto del primer año pandémico con los 12 meses anteriores, se observa que los accidentes se redujeron al 60 %.

   Siguiendo con los datos oficiales, entre el 20 de marzo de 2020 e igual fecha de 2021 hubo en la ciudad 1.514 accidentes, con 616 derivaciones y 4 víctimas fatales. Y en ese mismo período de 2019-2020 se registraron 2.519 accidentes, con 973 derivaciones y 6 víctimas fatales.

   Esos números no son del todo precisos en cuanto a fallecimientos porque solo contemplan las muertes en los lugares de los incidentes. En el mapa, todos están catalogados como accidentes pero, como se remarca desde Seguridad Vial, aquellos que pueden prevenirse y por consiguiente evitarse son siniestros viales.