11 de abril

Redacción de La Nueva.

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   Bahía Blanca encuentra este nuevo aniversario sumida  en la incertidumbre que afecta a todo el mundo por la pandemia de Covid-19, incertidumbre que se vino a sumar a la crisis económica que golpeó a varios de los proyectos sobre los que se habían levantado grandes esperanzas de desarrollo en los últimos tiempos. Es un escenario que fácilmente induce a la frustración general.

   Sin embargo, y aunque pueda sonar a vano optimismo, la ciudad cuenta con una riqueza clave en los nuevos tiempos que se avecinan: su capital humano, capaz de superar sin dudas los próximos e inéditos desafíos. 

   En lo sanitario, en lo productivo, en materia de investigación y conocimientos, en capacidad de trabajo, etc., la calidad de nuestra gente nos habilita a imaginar un futuro próspero, incluso, en medio de esta tormenta casi perfecta.

   Bastará que ante los primeros atisbos de mejor clima logremos ponernos de acuerdo en objetivos comunes, algo que se ha dicho muchas veces con la vacuidad de una frase hecha, es cierto, pero que esta vez, seguramente, podrá conseguirse tras la lección de unidad de destino que la pandemia nos mostró a nivel global. 

   Los acuerdos son indispensables para salir adelante. Es la enseñanza que la naturaleza nos da, por estas horas, con su fuerza brutal. 

   Mientras tanto, los bahienses festejaremos hoy este nuevo cumpleaños haciendo gala de una de nuestras mayores virtudes: la solidaridad.