Bahía Blanca | Martes, 23 de abril

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Cristina Kirchner lanza un libro donde dice que al pensar en Macri sólo se le ocurre la palabra “caos”

También lo califica como "carancho del sistema financiero". El libro saldrá a la venta este viernes, y se llamará “Sinceramente”. Además del presidente, habla del Pro, Scioli, el Papa, las obras en Santa Cruz, el Memorándum con Irán y su patrimonio personal.

Según CFK, Macri se convirtió en "carancho del sistema financiero". Foto: Archivo La Nueva.

   La expresidenta Cristina Kirchner anunció que este viernes se lanzará a la venta su libro “Sinceramente”, donde asegura que al pensar en el presidente Mauricio Macri sólo se le viene a la mente la palabra “caos”.

   "Si alguien me pidiera que defina a Mauricio Macri en una sola palabra, la única que se me ocurre es: caos. Sí, Mauricio Macri es el caos y por eso creo firmemente que hay que volver a ordenar la Argentina”, dice la cita textual que difundió la editorial Sudamericana para promocionar el libro.

   En las 600 páginas de la obra Cristina Fernández asegura que "Macri podría haber sido un capitalista exitoso” con poder para “disciplinar al sector agroexportador con retenciones escalonadas y diferenciadas”.

   “Pero eligió ser carancho del sistema financiero”, dispara.

   En el libro CFK también se refiere a su patrimonio personal y familiar. En tal sentido, asegura que cuando llegó a la presidencia tenían un buen pasar.

   "Nunca llegamos pobres a ningún cargo en la función pública. Y menos a la Presidencia de la Nación”, dice.

   En cuanto a las obras públicas que ejecutó el kirchnerismo en Santa Cruz, la expresidenta dice en su libro que le resulta “indignante y ofensivo a la inteligencia” que se diga que fue su gobierno el que le enseñó a los empresarios de la construcción cómo cartelizarse.

   “Las dos principales obras de la provincia, el aeropuerto internacional de El Calafate y el puerto de aguas profundas de Caleta Olivia, fueron realizadas por dos importantes contratistas de obra pública, con actuación de larga data en la República Argentina. Benito Roggio e Hijos comenzó como empresa constructora en el año 1908 y ESUCO, de Carlos Wagner, expresidente de la Cámara de la Construcción, en 1948”, señala.

   “Por eso resulta indignante y ofensivo a la inteligencia que en el año 2018, en el marco de lo que se conoce como 'la causa de las fotocopias de los cuadernos', los dueños de empresas constructoras de obra pública, con 110 años de antigüedad una y 70 la otra, 'entre muchas otras', digan que recién en el año 2004 tuvo que llegar el ministro de Planificación Federal Julio De Vido para convocarlos y enseñarles cómo cartelizarse en la obra pública cual niños en un jardín de infantes. Ridículo", añade.

   En la descripción del libro la expresidenta aclara que no es una autobiografía ni una recopilación de hechos o logros de su gobierno, sino “una mirada y una reflexión retrospectiva para desentrañar algunos hechos y capítulos de la historia reciente y cómo han impactado en la vida de los argentinos".

   CFK también anunció que presentará el libro el 9 de mayo en la Feria del Libro de Buenos Aires.

 

Desde Scioli y Duhalde hasta el Memorándum con Irán y su relación con el Papa

   Otras citas del libro, según difundió hoy Sudamericana:

Alejamiento de la presidencia. “Hubo una decisión mía de retirarme porque sentía que todo había sido muy vertiginoso, tal vez demasiado intenso. Necesitábamos todos descansar: yo de los argentinos y los argentinos de mí. Porque gobernar este país... ¡mamita!"

Scioli. "A punto de cerrarse las listas fue una tarde a verme a Olivos. Estábamos los dos solos. Le dije: 'No, Daniel. Nos van a atacar diciendo que yo quiero los fueros o, peor todavía, que voy a ser tu comisaria política desde la Cámara de Diputados'. Hoy, a la distancia, mientras escribo esto y veo los números de aquella elección en primera y segunda vuelta, me pregunto: ¿hubiera ayudado a cubrir la escasa diferencia de votos que tuvimos en el balotaje si iba como diputada?".

Persecusión. "Néstor me lo dijo: 'Te van a perseguir a vos y a tus hijos'. No fue altisonante. Estaba serio y cuando le pregunté 'por qué decís eso', enseguida cambió de conversación. Fue en El Calafate. Lo que no puedo recordar es si fue durante la última semana que estuvimos juntos”.

Memorándum. "La ilusión de firmar el Memorándum (con Irán) e imaginar la fotografía del juez argentino a cargo de la causa (AMIA) sentado en Teherán tomándole declaración a los acusados iraníes fue, hoy lo puedo confirmar, una verdadera ingenuidad de nuestra parte, que nos hizo olvidar de los intereses geopolíticos en pugna."

La patroncita. "Néstor, con sus diarios a cuesta y todas las revistas que encontraba, se iba a una confitería (en Cariló) y esperaba que yo volviera de hacer las compras tomando un café. Por supuesto, me producía y arreglaba como si fuera a una fiesta: sombrero, anteojos de sol, pareo, etcétera, etcétera, etcétera. Él iba de remera, zapatillas, medias, short de baño y llevaba una gorrita con visera para atrás. Uno de esos días estaba sentado en la mesa con la pila de diarios y revistas y se acercó una señora muy paqueta que le dijo: '¿me da La Nación, por favor?'. Yo justo venía entrando y Néstor le dijo: 'No, señora, no puedo, son de la patroncita que ahí viene'”.

Duhalde. "Tuvimos una discusión fuerte vinculada a la alianza electoral con Duhalde para enfrentar a Carlos Menem en las elecciones presidenciales en 2003. Yo no quería; insistía en que era una losa que no íbamos a poder levantar. Sin embargo, Néstor estaba convencido de que era una alianza necesaria. Trabajaba en todos los frentes para convencerme, también en el familiar. Muchos años después Máximo me contó que un día, en Río Gallegos, su padre lo había invitado a dar una vuelta: 'Acompañame a ver unas obras', le pidió. Cuando se subieron al auto, con Néstor al volante, le preguntó: '¿vos creés que los milicos tienen que ir presos por todo lo que hicieron?'. Máximo le contestó que sí, que obvio, y entonces le hizo otra pregunta: '¿Vos creés que este país necesita terminar con el tema de la deuda externa crónica y tener otra política económica que genere trabajo?'. Máximo le volvió a contestar que sí, que claro, y Néstor le dijo: 'Bueno, entonces ayudame a convencer a tu vieja porque tenemos que cerrar con Duhalde. Si no, no ganamos'".

Pingüino o pingüina. “Recuerdo cuando me dijo: 'Puedo ir yo de vuelta y después vos'. 'Ni loca', le contesté. Porque si yo era candidata luego de dos mandatos consecutivos de Néstor, seguramente iban a decir: 'Pone a su mujer porque no puede ser reelecto'".

CGT sin mujeres. "Cuando recuerdo los cinco paros generales que hicieron durante mi último mandato no puedo dejar de pensar que también hubo un fuerte componente de género. Digámoslo con todas las letras: la CGT es una confederación en la que no hay mujeres que conduzcan."

El Papa Francisco. "Aquellos días muchos habitantes de Barrio Norte y Recoleta, los barrios más ricos de la ciudad de Buenos Aires, colgaron banderas vaticanas amarillas y blancas de los balcones para festejar la elección de Bergoglio. Estoy segura que en el primer momento creyeron haber encontrado un nuevo líder para luchar contra 'la yegua'. Cuando tomó estado público mi felicitación y mi decisión de viajar a Roma, los festejos de la oposición se aplacaron. Fue increíble: lentamente iban desapareciendo las banderas. Estaba claro: a pesar de que había habido tensiones, nunca nos entendieron ni a mí, ni a Néstor y me parece que menos todavía a Bergoglio. Guardaban la secreta esperanza de que Francisco, el nombre que eligió para su papado y que aludía al nombre de San Francisco de Asís, el santo de los pobres, fuera un tenaz opositor a nuestro gobierno."