Bahía Blanca | Martes, 23 de abril

Bahía Blanca | Martes, 23 de abril

Bahía Blanca | Martes, 23 de abril

Cada vez menos interés de Brasil en nuestro trigo

El que fuera principal cliente comprará cereal en Rusia, después de haberlo hecho en EE.UU. y Canadá. El Gobierno argentino no muestra signos de reacción.
Continúa perdiendo terreno el trigo argentino en los mercados internacionales.

El trigo sigue planteando interrogantes para su futuro en el escenario agrícola de la Argentina. El que fue cultivo histórico durante décadas ha pasado a un segundo plano, desplazado por dos factores: la explosión de la soja y la política oficial, que limita inexplicablemente las exportaciones y coloca a los pequeños y medianos productores -entre ellos los de la zona de influencia de Bahía Blanca-, en una dificultosa situación.

La reducción de la siembra en la presente campaña se mantiene en alrededor del 18 o 20%, según diversas fuentes consultadas en las últimas horas, pero en ciertos casos se la ubica en el 30%.

Paradójicamente, las lluvias del primer cuatrimestre habían abierto una considerable expectativa respecto de una siembra en ascenso.

La política oficial de interponer barreras para exportar ha hecho nada menos que perder progresivamente a nuestro principal comprador, Brasil, que en los últimos años orientó sus adquisiciones a otros destinos, entre ellos EE.UU. y Canadá.

Pero ahora se suma otro dato preocupante: los brasileños también comprarán en Rusia, según lo anunció la ministra de Agricultura, Katia Abreu.

El gobierno de Dilma Rousseff ha decidido operar con Rusia como una medida de reciprocidad, ya que aquel país le compra al Brasil carne bovina, porcina y avícola.

Brasil compra en el exterior la mitad de las necesidades de su molinería. Hasta hace poco, la Argentina era el principal abastecedor, con las ventajas derivadas de la calidad del producto y de la escasa distancia entre puertos. Sin embargo, a raíz de los incumplimientos de parte de nuestro país, Brasil buscó abastecedores confiables.

Por ello, el diputado provincial Rubén Grenada presentó un proyecto para que la Provincia pida a la Nación “la apertura de la exportación de trigos de baja calidad para aliviar la situación apremiante de productores agropecuarios del sudoeste y sudeste bonaerense”.

En los fundamentos, señala el legislador pigüense que en esas zonas se ha restringido la producción, con siembras dificultosas, “lotes que no llegan a cosecha, disminución en los rendimientos y calidad de los granos, caída en la productividad ganadera, mermas en la existencia de hacienda, pérdida en el poder adquisitivo del sector, caída en las inversiones sectoriales, desocupación rural y restricción en las oportunidades de servicios al sector".

"Hoy, el campo y las comunidades rurales muestran los efectos de esta dura realidad”, indica.

Menciona que hay rendimientos de trigo inferiores a los históricos, con la aparición de problemas sanitarios y con bajo peso hectolítrico.

Esos granos no tienen demanda en el mercado interno, sin indicios de que este escenario mejore en el corto y mediano plazo. Por ello, Grenada aconseja abrir la exportación de trigo de calidad media y baja para la alimentación ganadera.