La despedida a Pipi Montaner, la inspiradora artista plástica musa de Los Chopen

Redacción de La Nueva.

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   Anahí González Pau
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   La comunidad artística y en general despide desde ayer con cientos de mensajes de apoyo, admiración y cariño a María Elena “Pipi” Montaner, la artista plástica bahiense de Los Chopen, grupo creado por su hermana Ana Elisabet Montaner, Tati, en el que los integrantes se desarrollaron como artistas ejerciendo su derecho al goce, al trabajo y a la participación activa dentro de la sociedad. El arte fue así una herramienta de transformación personal y social.

   No solo inspiró a su hermana sino también a su sobrina, Josefina Recio, directora y guionista del documental El Huevo del Dinosaurio, que acaba de ser declarado de Interés Provincial en el Senado luego de haber sido seleccionado y proyectado en numerosos festivales de cine nacionales e internacionales (como en Irak y Chile) y tras haber ganado recientemente el reconocimiento mayor en "Arte y Sociedad" del Festival Hispanoamericano de Cine y Documental Independientes en México.

   La conmoción en el ámbito cultural y el acompañamiento a la familia por la partida de Pipi es apenas una muestra de la admiración y amor que despertaba esta artista de 59 años que llevó una vida afectiva muy rica, por la contención y el apoyo de su entorno familiar, con su mamá a la cabeza, (también protagonista de la película que montó su nieta) y por los vínculos forjados con el entorno. 

   Pipi logró exponer y vender sus lienzos dentro y fuera de la ciudad junto a su gran familia de Los Chopen y participó de numerosas jornadas en las que pintó sus obras en vivo ante públicos diversos. Obtuvo premios en salones nacionales de pintura (sin que los jurados supieran quién era) Muchas de sus obras forman parte de colecciones privadas.

   El arte se transformó para ella no solo en un modo de generar ingresos sino en un acto revolucionario ya que transformó radicalmente la mirada de la sociedad porque a medida que Los Chopen fueron progresando en el despliegue, calidad y volumen de sus producciones cada vez más gente comenzó a adquirir las obras, llenas de frescura y de logradas búsquedas expresivas.

    Contó Josefina: "Cuando mi vieja arrancó con Los Chopen el primer  objetivo no fue trabajar para incluir a personas con discapacidad a través del arte, el objetivo principal es crear un espacio de desarrollo de artistas y como consecuencia y reconocimiento por  lo que ellos hacen promover la inclusión pero a partir de valorar, justamente, sus capacidades. Esto se da porque ellos empiezan a conectar con sus deseo y se descubren artistas y descubren todo su potencial".

   El grupo continúa activo hasta nuestros días, gracias al entusiasmo, al esfuerzo y la voluntad que nacen de la convicción profunda de quienes como Tati, Eugenia, Clara y Josefina son sensibles al sostén de estos espacios a través de los cuales se busca construir una sociedad en la que ya no sea necesario hablar de inclusión.

   Un estar en el mundo que no implique la estigmatización de las personas por tal o cual condición sino que sean consideradas por todos los matices de su existencia, en un contexto rico en oportunidades que les permita desarrollar sus capacidades e intereses junto a otros seres dispuestos a abrazar a la diversidad.

   Pipi es un ejemplo de que el objetivo de Los Chopen se cumplió con creces, porque a través del color, su personalidad y pinceles logró expresar y construir una original mirada del mundo y la compartió. Sus procesos son un viaje alucinante y su vasta obra es maravillosa.

   La directora y guionista Josefina Recio le dedicó unas palabras a su querida y admirada tía:

   "María Elena Montaner, más conocida como Pipi. (1961-2020) Taurina. Pepocha, Pepona, Pipita (algunos también la llamaban así) Pero para todos nosotros siempre fue LA PIPI. La tercera de 5 hermanos. Hija de Coca y Jaime. Tía de 12 sobrines.

   Amante de los helados, a donde iba la conocían siempre. Menta y limón, una fija. Amante del vino tinto, de los Pimpinela, Sergio Denis, Roberto Carlos, José Feliciano, una romántica! Amaba los brillos y el leopardo y ser el Papá Noel de todos los 24.

   Como le gustaba la fiesta!!! Sus cumpleaños eran un fecha obligada de reunión. Ella unía a toda la familia, a todos los amigos. 

   Creadora de mundos maravillosos.

   Podía pasarse horas inventando historias de amores truculentos mientras le planchaba el guardapolvo a algún sobrino. Y mientras otras la espiábamos escuchando esos enredos imposibles de seguir. 

   Tuvo un millón de amigos de verdad. Porque a donde iba se hacía querer. Anduvo por peñas de folclore, clases de guitarra, de cerámica hasta que descubrió la pintura y se descubrió pintora, una gran artista visual.

   Fue la musa de Tati, su hermana mayor y así fundaron Los Chopen. Vendió obras en Bahía Blanca y fuera de la ciudad.

   Expuso en muchos espacios y salones de arte. Obtuvo una mención en un salón Nacional de arte por su pintura "Mujer con los pies en el agua". El jurado no supo nunca que estaban premiando a una artista con síndrome de Down.

   Era puteadora y picante, divertida, ocurrente. Sexy!

   Generosa hasta con sus chocolates. Aunque los escondía muy bien!

   Ella se proclamó madrina de dos sobrines a pesar que en una misa el padre Horacio, no quería que ella fuese madrina. Su sobrina le dijo unas cuantas cosas en la cara al curo y finalmente Pipi fue Madrina de quien quiso.

   Hay gente que pasa por este mundo con tanta audacia y power que no resulta indiferente nunca, Pipi fue una de esas personas.

   Sin proponérselo ella desafió la chota normalidad. Hizo lo que quiso, siempre y abrazo la vida con tantas ganas que iluminaba todo a su paso y le dio mas al mundo de lo que el mundo esperaba de ella.

   Descubrirla artista fue impactante. Tan chiquita en su cuerpo y con tanta impronta en sus colores en su pincelada.

   Más de un artista quiso copiar esa pincelada, pero reconocían que no podían hacerla igual. Pipi fue única.

   Los Chopen y ella  vinieron a correr varios velos sobre el arte y la discapacidad.

   Su legado es inmenso.

   Ojalá estemos a la altura de esta persona que con su metro diez la tuvo tan clara que ni siquiera nos indicó el camino. Ella lo caminó y dejó la huella para quien quiera seguirla!

   Y las emotivas palabras de homenaje y despedida de su sobrina Anita Montaner, que pintan un retrato de la artista:

   "Mi tía pipi para mi significó luz, amor y alegría en su estado más puro.

   Me planchaba los guardapolvos cuando era chica, me llevaba y traía de la escuela, me convidaba helado y de vez en cuando también me puteaba por sacarle sus chocolates sin permiso, no fui una sobrina soñada pero su amor por mi crecía constantemente.

   Pasé mi infancia midiéndome la altura con ella, añorando pasarla, aunque sea, unos centímetros. Cuando al fin lo hice, entendí que la altura de una persona no pasaba por ahí...que aunque yo crecí y mi tía quedó petisa a mi lado, igual, me ganaba por goleada, porque tenía el corazón más grande que conocí en mi vida, y eso es lo que verdaderamente importa. Había un lugar en ella para todo el que decida conocerla y adentrarse en su mundo (un mundo hermoso).

   Pipi se mamaba en todos los festejos familiares, le gustaba más el vino que otra cosa jajaja y eso seguro lo heredé de ella, sonreía tanto que contagiaba su amor y llenaba cada rinconcito vacío del lugar en donde estaba. No era ruidosa y sin embargo hoy su ausencia deja más silencio del que me gustaría escuchar.

   Me retaba un montón pero te aseguro que cuando alguien me hacía llorar se ganaba todas las puteadas de ella, porque me cuidó, me amó y me abrazó con tanta alma y luz que solo los que tuvieron el privilegio de sentirse queridos por ella (y fueron muchos) lo van a entender.

   Odio esto, tener que escribirte algo con la vaga esperanza de que alguien entienda quién fuiste y lo que valió para el mundo tu existencia porque no lo iba a hacer pero tuve la suerte de que en medio de tantas personas, justo vos, estés en mi vida y no puedo dejarte pasar. Dejas un espacio enorme petisa y lo sabes, por eso luchaste tanto para quedarte un poco más.

   Hoy te despido de piel, pero de mi corazón nunca vas a irte.

   Sos alma de diamante, te vamos a extrañar mucho.

   Tati, su hermana, también le escribió en las redes y acompañó la narración con una conmovedora imagen:

   “Desde que naciste tú mano y la mía fueron una sola, así de juntas 59 años pasaron hasta hoy que decidiste partir. Yo protegiéndote y vos mostrándome la vida con tus ojos. Sin vos no sería lo que soy. 
   Pipi te admiro y mi amor por vos me trasciende 
 .

   Cuando éramos chicas y los niños se burlaban más de uno se comió una piña....hasta que me di cuenta que por ahí no iba la cosa, entonces hacía toda una explicación de posibilidades.

   Siempre sufrí y me rebelé a la mirada insistente, alguna vez me dijiste : .y este pelotudo qué me mira, igual fuiste y nos hiciste feliz . 

   Tus gustos y pasiones ; la pintura ,el helado, el tinto o cualquier bebida espirituosa (más de una vez te mamaste lindo)!!!!! Salir de viaje y comprar.

   Mi maestra de vida, mi compañera, mi amada hermana. Como amabas la vida!!!!!!! Hoy te fuiste, miré el cielo y estaba pintado el arco iris, fuiste vos?"