Boris Herrera, un capitán “multifunción”, a “escala” y de “colección”
Es Profe de Educación Física, juega en la Primera de Liniers y su pasión de todos los días es intercambiar y recopilar vehículos clásicos y de competición en miniatura. Mañana cumple 31 años y el que lo vaya a saludar ya sabe que le puede regalar.
Egresado del Instituto Superior en Ciencias de la Comunicación Social. Cronista de la sección Deportes de La Nueva. desde el 9 de octubre de 1995, especializado en fútbol. Entre 2002 y 2018 cubrió a Olimpo en Primera división. Trabaja en televisión y radio. Además, integró el equipo periodístico de "El Diario del Mundial", que se emitió en La Nueva Play.
“Listo, listo, hacemos una nota a máscara quitada, sé perfectamente que querés que cuente, pero después las cargadas me las tengo que bancar solito ehhh”, comprendió el capitán de Liniers cuando le anticipé que el fútbol, esta vez, iba a ser un tema secundario en la conversación.
Mañana, Boris Herrera cumple 31 años y sus familiares y amigos saben que el regalo debe ser de “colección”.
“Soy un apasionado de los autitos de colección, tengo más de 300 y son parte del decorado en el escritorio de mi casa. Están hechos a escala y la mayoría son marca Hot Wheels”, describió el defensor albinegro que en 2016 se recibió de Profe de Educación Física en el Instituto Superior Pedro Goyena.
“Doy clases en la Escuela primaria N° 63 (Vicente López 1331), pero los pibes no saben nada de este hobby que tengo, aunque ahora, culpa tuya, me van a empezar a pedir que lleve algún autito a la clase”, sonrió preocupado el “hombre” multifunción, tal como se define dentro y fuera de la cancha.
“Hago de todo más allá del fútbol. Voy al gimnasio, estudio Mecánica Automotriz y de a poco voy alimentando el proyecto de un salón o taller para recibir, armar y restaurar autos antiguos o de marcas que ya no estén en el mercado”, adelantó este amante de los vehículos clásicos y de competición.
Tiene su propio Instagram (@autitosclub) y en esa página ofrece, comercializa e intercambia todo lo que tiene en su colección.
“Es un rubro muy popular en el mundo y te conecta gente de países que ni conocés. Vos exhibís lo que tenés y hay veces que no eligen ni uno, pero bueno, el contacto y la referencia quedan”, se explayó este bahiense criado en el barrio Pacífico y que desde hace 14 años se encuentra en pareja con la médica Antonela Russo.}.
--Escuché por ahí “Boris suele hacer negocios con los compañeros”, ¿es cierto?
--¡Cómo está el teléfono descompuesto!, je, je. Hace poco llegué a un acuerdo con Mariano (Mc Coubrey), le compré una combi, no firmamos nada, sólo espero que ande, que no me deje a pata…(risas).
--El domingo fue el cumple del DT (Hernán Rosell), ¿fue con las manos llenas al entrenamiento del lunes?
--Sí, se la jugó, llevo cuatro tortas, tres para el plantel y una para el cuerpo técnico. Festejamos en el vestuario del Zibeccchi, aunque lo único malo es que el Negro no cocinó, eran compradas, y eso le bajó un poco la puntuación, ja.
“Le metimos mucha presión y cumplió; la de chocolate y la pasta frola estaban muy ricas. El domingo se fue rapidísimo de la cancha (tras el 1-0 sobre Libertad) porque tenía que ir a festejar con su familia, con la mala fortuna de olvidarse su elemento más preciado, la carpeta de fútbol. Mandó un mensaje para que se la guarden en la utilería, pero hicimos que se la entregue Diego Banegas, uno de sus nenes mimados”, resumió “revolviendo” la interna del grupo.
Con el pase arraigado en el “Chivo”, Boris fue a préstamo a Defensores de Buena Parada (campeón de la Liga de Río Colorado en 2013), Pacífico (2014), Rosario (campeón LDS 2018) y Atlético Monte Hermoso (dos meses y medio en 2023).
En Primera, con su club, al que llegó a los 6 años y completó todas las categorías hasta llegar a la mayor, consiguió 5 títulos liguistas y un ascenso al Federal A.
--¿Qué significa ser el capitán de este Liniers líder en la A de la Liga del Sur?
--Una responsabilidad que me hace estar atento a todo y un orgullo muy grande.