Strudel Fest: la lluvia no pudo impedir que Pueblo Santa María batiera un nuevo récord
La tradicional celebración de la comunidad volga fue declarada este año Fiesta Provincial. Una multitud dio el presente y se degustó el postre alemán.
Desafiando el clima y adelantando el horario el día domingo, los descendientes de Alemanes del Volga hicieron posible, una vez más, que la fiesta del strudel contara con una gran cantidad de visitantes.
Pueblo Santa María agasajó a los presentes con un gigantesco strudel que llevó varias horas de elaboración y alcanzó los 100.5 metros: récord absoluto. El mismo se extendió sobre la avenida 11 de Mayo y desató la algarabía de quienes tuvieron el honor de presenciar y participar.
"Lo hicimos posible. Fue fruto del esmero de mucha gente que colaboró y madrugó para desafiar el clima", dijo uno de los orgullosos colaboradores -fueron unos 120- que extendieron sus manos para estirar la masa, cortar las manzanas y rellenar junto con la crema y el azúcar, obteniendo así el contenido ideal de un postre que se cocinó a fuego lento.
La décima edición de la Strudel Fest estuvo cargada de tradición, música y el sabor inconfundible del postre alemán que se degustó por la mañana hasta las 11 -cuando empezó a llover- y se terminó de repartir por la tarde, bajo techo, con bandas musicales animadas por descendientes del volga: entre ellas la Zillertal Orchester, en el gimnasio del club El Progreso.
El sábado fue el turno de los artesanos y los sitios de comidas, además de los puestos de cervezas artesanales y el escenario principal, donde brillaron el grupo El Cuarto Soda, una banda que tributó a Soda Stereo, y Mancha de Rolando. Una multitud presenció ambos espectáculos.
El evento contó con la presencia del intendente Ricardo Móccero, autoridades municipales y el cocinero Juan Ferrara.
Móccero resaltó el valor de la identidad cultural y el trabajo de la comunidad.
Un gran marco de público disfrutó de cada propuesta y la Strudel Fest reafirmó su lugar como una de las fiestas más esperadas del año, manteniendo vivas las raíces culturales y fortaleciendo el sentido de pertenencia de la comunidad.