Misterio en Coghlan: Graf fue sobreseído por el encubrimiento del crimen de Diego Fernández Lima
Se trata del dueño de la vivienda en la que aparecieron los restos óseos del joven desaparecido en julio de 1984.
Cristian Graf, el dueño de la vivienda de Coghlan en la que fueron encontrados los restos óseos de Diego Fernández Lima, fue sobreseído “por inexistencia de delito” en la causa que lo investigaba por el encubrimiento del crimen del joven de 16 años que desapareció en 1984.
“Esta defensa pudo demostrar que Cristian Graf no cometió ningún delito de los que se le imputaron”, explicó su abogada, Érica Nyczypor,
En la Resolución, el juez nacional en lo criminal y correccional Alejandro Litvack explicó que, cuando Graf arribó a su domicilio -lindante con la obra-, “la investigación ya estaba iniciada, se había realizado el correspondiente vallado y la evacuación del personal de la obra del terreno en cuestión, y hasta incluso estaba interviniendo la policía científica en la recopilación de los huesos”.
Y consideró: “Por lo tanto, a esa altura, difícilmente podría desviar una investigación ya comenzada, ya que no tuvo ningún acto positivo para con las autoridades policiales ni judiciales que se encontraban allí”.
Además, remarcó que “no mintió o confundió a quienes comenzaron con la investigación del hecho, dando pistas falsas para desviar la pesquisa, sino que fueron simplemente expresiones realizadas a otras personas”.
Ahora, la querella y la fiscalía tienen tres días para apelar la decisión que tomó el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N° 56.
La desaparición que marcó a una familia
Diego Fernández Lima desapareció durante la tarde del 26 de julio de 1984, cuando tenía apenas 16 años.
Aquel día, tras almorzar con su mamá y pedirle dinero para visitar a un amigo, fue visto por última vez en la esquina de Rómulo Naón y Monroe, en Villa Urquiza. Nunca llegó a la ENET N°36 “Almirante Brown”, donde cursaba la secundaria.
Sus padres, Juan Benigno Fernández e Irma Lima, denunciaron la desaparición en la Comisaría 39, pero el caso fue archivado como una supuesta “fuga de hogar”.
La familia inició una búsqueda incansable, repartiendo panfletos y acudiendo a los medios. El padre de Diego murió en 1986 sin saber qué había pasado con su hijo, mientras su madre y hermanos siguieron luchando por respuestas.
El hallazgo que reabrió la investigación
El 20 de mayo pasado, un grupo de obreros que trabajaba en una propiedad de la avenida Congreso 3748 descubrió restos óseos en el jardín lindante con la casa de Congreso 3742, donde vivía Graf con su familia desde los años ‘70.
La investigación, a cargo del fiscal López Perrando y el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), analizó 151 fragmentos de huesos y logró identificar a la víctima. El cuerpo pertenecía a Diego Fernández Lima.
Los expertos determinaron que el adolescente fue asesinado de una puñalada en el pecho, que dejó una marca en la cuarta costilla derecha.
Tras el crimen, intentaron desmembrarlo sin éxito y lo enterraron en una fosa improvisada a 60 centímetros de profundidad.
El hallazgo de los restos y las sospechas sobre Graf aportaron un giro clave a un caso que estuvo décadas sin respuestas. (TN)