El camino que une a la oferta laboral con la trata de personas
"En este último tiempo se volvieron un método de captación. La trata tiene cuatro etapas: ofrecer, captar, trasladar y recoger", explicó Rocío Moa, presidenta de Bahía contra la Trata.
Periodista y técnica en Comunicación Digital. Desde 2022, integra el equipo de redacción de La Nueva., donde cubre eventos sociales y políticos a nivel local, regional y nacional para la edición impresa y digital.
Promesas de sueldos altos sin experiencia, empleos con disponibilidad para viajar sin boleto de regreso y falta de información sobre el empleador son algunos de los indicios a los que se debe prestar atención para evitar caer en ofertas laborales engañosas.
En un contexto de incertidumbre económica, algunos ofrecimientos surgen como oasis, portadores de la esperanza de un futuro mejor que llega directo a la pantalla del celular o a la bandeja de entrada del correo electrónico.
Pero no siempre son lo que parecen. O casi nunca…
Detrás de los títulos originales y las condiciones ideales, pueden esconderse riesgos que juegan con las aspiraciones y necesidades de quienes buscan progresar.
“En este último tiempo, las ofertas laborales falsas se volvieron un método de captación. La trata tiene cuatro etapas: ofrecer, captar, trasladar y recoger”, explicó a La Nueva. Rocío Moa, presidenta de Bahía contra la Trata, una organización que alerta sobre el crecimiento de esta modalidad con diez años de experiencia en nuestra ciudad.
El entorno digital se ha convertido en terreno fértil para estos engaños. Mensajes vagos, sin detalles sobre el empleador o el puesto solicitado, proliferan en redes y aplicaciones de mensajería, apuntando a personas en situación de vulnerabilidad —mayormente económica—.
“En redes sociales aparecen mensajes como ‘se necesita chica con disponibilidad horaria’, pero no se menciona al empleador ni se ofrecen detalles del puesto”, dijo Moa.
Muchas de estas ofertas destacan por su falta de requisitos claros y la promesa de salarios llamativamente elevados, lo que genera una alerta en quienes buscan empleo.
El riesgo se multiplica cuando estos engaños buscan explotar laboral o sexualmente a las personas captadas.
“En ofertas donde piden ‘mujer joven con buena presencia’, o incluso piden fotos de cuerpo entero, estamos ante una situación alarmante”, advirtió.
Aunque la explotación no siempre es sexual. También pueden ser trabajos de sobrecarga horaria, abusando de la necesidad de quienes acceden a ellos.
“Me dijeron que trabaje 8, pero termino laburando 15”, ejemplificó Moa.
Las plataformas no solo amplían el alcance de los anuncios, sino también el acceso a la información personal de los usuarios, facilitando el trabajo de quienes buscan explotar a sus víctimas de turno.
La pandemia de COVID-19 intensificó esta problemática.
“En este último tiempo se ha detectado un aumento de casos. A veces miro en Facebook y veo que la gente sube su curriculum vitae a las páginas con todos los datos y no tiene que ser así. Le estás dando un montón de información privada a otro”, dijo Moa.
“Antes ibas al diario y mirabas los clasificados; ahora los ves en Instagram, Facebook, LinkedIn”, comentó.
Esta situación no discrimina género. La presidenta de Bahía contra la Trata explicó que, si bien las ofertas para mujeres suelen enfocarse en empleos como “modelo” o “recepcionista”, en el caso de los hombres se presentan como “changas”, lo que genera una falsa sensación de oportunidad y acceso rápido a ingresos.
“Estamos en un contexto político que hace que sea necesario salir a buscar trabajo. Te ofrecen cuidar chicos o pasar la temporada en otra ciudad, pero no sabés las condiciones de trabajo”, manifestó.
El auge de estas ofertas suele coincidir con el final del ciclo escolar, cuando jóvenes de 17 o 18 años buscan su primer empleo para independizarse económicamente.
Y Bahía Blanca no es ajena a este tipo de delitos. Casos recientes en el sur de la provincia de Buenos Aires demuestran que estas prácticas afectan a toda la región.
Para hacer frente a este fenómeno, Bahía contra la Trata y el Municipio difunden la línea 145, un canal anónimo, gratuito y nacional que permite reportar de forma confidencial cualquier tipo de engaño laboral.
Desde la ONG, además, recomiendan verificar la legitimidad de los empleadores, desconfiar de ofertas sin información clara y acudir a entrevistas acompañado, como métodos de prevención ante situaciones sospechosas.
“Son cosas a las que tenemos que estar atentos”, concluyó Moa.
Las oportunidades pueden ser atractivas, pero la precaución es clave. Ante cualquier sospecha o situación sospechosa, la línea 145 está disponible las 24 horas para recibir denuncias y proteger a quienes puedan estar en riesgo.