“Quieren convertir al productor sojero del interior en un timbero profesional", dice el campo

Redacción de La Nueva.

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   Confederaciones Rurales Argentinas consideró hoy que la implementación de un dólar-soja, como anunció en las últimas horas el gobierno nacional, pretende “convertir al productor sojero, del interior del país en un timbero profesional”, y consideró que en la medida “se esconde un proceso de gestiones múltiples, engorrosas, cuestiones impositivas provinciales y plena confianza en el Gobierno”.

   En ese sentido, señalaron que se trata de “demasiado engorro para gente que solo está acostumbrada a trabajar, producir y ahorrar en la moneda que produce (sus granos) para ir comerciando en la medida de sus necesidades”.

   A través de un comunicado, la dirigencia rural manifestó que “en los últimos días, asistimos a una violenta embestida del Gobierno en contra de los productores, imputándoles falsamente la ausencia de dólares que el Gobierno padece”.

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   “Desde el presidente hasta algunos de sus más obsecuentes seguidores culpan al campo, pretendiendo ignorar la realidad, la forma de producción, las estadísticas y hasta los más elementales derechos constitucionales”, se explicó.

   CRA manifestó que como “el gobierno luce desorientado, errático y no se sabe quién conduce, en su propia crisis busca culpables” y “ahora pretende que sea nuevamente el campo”.

   En cuanto a la implementación del dólar-soja, señaló que desde el Banco Central “se formuló un engendro destinado a incentivar la venta de soja” y que esto demuestra que el Estado desconoce el funcionamiento de comercialización y financiamiento del sector agropecuario.

   “Todos coincidimos en que la crisis es producto de la pésima gestión del Gobierno, la incapacidad de su gabinete, la ruptura de su alianza política y el atraso ideológico de sus posturas económicas y políticas”, se indica.

Cuánto estima recaudar el gobierno con el dólar-soja

   A esto se suma “la multiplicidad de tipos de cambio, (que) solo muestra el descontrol económico en el que estamos, donde a cada día y a cada problema se crea un nuevo tipo de cambio”.

   “El presidente y su violencia verbal contrastan con su pasividad y pésima gestión. Unos pocos confundidos que pretenden seguir viviendo del Estado, amenazan marchar contra los productores; marchan contra los que posibilitan que ingresen los dólares con los que se sostiene el frente externo y el pago de importaciones”, se advirtió.

   Por último, indican que un “gobierno confundido, ministros que se contradicen, medidas mal tomadas, inconsultas y nulas en sus resultados, culpas a terceros, violencia en las palabras y los gestos, decadencia y mentiras, agobio de los ciudadanos, récord de inflación, sin crédito externo, ni interno, solo auguran más decadencia, aunque a los gritos se nos pretenda engañar con un presente tan promisorio, como inexistente”.