Golden State, con un indomable Curry, se consagró campeón en la propia casa de los Celtics

Redacción de La Nueva.

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  Golden State Warrios se consagró campeón de la NBA, tras vencer como visitante a Boston Celtics, por 103 a 90, sellando la serie 4-2.

   La figura del partido fue Stephen Curry, que terminó con 34 puntos (6-11 en triples, 6-10 en dobles y 4-4 en libres), más 7 rebotes y 7 asistencias.

   De esta manera, Curry sumó el cuarto anillo y se quedó con el premio MVP por primera vez.

   Fue el séptimo título de los Warriors y cuarto para Andre Iguodala, Green, Thompson y el técnico Steve Kerr.

   Solamente los Lakers habían logrado un título en cancha de Boston, en 1985.

   Klay Thompson sumó 12 puntos en otro sexto partido victorioso para su colección, Andrew Wiggins (18 puntos, cinco asistencias, tres tapones y cuatro robos) y Draymond Green (12 puntos, 12 rebotes y ocho asistencias) estuvieron por todas partes y Jordan Poole agregó 15 puntos como suplente.

   A los Celtics se les volvió a ir el partido en sus pérdidas de balón (22) y en los rebotes ofensivos que les permitieron a Golden State (15 para más de 10 puntos de segunda oportunidad).

   Jaylen Brown fue su máximo anotador con 34 puntos y 12-23 de campo. Fue el principal responsable del ataque una vez más al lado de un Jayson Tatum (13 puntos y 7 asistencias) que cargó con mayor atención de la defensa de Golden State.

   Al Horford funcionó bien cuando lo buscaron (19 puntos y 14 rebotes, 4-5 en triples) y Robert Williams III brilló en la función de protección del aro (cinco tapones en 33 minutos), pero el banco volvió a tener un aporte casi nulo (apenas dos puntos de Derrick White y tres de Grant Williams) y eso Boston lo sintió: perdió por mucho esos minutos de la segunda unidad. (NBA y La Nueva.).