Insólito: atacaron a La Gioconda con un tortazo en pleno Louvre
El autor fue un hombre en silla de ruedas, que antes había tratado de romper el vidrio antivandálico que recubre la obra de Leonardo Da Vinci.
Un hombre que transitaba en silla de ruedas y con una peluca por el Museo Louvre en París, le arrojó una torta al cuadro de La Gioconda, luego de tratar de romper el vidrio antivandálico que resguarda a la obra de Leonardo Da Vinci.
El hecho, ocurrido en las últimas horas, rápidamente se viralizó y las imágenes y videos recorrieron el mundo en pocos minutos.
Si bien aún no hay un informe oficial sobre el ataque, comentarios en redes sociales aseguran que un hombre en silla de ruedas, durante el recorrido turístico, se paró y le lanzó lo que parecería ser algún tipo de producto de pastelería.
De acuerdo a descripciones, el joven abandonó la silla de ruedas y primero habría intentando romper el vidrio a prueba de balas para luego untar pastel en el cristal. Sin embargo, desde el museo informaron que el cuadro no se vio vandalizado ya que un vidrio antibalas lo protege.
Apenas ocurrido el extraño suceso, la seguridad del Louvre actuó rápidamente y la persona fue detenida. Según testigos del momento sospechan que este tipo de acto vandálico estuvo relacionado a un tema ecológico ya que se lo escuchó gritar “Piensen en la tierra, hay gente que está destruyendo la tierra; todos los artistas piensen en la tierra; por eso hice eso”.
Luego de ser detenido, personal del museo se encargó de ordenar la situación y limpiar el vidrio que había quedado manchado, mientras que los turistas que visitaban este icónico e histórico sitio empezaron a grabar el hecho.
La pintura realizada por Da Vinci en 1503 ha sufrido diversos ataques. El primero fue en 1911 cuando un hombre la robó del museo Louvre, en donde permanece resguardada desde 1797.
El siguiente sucedió en 1956 cuando le rociaron ácido en la parte inferior y, a fines de ese año, le arrojaron una piedra que también ocasionó daños. En 1974 una mujer le arrojó pintura roja y el último sucedió en 2009 cuando una mujer enfurecida por la denegación de su solicitud de ciudadanía francesa, le arrojó una taza de cerámica. (con información de Infobae y NA)