Carreras CTIM: las nuevas conquistas del talento femenino

Redacción de La Nueva.

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Por Alejandra Larosa
Especial para La Nueva

   El actual contexto de pandemia ha hecho que procesos tecnológicos y la adopción de soluciones digitales se acelere, reconfigurándose al mismo tiempo las dinámicas laborales. 

   La industria 4.0 requiere perfiles tecnológicos, de alto nivel de especialización,  para ocupar cargos gerenciales y de alto mando. La sociedad en su conjunto, por medio de un entramado de colaboración, está ante el desafío de impulsar y propiciar una mayor llegada de las mujeres a las direcciones  corporativas, ya que la escasa representación de mujeres en puestos gerenciales es el síntoma que esconde por detrás la disparidad entre hombre y mujeres en la participación en carreras CTIM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas)  y en la posibilidad de acceso y ascenso en el mercado laboral, siendo claro que las mujeres son quienes experimentan pisos pegajosos y techos de cristal, lo que las limita en su promoción .

   Es clara la disparidad que existe en las universidades en lo que respecta a la matriculación en carreras  CTIM,  siendo mayor la presencia de hombres por sobre las mujeres, aspecto que se traslada al campo laboral. 

   La realización de acciones simultáneas y permanentes son necesarias para reducir esta brecha. En principio, es fundamental la generación de datos, que permitan visibilizar situaciones y contextos, además, es necesario compartir prácticas que demuestren que es posible superar barreras y romper estereotipos.

   De acuerdo a datos presentados por el BID en 2019, basados en el  Informe sobre Servicios Basados en Conocimiento de noviembre de 2018 del Ministerio de Producción y Trabajo de Argentina, en lo que respecta a la participación de las mujeres en el área de ciencia y tecnología, “el sector de servicios basados en conocimiento (SBC) – en el cual se destaca el área de software y servicios informáticos (SSI)- representa un 6,6% del PBI, ocupa a 1,3 millón de personas (49,2% son asalariados) y es el cuarto complejo exportador del país, con más de US$ 2.900 millones en el primer semestre de 2018.

   En los últimos doce años, SSI fue el subsector con mayor dinamismo exportador de los SBC: creció a una tasa anual acumulativa del 16,1%”. 

   El potencial crecimiento del sector, exige pensar en los mecanismos de acceso y permanencia, inclusión y participación plena de las mujeres  en los procesos formativos, en oportunidades laborales y de integración que superen las brechas de género. 

   Es por la relevancia del sector en la economía nacional y en las posibilidades reales de empleo que representa que se deben enfatizar los esfuerzos para garantizar a las mujeres el acceso en los procesos formativos, los que posibiliten posteriormente el ingreso al mercado laboral, ámbitos en los que asimismo aún se deben superar brechas de género.

   Actualmente, los sueldos en el sector CTIM son superiores comparados con los de otras áreas y la brecha salarial entre hombres y mujeres es también inferior a otros campos, por lo que se debe alentar a las niñas y jóvenes a participar en estas disciplinas, a intervenir en ellas, a aportar su liderazgo y capacidad de transformación. 

   La promoción de este tipo de ciencias desde la infancia claramente impactará en reducir las desigualdades de género en el ámbito laboral y tendrá consecuencias positivas en la vida de esas niñas que siendo mujeres verán equidad en el acceso a posibilidades de crecimiento profesional, laboral y económico.