La ilusión de Bahía Basket quedó a mitad de camino, aunque sigue en la ruta hacia Río Gallegos
Tras ganarle a Boca, anoche no pudo repetir ante Obras: 65 a 58. No jugaron Levy y Corvalán. Mañana, ante Hispano.
Por Fernando Rodríguez / [email protected]
Enviado a Buenos Aires
(Nota publicada en edición impresa)
Con altibajos, pero mostrando recursos para afrontar malos momentos, a Bahía Basket le faltó final y perdió ante Obras, por 65 a 58.
Sabiendo de las limitaciones de personal –Levy recuperándose de problemas estomacales y Corvalán con una sobrecarga en un aductor-, Sanders salió decidido a tomar mayor protagonismo ofensivo y en él se apoyó Bahía Basket en el comienzo, sumado al atrevimiento de Caio y Marini.
Adelante no había inconvenientes. Y en la medida que impidió los rompimientos, atrás, tampoco. Por eso escapó 12-6.
No obstante, Dixon se encargó de marcar el camino al cesto, en el 5x5 y Obras, a la vez, tomó en varias oportunidades a contra pierna a Bahía, metiendo un parcial de 12-1, en 4m20 (18-13).
Sin Johnson en cancha a Bahía se le complicó generar tiros limpios (anotó sólo 11 puntos). Aunque defensivamente tuvo mejor retroceso y mayor dinámica.
Las estadísticas del partido
Y eso le permitió mantenerse en juego, con Martin y Luzcando metidos en el sistema, algo que no estaba sucediendo últimamente.
Así se fue al descanso largo 33-27 abajo.
Las posiciones
Al regreso Bahía mostró una buena defensa colectiva y paciencia ofensiva. Aunque las limitaciones fueron saliendo a luz, le costó mucho lanzar limpio, sufriendo la desventaja física cuando fue al cesto.
La ventaja de Obras fue que estuvo más efectivo adelante, básicamente con Barral con tiros a larga distancia, clavando un parcial de 11-2 (47-36), diferencia que Marini recortó a 8, al final del tercer cuarto.
En el último, después de un triple de Dixon que pareció demoledor (50-39), Bahía tocó fondo y se impulsó hacia arriba.
Con una defensa que confundió, pudo adueñarse de la pelota y correr. Además, Martin se soltó y Johnson le dio de comer, al tiempo que Caio se vistió de adulto, atacó con su habitual desfachatez y hasta clavó doble y falta más un triple. Parcial de 15-0 y 54-50 arriba, con 5m50 por jugar.
Obras, sin Barral –salió lesionado- supo reinventarse. De todos modos, a esta altura no tenía margen de error. Aunque Bahía fue quien más se equivocó, acumulando pérdidas que pagó caras.
Y otra vez fue Dixon el que apareció en escena, con un triple decisivo con un minuto por jugar: 64-58, sumándose un robo de Fernando Zurbriggen a Elías con 36 segundos, para bajarle la persiana al partido.
La gira continúa. Hispano espera por Bahía Basket en Río Gallegos.