Frigorífico Sansinena
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Hace 117 años, en septiembre de 1900, llegó a la ciudad una comitiva con la misión de analizar el sitio elegido por la compañía Sansinena para emplazar su nuevo frigorífico.
La historia de esta empresa comenzó en 1883, cuando el francés Simón Gastón Sansinena instaló, en la margen sur del Riachuelo, un matadero y grasería. Ocho años después (1891), la empresa se convirtió en sociedad anónima, con el nombre de Compañía Sansinena de Carnes Congeladas, elaborando los conocidos productos La Negra.
El presidente de la firma era el megaempresario Ernesto Tornquist, muy relacionado con nuestra región. Uno de sus primeros anuncios realizados fue la construcción de un frigorífico en las 2.000 hectáreas de su propiedad, ubicadas en cercanías de Bahía Blanca, más precisamente en la zona conocida como Cuatreros.
La visita que rememoramos contó con la presencia de Adolfo Luro, Juan Oliver y del ingeniero Luis Huergo, encargado del proyecto. Juntos recorrieron el canal de acceso, levantaron datos para construir el muelle y calcularon el caudal del Sauce Chico.
Consultado por un cronista de este diario, el Dr. Luro se excusó de dar una fecha de iniciación de los trabajos, pero señaló que los planos estaban terminados y alentó a los hacendados a preparar alfalfares y campos para invernada, “porque el frigorífico impone que ese trabajo se encuentre adelantado para desenvolverse con energías”. La planta fue construida entre 1900 y 1903. Su puesta en marcha aportó 800 habitantes al pueblo que, a partir de 1943, tomó el nombre de General Daniel Cerri.
El frigorífico Cuatreros, de Sansinena, funcionóp con suerte dispar. En la década del 40 pasó a manos de la Corporación Argentina de Productores de Carnes (CAP) y la historia terminó con su cierre definitivo.