Bahía Blanca | Martes, 16 de abril

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Llegó el tornquistense Luis Vila y la búsqueda del 9 se está convirtiendo en una pesadilla

Ya son 10 los refuerzos que entrenan en el plantel aurinegro. Por el centrodelantero goleador, la mira de la dirigencia también apunta al exterior.
Fotos: Emmanuel Briane-La Nueva.

Por Sergio Daniel Peyssé / speysse@lanueva.com

   “Este que llegó es el 9, no sé porque siguen buscando otro”.

   Mañana fresca en el complejo de Teléfonos. Un hincha caracterizado del aurinegro trataba de entender por qué Olimpo continúa en la búsqueda de un centrodelantero goleador cuando él había leído, vaya a saber donde, de que Luis Alfredo Vila, el décimo refuerzo del plantel que orienta Mario Sciacqua, jugaba en ese puesto y era el máximo artillero de la pasada reciente campaña de Gimnasia de Jujuy en la B Nacional.

   Ya se lo voy a explicar. Vayamos por partes. El “Negro” Vila, como lo definió el orientador olimpiense, quien lo dirigió en el primer semestre de 2016 en el “Lobo” jujeño, nació el 6 de marzo de 1992 en Tornquist. Se inició en Automoto y en 2012 fichó para las inferiores de River. En el “Millo” sólo pudo llegar a disputar dos partidos por la Copa Argentina.

   Después pasó por Everton de Chile (2013, con 13 partidos y 2 goles), Olmedo de Ecuador (2014, 13 y 2) y Godoy Cruz de Mendoza (2015, 4 y 0).

   Vila se sumó hoy a los entrenamientos, pero según Sciacqua no es el 9 referente de área que está buscando para reemplazar a Fernando Coniglio, vendido a Huracán en 1.900.000 dólares.

   “Es un gran jugador, se puede mover por todo el frente de ataque y se asocia sin problemas a la creación. Puede jugar entre los centrales, no digo que no, pero seguimos buscando otro tipo de centrodelantero. Por ahí no me entienden, pero yo sí se lo que quiero”, manifestó el DT aurinegro.

   Vila se sumó a la lista de incorporaciones que ya integraban los defensores Cahais, Nasutti, Ojeda y Silva Torrejón; los volantes Mancinelli, Bellocq y Covea, y el delantero Fornari.

   Y el único que falta llegar, y que lo hará mañana, es Pablo Mauricio Rosales, el lateral derecho proveniente de Estudiantes de La Plata y de último paso por Atlético Tucumán.

“Complicadísimo”

   Esa palabra utilizó el presidente Alfredo Dagna para calificar la búsqueda del 9 goleador que está esperando Olimpo para cerrar definitivamente el plantel.

   “En el negocio del fútbol argentino se están manejando valores de otras galaxias. Al menos Olimpo está muy lejos de lo que piden ciertos centrodelanteros de Primera división y algunos de los consagrados de la B Nacional”, declaró el titular olimpiense.

   “Te doy un ejemplo: Rodrigo Salinas nos exige 500.000 dólares por el pase y 25 dólares de sueldo por mes. Imposible desde donde lo mires”, esgrimió Dagna, quien dijo que ya empezaron a descartar nombres, como el de Tobías Figueroa, el 9 de Brown de Madryn, quien volvió a Belgrano de Córdoba (dueño de sus derechos federativos y económicos), que no lo quiere largar por menos de 700.000 dólares (traspaso y firma de contrato).

   “Seguiremos esperando, no nos queda otra. Por el momento, en ese mismo puesto, estoy manejando entre 10 y 15 negociaciones paralelas. Alguna avanzó más que otra, pero en todas estamos lejos de cerrar”, indicó Dagna, adelantando que existe la posibilidad de sumar un atacante de un país sudamericano.