Crisis migratoria en Europa: las fotos de un nene ahogado dieron que hablar en el mundo
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La foto de un nene ahogado en las costas de Turquía que se difundió en las últimas horas generó polémica en los medios mundiales y en las redes sociales.
La imagen simboliza la realidad que padecen los inmigrantes que intentan escapar de sus países para migrar a Europa.
El niño se llamaba Aylan Kurdi y tenía 3 años. Las autoridades turcas creen que procedía de la convulsionada localidad siria de Kobane.
Aylan viajaba en una de las dos embarcaciones que habían salido de la localidad turca de Bodrum con destino a la isla griega de Kos, puerta de entrada de la Unión Europea. Pero algo salió mal y naufragaron.
Los guardacostas turcos fueron alertados por los gritos de los pasajeros de los barcos y pudieron rescatar los cuerpos de 12 personas, entre ellos, el de este niño pequeño que yacía en la playa boca abajo.
Un fotógrafo retrató la imagen del chico sin vida en la arena y ya es tapa de los principales medios.
The Independent, El Mundo, El País, Corriere della Sera, Newsweek y Huffington Post, son algunos de los diarios que la usaron en sus portadas.
Miles en las costas griegas
Miles de refugiados e inmigrantes, muchos de ellos sirios, llegaron hoy al puerto del Pireo, en Atenas, con el objetivo de seguir su periplo hacia el norte de Europa, en un nuevo episodio de la grave crisis migratoria que divide a los países europeos.
También hoy, al menos doce sirios, entre ellos 5 niños, se ahogaron frente a las costas de Turquía al naufragar dos embarcaciones que habían salido de la ciudad turca de Bodrum e intentaban llegar a la isla griega de Kos, puerta de entrada a la Unión Europea.
Otros 3.000 pudieron ser salvados por la guardia costera italiana en el Mediterráneo en las últimas 24 horas.
Únicamente en el puerto de Pireo, cerca de 4.500 refugiados llegaron hoy, después de que las autoridades griegas los trajeran desde Lesbos, una isla del mar Egeo que en los últimos días vio llegar a miles de personas desde Turquía.
Lesbos, igual que Kos, también en el Egeo, se han convertido en el punto de entrada a Europa de refugiados que huyen a través de Turquía de los conflictos armados en Oriente Medio y África.
La mayoría de ellos quieren continuar su viaje hacia el norte de Europa a través de los Balcanes, en la crisis migratoria más grave en el continente desde la Segunda Guerra Mundial.
En Hungría, uno de los países de entrada de los migrantes que quieren llegar a Alemania, la tensión sigue creciendo y 2.000 personas seguían acampando delante de la estación de Keleti de Budapest o en una zona de tránsito del edificio. Un centenar de ellos se manifestaron para expresar su descontento.