Bahía Blanca | Viernes, 29 de marzo

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Mientras Italia llora a sus fallecidos, el equipo de un argentino desafía a la pandemia

Virtus Bologna, donde juega Marcos Delía, volvió a entrenar, con restricciones.

Fotos: archivo-La Nueva.

   Mientras Italia está al frente de fallecidos por la pandemia y segunda en contagios de coronavirus, Virtus Bolonia, donde juega el argentino Marcos Delía, puso en actividad a sus jugadores.

   “Volvemos a trabajar nuevamente después de este descanso”, explicó el técnico Djordjevic, intentando normalizar la situación.

   “Continuamos brindando a nuestros muchachos todos los medios que podemos para ayudarlos a hacer su trabajo y recuperar su fuerza y ​​condición física al completo. No nos rendimos", dijo.

   Los trabajos son individuales, considerando que las restricciones sanitarias no permiten el entrenamiento colectivo.

   El protocolo comienza con un empleado que abre las puertas de las instalaciones y, como máximo pueden ingresar entrar dos jugadores al estadio, sin coincidir en ningún momento.

   En consecuencia, uno trabaja en la cancha y el otro en el gimnasio.

   También, cada uno utiliza un vestuario independiente.

   Al finalizar la sesión, que se extiende como máximo una hora y media, todo es desinfectado. Y así sucesivamente.

   "El Comité Olímpico Italiano le da permiso a los atletas olímpicos y a los deportistas profesionales para entrenar, pero como máximo grupos de tres. Entonces, obviamente el equipo se dividió en grupos y estamos yendo en diferentes horarios durante el día a entrenar", le contó Delía a Onda Regional de Murcia.

   "La verdad -agregó- es que ayuda muchísimo a lo físico para mantenerse en forma, para seguir trabajando con el balón, pero también es bueno para la cabeza porque son dos horas que salís, que sudás, que corres, que liberas energía y hace más llevadero este aislamiento".