La anécdota imperdible de Jerónimo Blanco, el “brujo” de Algarrobo que juega en La Armonía
Con el escudo de Juventud Unida tatuado en su piel, declaró sin vacilar que “Agrario no existe” y tiró una bomba sobre un mito instalado en el pueblo cuya verdad salió a la luz hoy en el programa El Diario Deportivo.
Mostró su look renovado con cabellera platinada al viento, alertó a Algarrobo, su pueblo, contando la verdad sobre una historia que se había convertido en mito urbano y lejos estuvo de sentirse tímido a la hora de activar la cámara y el micrófono para dialogar, por primera vez, con el programa El Diario Deportivo, que se emite, de lunes a viernes, de 14 a 15, por La Nueva Play.
Jerónimo Blanco, central fornido y metedor de La Armonía, es uno de esos “personajes” amables para entrevistar, porque se involucra en cada tema que surge en la charla aclarando que lo único que no se negocia es la pasión por su club, Juventud Unida, y la vuelta, en un futuro no muy lejano, a su pagos algarrobenses, donde vive su familia, su novia y ese “odio” tan particular por Juventud Agraria, el clásico rival de su amado verdiamarillo que, por si fuera poco, lleva tatuado en su piel.
“En la temporada 2019 (el último torneo antes de la pandemia en la Liga de Río Colorado), cuando Ezequiel Miralles se fue a retirar a Agrario (sic), pasó algo ´feo´ en la penúltima fecha del Clausura, en una final entre ´ellos´ y La Adela de Río Colorado”, anticipó “Jero”, de 22 años “bien llevados”.
“Agrario tenía que ganar sí o sí para llegar al último partido con posibilidades de ser campeón. A la mañana del día del partido, apareció sal gruesa desparramada en la tranquera del predio de ´ellos´, que a la tarde perdieron 2-1 y quedaron sin chances de ir por el título. Esa especie de ´macumba´ fue el tema de la semana en el pueblo, y todavía hoy sigue siendo una incógnita sobre quien lo hizo y como fue”, relata el “Vikingo” del velezano antes de terminar de activar la “bomba”.
“Hoy, casi seis años después, me hago cargo: fui yo. A la noche, caminé hasta la cancha de Agrario, vacié una bolsa entera de sal y me alejé sin hacer ruido y sin que nadie me vea. Ahora que se sabe la verdad, en Algarrobo algo va a pasar, seguro algo me van a decir, pero yo logré mi cometido, ser feliz con el triunfo de La Adela”, sentenció.
Un mano a mano con “perlitas” y “disparates” que no te podés perder. Mirá la nota completa: