Diario de viaje, día 9: el 18 de agosto y una jugada del destino
Sensaciones, experiencias, comentarios y mucho más de lo que implica cubrir los Juegos Panamericanos Junior en Paraguay.
Periodista. En La Nueva desde 2013. Especializado en el movimiento olímpico. Asistió a los Juegos Olímpicos de Río 2016, a los Juegos Olímpicos de la Juventud Buenos Aires 2018, a los Juegos Suramericanos de la Juventud Rosario 2022, a los Juegos Suramericanos Asunción 2022, a los Juegos Panamericanos Santiago 2023, los Juegos Olímpicos París 2024 y los Juegos Panamericanos Junior Asunción 2025, entre otros eventos internacionales.
Seguramente, recuerden que fue un 22 de junio cuando Maradona gambeteó a toda Inglaterra para anotar el mejor gol de la historia. Otros, con mayor espíritu olímpico, sabrán de la trascendencia del 28 de agosto, el día del doble oro del básquet y el fútbol en Atenas 2004.
Las fechas no son más que números, pero sirven para mantener viva la memoria y subrayar hechos que por algún motivo en particular, emergieron de lo ordinario.
Así, revisando data a la hora de organizar la cobertura del lunes, observé que fue el 18 de agosto el día que quedó marcado a fuego en la historia del hockey argentino, cuando Los Leones se subieron a lo más alto del podio en Río 2016.
Aquella vez no era la cancha del Comité Olímpico Paraguayo sino que la disciplina se desarrolló, al igual que el rugby, el canotaje slalom y el BMX racing, entre otros, en Deodoro, al oeste de Río de Janeiro.
Recuerdo haber llegado con un par de horas de antelación y que en el horizonte amenazaba una tormenta que finalmente no llegó. A mi derecha, un grupo de indios con sus característicos turbantes. A la izquierda, parte de la numerosa hinchada argentina. En frente, un durísimo duelo contra Bélgica que comenzó 0-1.
Argentina formó con Juan Manuel Vivaldi, Juan Ignacio Gilardi, Pedro Ibarra, Gonzalo Peillat, Ignacio Ortiz, Lucas Rossi, Manuel Brunet, Juan Martín López Facundo Callioni, Lucas Vila y Agustín Mazzilli. Ingresaron: Juan Manuel Saladino, Luca Masso, Lucas Rey, Joaquín Menini e Isidoro Ibarra. Por lesión, no estuvieron presentes Matías Paredes y Matías Rey.
Lo empató Pedro Ibarra, desde el corto, e Ignacio Ortiz puso arriba a la Selección, antes del final del primer cuarto. Gonzalo Peillat, en el segundo y de otra jugada fija, estiró la diferencia. Bélgica descontó en el tercero, pero en el epílogo llegó la jugada más recordada porque los europeos sacaron a su arquero y Agustín Mazzilli selló el 4-2, festejando sentado dentro del arco.
Increíblemente, la victoria de Los Leoncitos acá en Paraguay también fue 4 a 2.
Hasta la final, el seleccionado se había impuesto 11-0 a Brasil, 8-0 a Estados Unidos, 20-0 a Paraguay y 5-0 a Chile. Incluso, ganaba el juego por la medalla de oro 4 a 0, pero el destino es el destino...
"Me quedó algo de bronca por esos dos goles, teníamos la expectativa de terminar el torneo en cero. Lo podíamos hacer, pero son cosas que puedan pasar y Canadá demostró que hizo un buen torneo, yendo de menos a más", declaró el ahora entrenador, Juan Ignacio Gilardi.
Mucho de lo que se vivió en la zona mixta tuvo que ver, lógicamente, con lo que sucedió hace nueve años en Brasil.
"Es una fecha súper especial y justo se da con la oportunidad de vivir otra final, aunque ahora me tocó desde afuera. Estoy muy contento porque los chicos jugaron todo el torneo con seriedad. Desde que salió el calendario sabíamos que las fechas iban a coincidir. Siempre que se acerca Agosto sabemos que hay algo para festejar", sostuvo el coach ante la requisitoria de La Nueva.
"Este torneo es una iniciación al olimpismo. Llevamos a la cancha mucho de lo que pudimos entrenar. Teníamos que jugar todos los partidos a fondo, respetando al rival. Es un torneo que sirvió para trabajar en un montón de aspectos y para los chicos, que hicieron su debut con la remera de Argentina, sacarse ese nerviosismo", declaró.
"Lo lindo para estos chicos es empezar a vivir con otros deportistas que normalmente no te los cruzás. La convivencia es muy linda. El respeto, ir al comedor, mantener la cancha en orden, saludar a los voluntarios... Estuvo muy bueno y el ambiente es espectacular", cerró, justo antes del podio que puso a la camiseta argentina de hockey en lo más alto.
Hasta mañana.