Bahía Blanca | Martes, 25 de noviembre

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Debutó en Independiente, es ídolo en Ecuador y fue el arquero de Olimpo en su última “salvación” en Primera

Dio múltiples vueltas olímpicas en Liga de Quito, pero en su memoria sigue vivo aquel partido ante Aldosivi, bajo la lluvia, el 26 de junio de 2017, el que le permitió al aurinegro permanecer en la máxima divisional de AFA. Se retiró en 2024 y actualmente está sin club.

Fotos. Archivo La Nueva y TyC Sports

“¡Cómo no me voy a acordar!, ese día cantamos bajo la lluvia, fue mantener a Olimpo en Primera después de muchísimos inconvenientes y resultados adversos. Fue uno de los grandes logros que disfruté en mi carrera como arquero profesional”.

Para Adrián José Gabbarini, como para otros integrantes de ese plantel, el tiempo no borró nada del disco rígido de la memoria y aquel partido del aurinegro frente a Aldosivi, el 26 de junio de 2017, en Mar del Plata y bajo un aguacero descomunal, marcó un hito más en la historia del club bahiense en su paso por la máxima divisional del fútbol de AFA.

“Gabba” nació el 10 de octubre de 1985 en la ciudad mendocina de Guaymallén, llegó a Independiente de Avellaneda a los 22 años y debutó en la mayor del rojo el 13 de septiembre de 2009. 

Después pasó por Newell’s (no sumó minutos), Argentinos Juniors y Tigre, hasta recalar en Olimpo el 26 de febrero de 2017. Vino en reemplazo de Nereo Champagne, quien había emigrado al Leganés de España.

En ese mercado de pases, el 1 se incorporó al equipo que conducía técnicamente Mario Sciacqua junto a Eial Strahman (se permitían dos refuerzos), un 9 que recalaba desde Talleres de Córdoba y que no marcó ni un gol para la escuadra olimpiense.

Quince días después de haber arribado, Gabbarini debutó en la fecha 15 de ese torneo de AFA denominado Independencia. Tomó el lugar que dejaba Facundo Anchoverri y el de Bahía igualó 1-1 con Colón en Santa Fe. El punto no le sirvió para salir de la zona de descenso.

Atajó los 16 cotejos restantes, le convirtieron 18 goles y en la fecha 30, ante el “Tiburón” en el estadio José María Minella, tuvo dos intervenciones importantes y no pasó sobresaltos en el 3-0 de su elenco.

Esa noche Olimpo fue feliz: zafó con el promedio por terminar un peldaño arriba de los cuatro descendidos (Aldosivi, Quilmes, Atlético Rafaela y Sarmiento de Junín) y en las posiciones fue 24 entre los 30 participantes de ese campeonato.

Como el contrato de Gabbarini vencía en junio de 2018, continuó en filas aurinegras para la Superliga 2017-2018. Registró 13 presencias y en enero de 2018 decidió rescindir el vínculo para sumarse a la Liga Deportiva de Quito. Fue una de las cincos bajas junto a Orlando Gaona Lugo, Cristian Nasuti, Jonatan Blanco y Tomás Costa.

En contrapartida, para la continuidad de ese certamen y al plantel que dirigía Christan Bassedas, se sumaron los uruguayos Gonzalo Porras (mediocampista) y Renzo Ramírez (defensor).

Olimpo continúo su peregrinar en la competencia con una pésima campaña y el 14 de abril de ese año bajó a la B Nacional. Exactamente un año más tarde su caída seguiría hacia el Federal A.

Existen muchos casos de jugadores que no terminaron de explotar en clubes de nuestro país y se convirtieron en ídolos en el extranjero, como sucedió con Adrián Gabbarini, campeón con Independiente de la Copa Sudamericana 2010 y símbolo de la Liga de Quito.

Antes de la consagración con el Rojo, recibió por primera vez la convocatoria a la Selección Argentina de Diego Armando Maradona para un amistoso ante Haití. Y ya como arquero titular definitivo de Independiente, fue llamado por Sergio Batista en 2011 para disputar algunos partidos informales previos a la Copa América 2011, contra Nigeria --el suplente fue Emiliano Dibu Martínez-- y Polonia. No obstante, se quedaría afuera de la lista del certamen.

El cierre de su etapa en Independiente no fue el esperado. Luego del descenso a la B Nacional en junio de 2013, el entonces presidente, Javier Cantero, le dijo que no iba a tenerlo en cuenta y le quitó la posibilidad de volver a Primera con el club que lo vio nacer. Gabbarini confesó que, tras sufrir una grave lesión en la rodilla, tuvo que hacerse cargo él mismo de los costos de los tornillos. “Él está en todo su derecho de decir quién sigue y no. Pero que me lo diga en la cara y rescindamos de común acuerdo. No le gusta que le digan las cosas en la cara. El dolor que me llevo es contra Cantero y no contra la institución. Es un mentiroso y se lo dije en la cara”, disparó por entonces.

Vayamos a lo grato, a la parte más resplandeciente de su trayectoria: después de haberse mantenido con Olimpo en Primera, viajó a Ecuador y fue el cuidapalos principal de la Liga de Quito, donde escribió una historia de gloria.

Gabbarini se paró bajo los tres palos de uno de los cuadros más importantes del continente durante cinco años. Apenas llegó, quebró una racha de ocho años sin salir campeón de la liga local. Además, levantó la Copa Ecuador 2019, Supercopa 2020 y 2021, la liga 2023 y, como frutilla del postre, la Copa Sudamericana 2023.

A pesar de ser titular indiscutido en sus primeras temporadas, una lesión de ligamentos lo sacó del césped en 2022, lo que le permitió a Alexander Domínguez ganarse la titularidad en su regreso al club. Por eso fue suplente en la final contra Fortaleza, que marcó el cierre de su laureada trayectoria como jugador profesional.

No hubo mucho tiempo de descanso. Después de anunciar su retiro a principios de 2024, Gabbarini asumió como entrenador de arqueros del plantel. Acompañó primero a Josep Alcácer y luego al entrenador argentino Pablo Sánchez entre enero de 2024 y mayo de 2025, lapso en el que logró conquistar el campeonato local y la Supercopa. El exguardameta se fue del club junto con el técnico en el primer semestre del año. Aunque se había rumoreado que podía recalar en Universidad Católica de Chile, aún está a la espera de volver al ruedo en un banco de suplentes.

¿Y si lo llaman de Olimpo?