Obredor, autor del gol agónico de Villa Mitre: "Yo no soy de rendirme, sabía que una me iba de quedar"

Mikel Iñurrategui

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Gabriel Obredor lleva su fe en Dios como bandera, y con esa premisa siguió insistiendo hasta el final como todo Villa Mitre, para empatar el partido ante Santamarina y poder clasificar a la final de la Reválida.

"Yo no soy de rendirme, soy de orar, de hablar con Dios y sabía que me iba a quedar una. Gracias a Dios me quedó esa y la pude empujar", le contó el autor del 1-1 a los 87 a minutos a La Nueva., en zona de vestuarios del estadio General San Martín de Tandil.

"Estoy feliz por la clasificación -agregó-… ¡puff… fue difícil! Era una final, porque creo que llegamos los dos mejores equipos. Y creo que los dos merecíamos estar en la final, pero bueno uno tenía que pasar y gracias a Dios pasamos", agregó el volante tricolor.

-Incluso después de que no pudieran concretar varias chances, ¿seguías creyendo?

-Sí… no te voy a mentir: dudé. No sabía si iba a pasar. Me había quedado con bronca, pero sabía que Facu (Fabello) la iba a peinar y justo me quedó.

-¿Qué sentiste en el festejo?

-Pensé en Dios y en mi familia, hace 11 meses que no voy a mi casa. Por eso pensé en ellos y en Dios, porque es el que me da la fuerza para seguir.

-Habían hecho los méritos para no estar perdiendo, ¿cómo jugaba eso en la cabeza?

-Creo que fue nuestro mejor partido en el torneo. Jugamos, atacamos… les decía a mis compañeros que no había que meterse con los árbitros. Siempre fuimos para adelante, obvio que quedamos expuestos… ellos tienen un 9 (De La Vega) que es un animal y supimos defendernos.

Obredor llegó a Villa Mitre como refuerzo en plena temporada y lleva dos goles clave en la Reválida, ya que también le marcó a Argentino de Monte Maíz en la revancha en El Fortín.

-En lo personal, segundo gol importante, ¿cómo estás viviendo esto?

-Estoy contento. Tenía la espina de no haber marcado, porque soy un jugador que siempre pisa el área. Por suerte pude hacer un gol importante y estoy feliz.

-Si bien llegaste hace poco al club, sabés la ilusión que hay en la gente y más después de esta clasificación...

-Se lo merecen. Yo vine a mitad de año y ellos se lo merecen, como se lo merece Manchafico y un montón de otros chicos que están hace años. Yo trato de aportar mi granito de arena para poder ascender, le dije a mi representante que si bajaba de categoría era para ir a un equipo fuerte y Dios quiera que podamos dar ese pasito, que los chicos hace mucho que la vienen peleando. Esperemos, si Dios quiere, podamos ascender.