El transporte público recupera los números de la prepandemia

Mario Minervino

mminervino@lanueva.com

Es periodista, ingeniero civil y docente de la Universidad Nacional del Sud en materias relacionadas con el Patrimonio arquitectónico y el planeamiento urbano. Ha publicado notas en revistas Vivienda, Todo es Historia, Obras & Protagonistas y Summa +. Participa en varios micros radiales referidos a la historia de Bahía Blanca. En dos ocasiones recibió primera mención por parte de ADEPA en el rubro Cultura e Historia.

En las últimas décadas la ciudad ha tenido un cambio en su distribución demográfica, el cual se manifiesta con la aparición de decenas de nuevos barrios ubicados en la periferia. 

Bahía Blanca es, según estudios del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (CIPPEC),  la que más ha crecido en extensión en el país y una de las de menor densidad poblacional, situación que los urbanistas consideran negativa porque exige la ampliación de sus servicios públicos y de la infraestructura. 

Esos ajustes incluyen la recolección de residuos, la provisión de electricidad, gas, agua y cloacas y la prestación del transporte de pasajeros. Este último punto en particular requiere la adecuación de recorridos existentes o la creación de nuevas líneas. 

Para conocer la situación actual de la prestación que brindan BTS, San Gabriel y Rastreador Fournier –un total de 20 líneas--, hablamos con Ramiro Frapiccini, Director de Movilidad Urbana municipal.

--Va quedando atrás la pandemia, cuando pareció que el transporte urbano colapsaba por la baja de pasajeros. ¿Cómo está hoy la situación?

--El sistema se ha recuperado y estamos en valores similares a los anteriores al Covid. En marzo último se realizaron 2.450.000 viajes, un 0,8% por debajo del mismo mes de 2019. Estamos en un promedio de 110 mil viajes cada día hábil, que es equivalente a la cantidad prepandemia. En base a esto decimos que el servicio está en buena situación.

--La pandemia obligó a volver al automóvil particular, ¿La gente retomó el uso del transporte público?

--Es cierto, pero eso se va revirtiendo. Vemos un incremento en el uso de la bicicleta y en la cantidad de estudiantes, incluidos los universitarios, que usan el transporte público. De todos modos es claro que algunos hábitos se han modificado.

--Si bien estamos lejos de la inseguridad del conurbano, la colocación de cámaras de seguridad en los colectivos parece ser un componente importante. ¿Cómo está esa situación?

--Las unidades de BTS cuentan con cámaras. El resto no las ha incorporado porque la provincia nunca implementó el subsidio ni los préstamos que anunció para ayudar a las empresas para su compra e instalación. Hoy es un costo que las empresas no pueden solventar.

--Bahía Blanca tiene uno de los boletos más caros del país, pero desde BTS aseguran que el esquema de pasajeros frecuentes y subsidios genera una baja en el valor promedio. ¿Eso se mantiene?

--La realidad es que solo el 25% de los usuarios paga la tarifa plana. El resto tiene un descuento o atributo. El porcentaje de pasajeros frecuentes es bajo, apenas el 5%, pero existe un universo de usuarios –personal de seguridad, de salud, jubilados, estudiantes—que tienen descuento. A esto se suman los beneficios del sistema de viajes combinados.

--¿El actual valor del boleto es adecuado?

--Lo ajustamos de manera trimestral, aunque con el actual proceso inflacionario queda rápidamente desactualizado. Hoy el valor permite mantener equilibrado el sistema y que las empresas pueden afrontar sus costos y tener un beneficio. De todos modos las tarifas siempre hay que actualizarlas para que el sistema no se deteriore.

La 521, su posible impacto y nuevas líneas

El valor del pasaje surge de aplicar una compleja formula que determina un índice que relaciona los kilómetros de recorren las líneas con la cantidad de pasajeros que transporta.

La modificación de recorridos para llegar a puntos alejados y la creación de nuevas líneas puede alterar de manera negativa esa relación.

--¿Cómo fue el proceso para la creación de la 521?

--En un recorrido diseñado a partir de estudios técnicos, considerando una cantidad estimada de viajes, una evaluación bastante difícil de determinar. Lo que es claro es que el sector al que cubrimos ha tenido un gran aumento poblacional y ninguna línea llega al lugar. Habíamos encontrado una alternativa con la 502, con un rondín que llegó hasta el Conicet y luego hasta Bosque Alto. Ahora tenemos una solución definitiva. Consideramos varios recorridos posibles y decidimos establecer dos ramales porque con uno había muchos kilómetros improductivos. 

“También hubo reuniones con los vecinos para ajustar la traza. Lo único que no pudimos acceder es a que los coches ingresen a los barrios, porque son todas calles de tierra y necesitamos que las unidades circulen por asfalto para que la prestación sea sustentable”.

--¿Creen que será productiva?

--Nos parece que se va a usar mucho. Nosotros vamos a ir evaluando mes a mes su funcionamiento para ir corrigiendo las frecuencias o sumar más coches, algo que hacemos con todos los recorridos.

--Si resultara deficitaria, ¿puede tener un impacto en el valor del pasaje?

--No. El diseño que generamos tiene pocos coches para que la relación kilómetros recorridos/pasajeros se mantenga en valores aceptables, que no impacte en el cálculo de la tarifa de equilibrio.

--¿Hay planes de sumar nuevas líneas?

--Es la idea, porque hay sectores con muy poca cobertura. El caso de la 521 es especial porque se trata de llegar a una zona sin servicio. Otro sector que ha crecido es la de la avenida 14 de Julio hasta Indiada y desde Cambaceres hasta el camino de Circunvalación. Allí pasan la 507 y la 513 Expreso, pero ninguna ingresa a los barrios. En los próximos meses se van a pavimentar calles paralelas a 14 de Julio y a partir de eso se pueden plantear modificaciones, pero es un cambio a mediano plazo.

Parque automotor, aeropuerto y campus de la UNS

--¿Cómo se encuentra el parque automotor en cuanto a su antigüedad?

--Es un momento muy complejo de la economía y no es simple para las empresas renovar las unidades. Tenemos un parque con una antigüedad promedio de 8 años, que no es poco para un lote de 200 vehículos más 30 de reserva. En 2021 se sumaron 35 unidades 0 Km que mejoró el promedio. Por último hay que tener en cuenta que estamos próximos a licitar las líneas, con lo cual las empresas están a la expectativa de los resultados de esa nueva explotación.

--¿Se mantiene la idea de generar una línea al aeropuerto?

--Estamos cerca de su implementación. A fines del año pasado llegamos a un acuerdo con la empresa que va a Cabildo para que implemente una extensión a su recorrido. Hay una demora en la entrega de nuevas unidades que necesita la compañía pero apenas sume esos coches comenzará la prestación.

--Otro tema no menor es el del campus de la Universidad en Altos del Palihue.

--Es cierto. Nuestra idea es que cuando se haga la nueva licitación del servicio se incorpore un recorrido que no pase por el centro, que abarque varios barrios y llegue hasta el campus. Lo que hicimos este año fue mejorar las frecuencias de la 503, que llega al ingreso del Palihue, pasando de 15 minutos a 12.

"Pero además en las horas pico se agregan tres coches que salen desde la plaza Rivadavia y van directamente al campus, con lo cual se logra una frecuencia de 7 minutos, algo que ninguna otra línea tiene. Hay que tener en claro que el crecimiento del lugar fue reciente y muy importante. Pasamos de 3.500 viajes a 6 mil en poco tiempo, es una situación que seguimos analizando".