Bahía Blanca | Viernes, 26 de abril

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El chalet en Villa Harding Green

En marzo de 1936, salió a remate el chalet La Emilia, una de las pintorescas viviendas de Villa Harding Green.

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   Pocas villas fueron creadas con tanto ahínco y dedicación como Villa Harding Green, ubicada a unos diez kilómetros de Bahía Blanca. Fue su incansable promotor el vecino Ernesto Parral, quien a principios de siglo ofrecía los terrenos sin costo, alentando así al inicio de las construcciones.

   Imponía como condición la estética de las viviendas a construir. Por ello, brindaba diseños elaborados por el arquitecto Gregorio Salamandekov: viviendas de madera de variadas comodidades.

   Luego Parral se preocupó por brindar un medio de transporte ágil. Para ello construyó una extensión de la línea férrea que cedió al Ferrocarril al Pacífico, empresa que puso en marcha, en 1911, el servicio de tranvía eléctrico a la Villa, el cual se convirtió en uno de los paseos elegidos por los bahienses.

   Cuando el municipio decidió construir --en la primera década del siglo-- un barrio obrero, Parral donó tres manzanas para que se asentara en Harding Green.

   Un último gran empuje para el lugar fue la elección de la empresa aerocomercial Aeroposta de instalar el aeropuerto desde donde, a partir de 1929, unía nuestra ciudad con la Patagonia.

   Fue en ese crecimiento que se construyó un singular grupo de chalets, que otorgan una fisonomía particular al lugar. Entre ellos se destacaba La Emilia, propiedad e Arturo Coleman, con "sala, comedor, cocina con económica, escaleras de pinotea y --en planta alta-- tres dormitorios, hall y baño".

  Construido a principios de siglo, fue rematado en 1936, con una base "ínfima" de 7.500 pesos moneda nacional. Sigue siendo parte de ese lugar.