Malvinas, a 40 años de una guerra insensata
Se cumplen 40 años de la Guerra de Malvinas y 189 años de ocupación ilegítima por parte de los británicos.
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El gobierno nacional anunció la "Agenda Malvinas 40 años", buscando visibilizar los derechos sobre esas islas, homenajear a los caídos en la Guerra del Atlántico Sur de 1982 y reconocer a los veteranos de guerra de Malvinas y a sus familiares.
Además de los lemas que a veces muy poco dicen, en este caso "Malvinas nos une", habrá actos y reconocimientos organizados por la correspondiente comisión creada por el presidente Alberto Fernández para conmemorar el cuadragésimo aniversario de la guerra de 1982, con la cual se pretendió recuperar el archipiélago ocupado por el Reino Unido en 1833.
La disputa de soberanía está en el seno de las Naciones Unidos (ONU), donde nuestro país presentó títulos históricos, jurídicos, geográficos y geopolíticos que acreditan la posesión argentina y que pretende la recuperación de la soberanía por el derecho internacional.
La guerra de Malvinas se desarrolló entre el 2 de abril y el 14 de junio de 1982, cuando detentaba el poder el presidente de facto Leopoldo Galtieri. Fueron 629 los argentinos que dieron su vida en esa guerra improvisada, mal dirigida, sin sentido, casi suicida, una pretensión insensata de los militares por oculta su nefasto proceso de reorganización nacional.
“Si quieren venir que vengan, les presentaremos batalla”, improvisó Galtieri desde los balcones de la casa Rosada ante una multitud que celebraba la ocupación.
Los veteranos de guerra debieron sufrir a su regreso la peor de las humillaciones: ser ignorados y escondidos. Un lastimoso intento de “desmalvinización” operado por los propios militares y en parte por la sociedad.
A 40 años de aquella guerra, la mirada es diferente y la historia es otra. Pero aquella contienda exige negociar con otros criterios, con inteligencia, con estrategias claras.