Espora casi sin movimiento: un 10 % de pasajeros comparado con la prepandemia
El aeropuerto local cuenta con 11 movimientos semanales.
A pesar de que hay menos restricciones por la pandemia de coronavirus y esta semana se incorporó la línea aérea LADE, la actividad en el aeropuerto Comandante Espora sigue siendo "tranquila".
Según revelaron fuentes aeroportuarias, el promedio oscila entre 4.500 y 5.000 pasajeros por mes, teniendo en cuenta los vuelos de ida y vuelta. Es decir que, "comparados con los 45 mil que había antes de la pandemia, estamos prácticamente sin movimiento".
Actualmente, el aeropuerto local cuenta con 11 movimientos semanales: un vuelo diario de Aerolíneas Argentinas y cuatro vuelos a la semana de LADE (uno los martes, uno los miércoles y dos los jueves).
Vale aclarar que esta línea aérea llegó para generar conexiones con Capital Federal, Neuquén, Mendoza, Trelew y Comodoro Rivadavia, pero "no es una línea aérea comercial, sino de fomento", por lo que su operatividad no se refleja en un notable incremento de pasajeros.
La pandemia tuvo un fuerte impacto en el transporte y la recuperación se hace cuesta arriba. Si bien el turismo estuvo permitido en las últimas vacaciones de invierno, no hubo grandes movimientos. De hecho el único medio que tuvo alta demanda de pasajes fue el tren, fortalecido por su bajo costo.
Es que mientras que el boleto de tren a Buenos Aires cuesta alrededor de $ 800 (en primera, y cerca de $ 1.000 en pullman), en colectivo el pasaje de ida sale entre 4.500 y 5.000 pesos y en avión —dependiendo el día, la anticipación de la compra y el valor del dólar— más de 15 mil pesos por Aerolíneas.
Los altos costos no llegaron con la pandemia. Ya en 2019 el trayecto entre Bahía y Buenos Aires (ida-vuelta) era casi imposible de conseguir por menos de 10 mil pesos e incluso comprar pasajes aéreos de un día para el otro podía llegar a costar 25 o 30 mil pesos, ida y vuelta, con toda una gama de valores en el medio de acuerdo con cada caso. Pero es cierto que la pandemia golpeó aún más la economía familiar.
Fuentes aeroportuarias señalaron que el problema de los precios se debe en parte a la falta de competencia, dado que en los lugares donde operan varias compañías los precios suelen ser más accesibles. De hecho, indicaron que Bahía se benefició el tiempo que operó LAN y hubo competencia entre las líneas aéreas.
De todos modos, reconocieron que la llamada "revolución de los aviones" no fue lo esperado e indicaron que los pasos hay que darlos de a poco.
"No se puede cobrar desmesuradamente un pasaje por la inflación, pero tampoco un vuelo de acá a Buenos Aires puede costar $ 400, como pasó hace un tiempo. Es un valor irreal que no llega a cubrir ningún costo. Tiene que haber un piso y el Gobierno tiene que controlar los precios", indicaron fuentes del aeropuerto local.
Más allá de los precios de los pasajes, desde el aeropuerto manifestaron otros inconvenientes que no permiten el repunte de la actividad:
- la falta de balizamiento, que "en 2016 se dejó sin mantenimiento" y se está trabajando para recuperarlo, por lo que "posiblemente esté funcionando a partir de fin de mes o del mes que viene; vamos a ver si con eso Aerolíneas puede agregar un vuelo a la mañana y otro a la tarde";
- las restricciones por la pandemia y requisitos como el PCR en algunas provincias, que hace que "muchos no salgan y prefieran esperar";
- la falta de actividad presencial en muchas empresas, que aún tienen restringidos los viajes que realizaban periódicamente.
El panorama es difícil y no solamente en este sector, aunque desde el aeropuerto mantienen la esperanza de una mejora cuando "toda la población esté vacunada".