Por qué se complica el regreso de la fase 3 y las clases presenciales en Bahía
Nuestra ciudad necesita tener dos indicadores en positivo al mismo tiempo: la ocupación de camas de terapia y la incidencia de casos. Uno de ambos aún se encuentra lejos de los parámetros exigidos.
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Los decretos presidencial y provincial que se acaban de renovar en el marco de la pandemia determinaron que Bahía Blanca se debe mantener en fase 2 por estos días.
La normativa indica que se encuentran en situación de Alarma Epidemiológica (equivalente a fase 2) aquellos distritos de más de 300 mil habitantes con una incidencia de 500 casos cada 100 mil habitantes durante los últimos 14 días o que tengan una ocupación de camas de terapia intensiva del 80%.
Si bien nuestra ciudad cuenta con una ocupación de terapias inferior a ese porcentaje desde hace varios días (el dato de ayer fue un 77,63%), la incidencia de casos se encuentra a más del doble de lo requerido.
El decreto que había enviado a Bahía a fase 2 a principios de mayo establecía dos parámetros para ingresar en zona de Alarma: la tasa de incidencia "y" las camas de terapia. La conjunción "y" implicaba que ambas variables debían dar negativo para incluir a un distrito en fase 2. Pero si una de las dos daba positivo se podía pedir el regreso a fase 3.
Por eso cuando la ocupación de camas, hace un mes, se ubicó por debajo del 80%, la Municipalidad solicitó el ascenso de categoría y la Provincia concedió.
No obstante, en la renovación del DNU del 22 de mayo, se estableció una modificación sustancial en la normativa. Ese artículo se redactó planteando que irían a zona de Alarma Epidemiológica los distritos que tuvieran 500 casos cada 100 mil habitantes en los últimos 14 días "o" una ocupación de terapias del 80%. Esa "o" significa que con una sola de ambas variables en negativo, el distrito se encuentra en fase 2.
Por eso, aun cuando Bahía tiene hoy el dato de camas a favor, la incidencia se encuentra a más del doble. El último registro muestra 264 casos de promedio diario en los últimos 14 días, cuando nuestra ciudad necesitaría 110 o menos.
La Gobernación provincial, tal como anunció Axel Kicillof, adhiere a rajatabla a los preceptos del decreto nacional y esa es la razón por cual la situación local no se modificó. Sigue en la fase más restrictiva, a la espera de una menor circulación del virus.
Entre otras limitaciones, en fase 2 no están permitidas las clases presenciales, la gastronomía no puede trabajar con público desde las 19 y existe una prohibición general de circular a partir de las 20, excepto trabajadores esenciales.