Juanjo Ramírez se lleva el potrero y la magia para Almagro

Redacción de La Nueva.

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Por Fabián O. Rodríguez / farodriguez@lanueva.com

(Nota publicada en la edición impresa)

   Juan José Ramírez siempre tuvo impregnado el potrero en la piel. Era apenas un pibito, cuando ya se lucía haciendo jueguito en la mitad de la cancha de Olimpo en los entretiempos de los partidos. Luego le llegó la chance de probar suerte en Buenos Aires hasta que, tras buscar su destino en el norte del país y Chile, regresó a la ciudad que lo vio nacer. Liniers lo cobijó, tuvo la oportunidad de jugar Federal A con Tiro Federal, fue el chivo el que lo dio las herramientas para poder volver a soñar. En el 2019 la rompió, fue decisivo en el equipo campeón liguista y volvió a sonar su teléfono. Sin embargo, decidió quedarse, hasta que hace pocos días la propuesta le cambió los planes. Almagro, equipo de la B Nacional, llamó a su puerta y esta vez decidió armar el bolso.

   Casi como un regalo de 29 años, “Juanjo” se encontró con una oportunidad que no piensa dejar pasar.

   --¿Cómo surgió lo de Almagro? 

   --Por intermedio de un excompañero de inferiores cuando estuve jugando en Buenos Aires. Me dijo que un representante le había pedido el contacto de algún compañero o jugador en mi posición, entonces se acordó de mí y me mandó su número. Después, el representante le pasó algunos videos míos a algunos equipos de Buenos Aires. Y uno de esos fue Almagro. 

   --Un fenómeno tu excompañero. Se nota que dejaste un gran recuerdo. 

   --Tal cual. Se trata de Ezequiel Gallegos, un chico que jugó en Platense, Almagro, Huracán (Parque Patricios) y ahora está en Gimnasia de Jujuy. Hicimos inferiores juntos en Boca Juniors y quedo una buena relación, no solo entre nosotros, sino también entre nuestros padres. Estoy muy agradecido, porque gracias a él tengo esta oportunidad. Hoy por hoy, sin contactos, es muy difícil escalar en el fútbol argentino.

   --Esta oportunidad te llega después de un 2019 fantástico para vos, con un enorme nivel. 

   --Si, fue un gran año. Ya el 2020 llegamos a jugar muy pocos partidos y la mayoría yo no los había jugado, pero se dio esta oportunidad y estoy muy contento.  Ya me habían llegado otras ofertas como Cipolletti o Estudiantes de San Luis en su momento, pero prioricé quedarme en Liniers. 

   --¿Por qué? 

   --Porque si bien eran lindas ofertas de una categoría más arriba, la realidad es que la dirigencia de Liniers hizo muchísimo esfuerzo económico para que yo me quede, sumado al proyecto del cuerpo técnico y los compañeros y amigos del club. Todo eso hizo que decidiera quedarme, pero esta oportunidad no podía dejarla pasar.  

   --Más allá de que los contactos abren puertas, imagino que los jugadores suelen enviar videos para buscarlas. ¿En este caso cómo fue?  

   --Sí, tal cual. Yo mandé una vez que el contacto ya estaba hecho con el representante, gracias a Ezequiel. Pero si, en otras ocasiones he mandado y he comprado partidos en los que sé que anduve bien para tener el material. Pero no me llamaron, ja, ja. 

   --El Liniers del año pasado daba gusto verlo. Se combinaban jugadores como Onorio, Soto Torres y vos. Tres enganches por esencia en un mismo equipo… 

   --Exacto. Ese fue un trabajo que veníamos haciendo desde hace tiempo, acomodándonos a las funciones que nos exigía el cuerpo técnico (encabezado por Walter Carrio). Gracias al trabajo de la semana y el esfuerzo, se pudo jugar así. Hoy en día es casi imposible que jueguen tres enganches juntos, por eso nos íbamos adaptando a nuestras funciones. 

   --¿Cuál era la orden defensiva para los tres volantes ofensivos? 

   --Walter (Carrio) siempre nos remarcó que la intensidad no se negociaba y eso fue lo que nos caracterizó. Creo que ese aspecto nos hizo rendir el doble de lo que podíamos rendir. Siendo intensos atacando y defendiendo, ganás tiempo. 

   --A Walter se lo escuchaba gritar “jueguen, jueguen” a cada rato… 

   --Es esa exigencia que te mencioné. El tema de tomar decisiones constantemente, de ser explosivos todo el partido, te hace crecer. Creo que todo eso me dio la posibilidad que me vea la gente de Almagro. Venir trabajando de esta forma y en conjunto llevo a eso; y esta oportunidad se le puede presentar a cualquiera del equipo. 

   --¿Cuándo tenés que viajar? ¿Hablaste con Esmerado? 

   --Si todo sale bien, a fines de agosto me estaría integrando al plantel. Una vez que vieron mi compacto y pidieron referencias mías en Bahía, Esmerado (Gastón) me llamó y me comentó la idea de juego que tiene, hicimos un zoom con todos los chicos del plantel y me dijo que fue lo que más le gustó de mis compactos para que lo siga haciendo. Me remarcó la dinámica y explosión, el uno contra uno y la pegada.

   --Esmerado jugó en Olimpo. ¿Hizo alguna referencia al fútbol de Bahía cuando hablo con vos? 

   --Solamente me comentó que tenía algunos amigos y conocidos acá de cuando jugó y les pidió referencias mías. 

   --Llegás a la segunda división del fútbol argentino con 29 años. ¿Sentís que podés representar un espejo para muchos chicos que creen que a cierta edad es tarde para soñar con un nivel superior? 

  --Ojalá que sí. La verdad es que el fútbol de Bahía es una buena vidriera, y más si sos jugador de un club como Liniers, ya que es la entidad que más jugadores sacó y, por lo tanto, al que más vienen a buscar chicos.  

   --Imagino que, cuando apoyaste la cabeza en la almohada después de que se confirmó este pase, hiciste un repaso por toda tu carrera y de tanto esfuerzo. 

   --Sin dudas. Estos últimos días me costó dormir por la ansiedad y la alegría. Me llegaron muchísimos mensajes de apoyo y de felicidad de excompañeros y amigos. Eso es otra cosa que tengo que agradecer.  

   Para cerrar, “Juanjo” también tendrá otro motivo, seguramente el más importante, para celebrar. 

   --Mi hija vive en Buenos Aires. Y, más allá de lo futbolístico, es otra gran alegría poder tenerla más seguido conmigo. En este momento hace ocho meses que no la veo, entre verano y pandemia. Más no puedo pedir.

A un toque

   --¿Tú mejor partido?

   --Tengo dos. Uno fue en el 2019, cuando le ganamos a Bella Vista 6 a 0 en Cabildo con Liniers. Me pusieron un 10 en el diario. Y el otro fue en la Reserva de Banfield contra San Lorenzo en el Nuevo Gasómetro.

   --¿Tú principal virtud?

   --El desequilibrio en el uno contra uno, la pegada y la constancia.

   --¿Un defecto?

   --Sin dudas que la marca.

   --El mejor gol que viste en vivo.

   --Te puedo nombrar muchos de Julio Acosta. Tuve la fortuna de ver varios golazos que convirtió.

   –¿El mejor gol que convertiste?

   --Con Liniers, en la final ante Bella Vista de 2017. Fue un gol importante porque fue el del título. Empezamos perdiendo 1 a 0 y se lo dimos vuelta. Además, fue muy lindo por llegó después de una buena jugada colectiva; la pelota me quedó en el área, le amagué al defensor, le amagué al arquero y la piqué por arriba.

   --¿El gol que más gritaste?

   --Como hincha de River, el de Juanfer Quintero en la final de la Copa Libertadores de Madrid.

   --¿Qué recuerdos tenés del debut en Primera?

   --Me acuerdo que tenía mucha ansiedad. Sinceramente, dormí muy poco la noche anterior, pero fue feliz por poder debutar.

   --¿Qué amigos te dio el fútbol?

   --Sinceramente, es lo que más tengo en el fútbol. Tuve y tengo la suerte de conocer grandes personas y establecers lindas amistades. A la distancia, tengo a  Nicolás Trecco y Ezequiel Gallegos. De Liniers te puedo armar casi dos equipos: Fede Nievas, Alan y Lauti Martínez, Juan Perotti, 'Cachi' Lagrimal (Facundo), Julito (Julio Acosta), Matías Soto Torres, el 'Turu' (Mauro Martínez), Tomi Onorio, Boris (Herrera), Franco Altfater, 'Pancho' Barez (Gonzalo), el 'Oso' Huiriqueo (Facundo) y seguro me olvido de varios. Y de mi paso por Tiro Federal, destaco a 'Carucha' Lauman (Facundo), Bruno Díaz y Franco Lefiñir. Además, el fútbol me dio amigos como Lautaro Mardones y Ema Valaco.

   --¿Qué rival te hubiese gustado tener de compañero?

   --En la Liga del Sur, a Brian Scalco.

   --¿Te hubiese gustado jugar en...?

   --En River, sin dudas.

   --¿Un ídolo?

   --Andrés D'Alessandro.

El perfil de “Juanjo”

--Nombre: Juan José Ramírez.

--Fecha y lugar de nacimiento. 17 de agosto de 1991, en Bahía Blanca.

--Trayectoria: Inferiores de Olimpo, Renato Cesarini, Boca Juniors y Banfield. También tuvo un paso por el fútbol chileno, Desamparados de San Juan, Sol de América de Formosa, Tiro Federal de nuestra ciudad y Liniers.

--Familia: Es hijo de Irene y Juan. Tiene tres hermanas: Fernanda, Paola y Jimena. Es papá de Alma.

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