Un “like” que no le va a gustar, porque lo terminó pagando con la libertad

Redacción de La Nueva.

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Audionota: Juan Ignacio Zelaya

 La caída accidental de la prenda de vestir que usaba para ocultar parte de su rostro durante el robo y un “me gusta” en una publicación en Facebook fueron dos de las pistas que permitieron identificar y condenar al autor de un asalto registrado el año pasado en un comercio de Villa Delfina.

   La jueza del Tribunal en lo Criminal Nº 2, Mercedes Rico, sentenció en un juicio abreviado a Federico Martín Fantaguzzi (21).

   El joven recibió la pena de 5 años y 9 meses de cárcel por el delito de robo agravado por el uso de arma.

   Sin embargo, se determinó en su contra una pena única de 7 años de prisión, teniendo en cuenta una sentencia anterior, dictada a mediados de 2019, por la justicia local. 

   Durante la investigación quedó probado que el 23 de mayo del año pasado, poco antes de las 19, el imputado ingresó en un almacén ubicado en Martina Céspedes al 1700 y amenazó con un cuchillo a la empleada, apoderándose de 4 mil pesos, encendedores y un teléfono celular.

   También se acreditó que antes de escapar del lugar amenazó a la víctima, manifestándole que la iría a buscar si daba aviso a la policía.

   La comerciante describió que entre abril y mayo de 2019 había sufrido 3 robos en el local y que por esa razón trabajaban con la puerta cerrada con llave.

En un descuido

   Dijo que el día de los hechos ingresó un nene de unos 8 años a comprar y que cuando se retiró el ladrón aprovechó para entrar.

   Mencionó que enseguida advirtió que era el mismo sujeto que la había asaltado 10 días antes y que, al igual que en el hecho anterior, tenía la mitad de su cara cubierta con un pañuelo o bufanda de color rosa.

   La joven brindó detalles del ladrón y relató que portaba en su mano derecha un cuchillo de mango blanco.

   También indicó que la gorra y la mochila que llevaba colocadas las había utilizado en el otro robo.

   Otra testigo refirió que el procesado solía concurrir a comprar al negocio.

Elementos de prueba

   Las cámaras de seguridad del comercio captaron la secuencia del robo y corroboraron el relato de la víctima respecto a la forma en que se produjo el asalto.

   La víctima, quien luego del hecho dejó de trabajar en el sitio, describió que en el último robo al ladrón se le bajó la prenda que usaba para cubrir su cara y pudo advertir algunas marcas que tenía en el rostro y un aro expansor que usaba en una oreja.

   El sujeto también fue individualizado a partir de otro dato clave: un comentario que realizó en una publicación de la red social Facebook.

   La mujer dijo que el joven le había colocado un “me gusta” a una foto de una conocida y que le llamó la atención el perfil, por lo que lo observó y advirtió que se trataba de la misma persona que la había asaltado. En ese momento le pudo poner nombre y apellido al rostro que había visto. 

   Fantaguzzi fue reconocido mediante una ronda de fotografías, ya que oportunamente se negó a participar en una rueda de personas.

   “Es por todo lo expuesto y analizado, y en función de las conclusiones a las que he llegado, que ha quedado plenamente demostrada, más allá de toda duda razonable, la participación de Federico Martín Fantaguzzi en el hecho”, sostuvo la jueza Rico.

   Por ello consideró probada la responsabilidad del procesado en el robo y le impuso la sanción.