Bahía Blanca | Jueves, 28 de marzo

Bahía Blanca | Jueves, 28 de marzo

Bahía Blanca | Jueves, 28 de marzo

Hubo mucha “química” en la fiesta de fin de año de los petroquímicos

Con el salón de Colón y Teniente Farías repleto, los trabajadores disfrutaron a pleno de la despedida del 2019.

   fue un año de muchísima actividad para un sindicato que pudo mantener las condiciones laborales, no perder poder adquisitivo, avanzar en las conquistas sociales y hacerse más fuerte. 

   La referencia es para el Sindicato del Personal de Industrias Químicas y Pertoquímicas de Bahía Blanca (SPIQPyA), que tomó como propia la solidaridad social, el desarrollo de la cultura y el deporte de la ciudad.

   "Se logró que los trabajadores petroquímicos seamos protagonistas de la lucha por mejorar las condiciones en las que vive la mayoría de los bahienses", dijo Julio Leguizamón, secretario general de SPIQPyA. 

   La fiesta de gala de los petroquímicos no decayó ni por un minuto. El salón muy bien acondicionado, el riquísimo menú, las luces, la música y la predisposición de todos para pasar una noche espectacular.

   El Grupo Universitario, con mucho entusiasmo, puso de entrada al público en la pista, que luego de bailar recibió de pie a Radagast. Allí  estalló la risa y la buena onda de todos los presentes. 

   Luego vino el humor y la música de Fernando Ramírez, quien se anticipó a la entrada explosiva de "Los Caligaris" logrando,  como ya es costumbre, arrancar a todos de las sillas. 

   Con Grupo Universitario de fondo, y disfrutando de la barra de tragos, la mesa dulce y cerveza artesanal, la fiesta tuvo lugar hasta la madrugada.
Julio Leguizamón despidió el año junto a los petroquímicos:

   “Quiero aprovechar para recordar todo lo que hicimos en estos últimos 9 años, desde que arrancamos. Empezamos a trabajar primero en lo gremial, para reconstruir un sindicato que había quedado totalmente destruido. Nos costó unos cuantos años mejorarlo internamente, pero luego de conseguirlo se tomó la decisión de abrir las puertas, de crecer hacia afuera, de participar en muchas actividades que cada vez son más", contó. 

   "Crecimos en lo institucional y en lo gremial, y también hacia la sociedad. Tuvimos que romper muchos prejuicios que todavía continúan, porque a veces es muy difícil desde la dirigencia hacer notar el trabajo diario, el esfuerzo gigantesco que hace un dirigente de un sindicato", remarcó.

   "El trabajo solidario, junto el esfuerzo enorme de muchos dirigentes (algunos que hoy nos acompañan), dan fe de lo que significa poder trabajar en una sociedad en la que esto, muchas veces, no se valora. Y es nuestra responsabilidad hacerlo visible", señaló.

   Leguizamón agradeció a los dirigentes que acompañan, a los afiliados y a las comisiones internas.

   "A la agrupación 8 de Julio, a nuestra comisión directiva y subcomisiones como la de mujeres y jubilados. Y a nuestros empleados", sintetizó. 

   "Hemos tenido un año muy difícil. En nuestro caso logramos que no sea tan duro, pero sí lo fue para los trabajadores del resto del país. Insisto en que uno no puede estar bien en un país que está mal", puntualizó. 

   "Tenemos la esperanza. Siempre nos levantamos y ponemos el hombro como trabajadores para salir adelante, con la firme convicción de mejorar y crecer. Esa es nuestra tarea como dirigentes, y espero que en el 2020 podamos cumplirla para seguir creciendo y mejorar. Para esto quiero convocarlos a cerrar el año y que podamos tener un 2020 mucho mejor.”