Bahía Blanca | Viernes, 29 de marzo

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El peor de los monstruos tiene derechos

Para la Justicia, Pablo Cuchán es inocente. Al no tener sentencia firme, no está condenado sino tan solo procesado. Ahora en libertad condicional, Monte Hermoso rechaza su radicación, así como la rechazarán en todo lugar adonde Cuchán quiera ir. Para cualquiera de nosotros, es culpable y mucho más. El asesino de Luciana Moretti, no obstante, está libre por imperio de la ley y en algún lado tiene derecho a vivir. ¿Dónde?

Báez, Fariña, Panamá Papers, Macri, Cristina, De Vido. Argentinos, en cualquier momento nos empiezan a aburrir los escándalos por corrupción y vamos a pedirle a la tele otro entretenimiento. Sean sinceros: ¿A cuántos de ustedes, queridos conciudadanos bahienses, les interesa ya profundizar sobre Time Warp? Esas cosas acá no pasan, ¿no?

Criticar es fácil. Por estos días en Bahía Blanca volvió el debate sobre la velocidad máxima en La Carrindanga, que pasó de 40 a 60 km/h. Pero ahora muchos creen que lo mejor era dejar todo como estaba y que los autos vayan a ritmo de ciclista empeñoso. No hay palanca de cambio que nos venga bien.

Tras el pago de 9.300 millones de dólares a los buitres, el país salió del default y comienza una nueva etapa. Buenísimo. ¿Buenísimo?

El jueves allanaron la casa de un exfuncionario municipal por supuesta difusión de pornografía infantil. Para la Justicia, aún es inocente. Para todos nosotros, seamos sinceros, ya es culpable.

El neonazi Andres Breivik, el monstruo de Noruega que mató a 77 personas en 2011, acaba de ganar un juicio al Estado por las condiciones "inhumanas" de su detención. Las autoridades le habían prohibido recibir visitas y correo en la cárcel. "La prohibición de los tratamientos inhumanos y degradantes representa un valor fundamental en una sociedad democrática. Esto también vale para el tratamiento a terroristas y asesinos", dice el veredicto del tribunal de Oslo.

Hasta el peor de los monstruos tiene derechos. En la cárcel.