"No aguanté la situación con Facundo Sucatzky"

Redacción de La Nueva.

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 VENADO TUERTO --Si en el futuro algún club de Junín te ofreciera el contrato mejor pago de tu carrera, ¿agarrás?

 --No. Porque tuve una mala experiencia, tanto yo como mi familia. Y en la parte deportiva es la primera vez que me va tan mal.

 Mauricio Beltramella la pasó feo en Argentino de Junín. El ex Estudiantes, ahora refuerzo de Olimpia de Venado Tuerto (rival del albo esta noche, desde las 22.10, por la cuarta del TNA-1, con arbitraje de Fabricio Vito-Ariel Rosas), explicó cómo un equipo de Liga Nacional que costó 2 millones de pesos armarlo, ahora lucha por la Permanencia.

 --No sólo a vos te fue mal...

 --Bueno, uno enfoca al equipo primero, pero al hacer un autoanálisis me pregunté en qué estaba ayudando a Argentino y me respondí "en nada". Lo único que hacía era matarme entrenando todas las semanas y cuando llegaban los partidos no me salía nada. Soy un tipo que hago todo en base a sacrificio, porque de talento muy poco. Hace 16 años que me gano mi plata porque me rompo el c... Encima, me acuerdo cuando arreglé, que pensé que iría a un lugar donde a la gente le gusta el jugador revulsivo.

 --¿Y?

 --Las cosas no me fueron bien. Es una ciudad difícil, una cancha difícil. Néstor García nos decía que era fácil jugar en Junín, porque te tirabas de cabeza a dos pelotas y eras ídolo. Tenía razón, pero muchas veces con eso no alcanza para ganar un partido.

 "Si dentro de dos años me dicen que me dan un buen contrato, prefiero tranquilidad a lo económico. Viniendo a Olimpia perdí plata, porque tuve que rescindir mi contrato con Argentino y cobré el 50 por ciento. Fue uno de los mejores contratos de mi carrera.

 --Aclaráme lo siguiente: con 34 años y 16 temporadas como profesional, ¿no se supone que estabas fogueado para bancar la presión en Argentino?

 --Es un equipo con necesidad de ganar y más habiendo llevado al "Che", a Facundo (Sucatzky) y a Román González. "Vendieron" algo que en realidad hay que ganárselo cada fin de semana. Uno no puede adelantarse y hablar antes del torneo.
--Y cuándo arreglaste, ¿no te llamó la atención tanto nombre o un presupuesto millonario?

 --Cuando me llamaron y me dijeron que tenía todo arreglado, me dije "por fin un año de mi carrera voy a estar tranquilo". Creí que era el reconocimiento por tantos años. Pero no se llegó a una química de equipo.

 --¿Eh? ¿sólo eso?

 --Sí, y después problemas con Sucatzky. Fue uno de los más resistidos porque siempre miraba lo que hacía el de al lado, sin mirar lo que hacía él. Si vos no querés calentarte, no querés ir media hora antes a entrenar, quedarte media después o no vas a hacer pesas, es problema tuyo y del técnico. Yo fui uno de los que no aguanté la situación con él. Es algo de público conocimiento.

 --¿Fuiste a las manos?

 --Discutí fuerte. Es un pibe porque le gusta entrenar mucho, y me saco el sombrero por eso, pero después no sé si estaba un cambio de más o qué, porque estaba a la expectativa de los demás. Y esto se lo dije. Discutí, me peleé y nos tuvieron que separar. No llegamos a las manos porque se metió Román. Néstor, que es un tipazo, no sé si no supo manejarlo pero como él tiene una amistad con Facundo, creo que el tipo se le escapó de las manos. Como es Néstor, un tipo que sabe mucho y conoce de la vida, podría haber controlado la situación.

Aprietes y carteles

 --¿Cómo se vivía la situación dentro de la cancha?

 --Quizá había mucho cacique y poco indio. Entonces, para excusarse, cuando se pedía que había que salir a la cancha a romperse el c... algunos jugadores decían "no mirá, la única forma de jugar que conozco es ésta". Cuando mirabas la tabla estábamos décimos, después doce y al otro fin de semana catorce. Entonces, la única forma de jugar que tenían era la de guante blanco, que yo no la conozco porque no soy un talentoso. Somos todos culpables de que Argentino esté decimocuarto.

 --¿A vos te insultaron los hinchas?

 --Sí, la semana pasada contra Boca. Fue la única vez. Pero ya pedían la cabeza de todos. Primero fue Néstor, después Facundo, Román, Eslava y el domingo pasado me tocó a mí. Pero yo no me abrí de gambas. La gente muchas veces no entiende las cosas.

 --¿Sufriste algún apriete?

 --No, pero cada tanto merodeaban por casa. Jamás directamente. Pintadas sí. No con mi nombre en particular sino referidas a todo el equipo.

 --Otros la pasaron peor.

 --Sí, Facundo, Néstor, "El Chuzo" (Román González). Todos los días las calles empapeladas. Ojo, yo no me fui por los aprietes sino porque sentí que estaba sobrando. Con la dirigencia también me fui bien. No sé si les hice un favor, pero no sabía cómo sumar. No es una forma de escaparle al descenso, porque es algo que ya viví. Con 34 años me sentía de sobra. Cuando bajaron las p... contra mí no sé si estaba preparado para tantas presiones. A Venado Tuerto llegué quebrado de la cabeza porque en Junín me levantaba y pensaba con qué q... me iba a encontrar. O cuántas reuniones íbamos a tener. Los dirigentes querían saber qué pasaba. Nunca viví algo así. Por eso di un paso al costado.

Ricardo Sbrana/Enviado especial