Bahía Blanca | Sabado, 18 de mayo

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Benítez: “Por la cuarentena, la radio recuperó el espacio que había perdido”

Lo dijo el titular del museo Carlos Gardel. Este jueves 27 se cumplirán 100 años desde la primera transmisión en el país. Para nuestra ciudad, ya pasaron 90 desde el inicio de LU2.

La historia misma. Benítez, junto a la RCA Radiola 20 del año 1925 (izq.) y uno de los primeros receptores superheterodinos, de 1924. / Fotos: Emmanuel Briane-La Nueva.

Guillermo D. Rueda / grueda@lanueva.com

“¿Un retorno a las fuentes? No lo sé exactamente, pero sí que, por la pandemia, la radio recuperó el espacio que había perdido. Otro tanto sucedió con la televisión y Netflix”, dijo el ingeniero Carlos Benítez, titular del Museo de Radios Antiguas Carlos Gardel y un apasionado del tema.

“Es decir, la gente se puso a escuchar más los medios, ya que de estar en calle pasó a permanecer en la casa. Y ahí se prendió a la radio, o al televisor, o se conectó a internet”, agregó.

El dato, más allá de las presunciones, no es menor si se considera que la radio cumplirá, este jueves 27, los 100 años de existencia en el país. En 1920 fue cuando Enrique Telémaco Susini, César Guerrico, Luis Romero Carranza y Miguel Mujica transmitieron la ópera Parsifal desde la terraza del teatro Coliseo, en Buenos Aires.

A nivel doméstico, este 31 de mayo LU2 Radio Bahía Blanca, la más antigua de la ciudad, cumplió 90 años de vida.

Benítez recordó que la creación de la radio provocó, entonces, un boom inesperado.

El 27 de agosto de 1920 los denominados Locos de la Azotea pusieron en marcha la primera transmisión. / Imagen de dominio público.

“Toda la vida de todos pasaba por la radio hasta que, con la llegada de la televisión, empezó a atenuarse. Pero hoy la tenemos vivita y coleando (sic)”, dijo.

“También decían que, con internet, se produciría la muerte de la televisión y vemos que no es así”, agregó.

“Con la tevé hay que tener dos sentidos, oído y vista. Con la radio sólo se usa uno, y te da margen para hacer otras cosas al mismo tiempo y en cualquier lugar”, contó.

“La avidez por la información hizo que, si la radio había perdido (su lugar) con Spotify, porque los chicos hoy escuchan música casi todo el día, algunos hayan retornado y hoy intercalen música con información”, sostuvo.

Benítez ponderó el hecho de que, hoy con internet, se puede escuchar radio desde cualquier lugar del mundo.

“Un avance importante es que ya no se necesita software. Con streaming se accede a escuchar desde todos lados. Una estación de FM no va más allá de 10 o 12 kilómetros, pero por internet es ilimitado”, afirmó.

“Lo que sí hay que dejar en claro es que la radio por internet no es la radio digital. Eso es algo que, a veces, se dice sin rigor científico”, expresó.

Benítez --en diálogo con La Nueva.-- aseguró que la radio digital cuesta mucho dinero y que en países como Gran Bretaña no funcionó, y no porque no hubiera aparatos para escucharla.

“Es paradójico, porque el futuro es la radio digital; pero ya fracasó”, dijo.

“Es más, en Noruega hubo un apagón de las radios analógicas. Hay un gran interrogante ahí, pero mientras exista el streaming se va a seguir escuchando. Eso sí, con estratos (NdR: de edad) en alza”, explicó.

“El híper 60 (quien tiene más de 60 años) escucha radio en receptor y no sabe pasar de AM a FM, pero la franja, según entiendo, se va a ir corriendo hasta que la radio sea escuchada únicamente por internet y por los teléfonos móviles”, definió.

Sobre plantas y aparatos

Uno de los objetivos de Benítez en su Museo de Radios Antiguas Carlos Gardel, ubicado en Laprida 268, es la salvaguarda del patrimonio cultural. Y de los receptores antiguos, una suerte de reliquias que cobra dimensión, y valor testimonial, por cada día que transcurre.

“Hay gente que viene al museo y me cuenta que tenía un aparato, un mueble, que era una radio, que no funcionaba y que, hoy, tiene una planta adentro. U otras personas que les han instalado una radio moderna en su interior. Estoy en contra de eso”, sostuvo.

“Estas radios son muy nobles y perfectamente se pueden poner en marcha. Los chicos de las escuelas se asombran cuando recorren el museo, porque aprecian mucho que estén en funcionamiento”, indicó.

“Incluso, las radios antiguas son muy demandadas desde todo el mundo y existe un importante mercado. Mi idea es que sigan disponibles en el museo para que se conozca la historia”, aclaró.

El propio Benítez, ingeniero electricista egresado de la UNS en 1982, es quien repara las radios. Todas las que se exhiben en el museo están en funcionamiento.

La pieza más antigua es de 1924. “Es única y varios la han querido comprar, pero está claro que no la pienso vender. La construyó Alejandro Paglialunga y me la regaló su hija, Doña Rosa”, señaló.

Se trata de uno de los primeros receptores superheterodinos del mundo. Posee un parlante exterior inglés SG Brown y mide un metro de frente.

Otra es la RCA Radiola 20 del año 1925. Es un receptor regenerativo de 5 válvulas con parlante externo. El manual y los auriculares originales están impecables.

“La traje desde Santa Fe y, cuando la abrí, me encontré con una chapita que decía: ‘Casa Galli, San Martín, esquina Las Heras, Bahía Blanca’. De no creer", recordó.

La RCA Radiola 20 del año 1925 era de Casa Galli.

“¿Mi sueño? ¿Un lugar más amplio para el museo? No sé si andaría en otro sitio; acaso por los espectáculos. ¿Si el museo es de interés municipal? No. Tampoco lo he pedido, pero todos saben lo que hago y que es de carácter y acceso libre y gratuito”, contó.

Al museo acuden --en períodos sin cuarentena-- unas 15 personas por día, en el horario de 16 a 21. Van desde alumnos de escuelas, hasta curiosos y apasionados por la radio. También artistas, como Les Luthiers: “Escucharon a Carlos Gardel en una vitrola y no lo podían creer”, recordó Benítez sobre la ilustre visita.

Todas las radios del museo están en funcionamiento.

Casi todas las radios son de su propiedad. El museo está en una casa que acondicionó y por la cual paga un alquiler.

“Sí, pago para difundir la cultura. Ya sé, es una locura, pero para mí es un placer hacerlo”, aseguró el ingeniero Benítez.