Bahía Blanca | Lunes, 29 de abril

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Flor de noche tuvo Quilmes ante un Bahía Basket que terminó marchito

El escolta cervecero dominó, con 34 puntos, siendo vital para descontar en la serie de Reclasificación, que ahora está 2-1 a favor del representante bahiense. Mañana, el cuarto partido.
Eric Flor, en la escena ante Facundo Corvalán, fue imparable para el equipo bahiense.

Fernando Rodríguez

ferodriguez@lanueva.com

Sin poder con Eric Flor -34 puntos, con 4-9 en t3, 7-13 en t2 y 8-8 en t1-, sin saber cerrar ante la ausencia de Vildoza, Basualdo y Ruiz (por faltas) y con el 54% en libres, Bahía Basket perdió frente a Quilmes, por 92 a 87 y la serie se puso 2-1.

Empezó bien. Aprovechando la ventaja más notoria, Bahía supo jugar para y con Johnson mientras estuvo en cancha en el primer cuarto. El Gordo fue quien absorbió defensas y direccionó la ofensiva para las diferentes vías de gol, o bien se la jugaba 1x1.

Así se ganó sus puntos y le hizo sumar al resto (todos menos Redivo).

El cervecero, por su parte, apostó al juego perimetral, la única forma donde podía sacar ventajas. Y lo logró completando 5-7 en triples.

Cuando salió Johnson, el equipo de la ciudad empezó a sentir la falta de rebote.

No obstante, bien contenido Vildoza por Corvalán y pudiendo abrir la cancha, Bahía clavó un parcial de 7-0, que el local respondió con la misma cifra, a partir de los puntos de Ruiz: 24-21.

El regreso de Johnson y Redivo encendido (12 puntos en el cuarto) le dio variantes a Bahía. Al mismo tiempo, Fjellerup sacó ventajas atacando el cesto y, también, cuando le quedó el tiro abierto. En 6m25 del segundo cuarto Bahía estampó una de las tres máximas del primer tiempo: 8 (con 4-5 en triples).

Ya Redivo se tornó incontrolable con su rápido tiro, la cancha se fue abriendo para Bahía y las limitaciones afloraron en el local.

De todos modos, cuando bien pudo haber cerrado el primer tiempo 10 arriba, se fue sólo a seis, luego que Ramos dudó en la definición de contraataque y Flor, en el otro aro, definió en bandeja: 40-46.

Después de sacar la máxima de 9 en 2m10, con Levy (doble más triple) disimulando su fractura en uno de sus dedos, Johnson cometió tres faltas consecutivas, frustrado por errores propios ofensivos. Y Quilmes lo aprovechó.

Flor calentó la mano, dominó a Redivo, clavó 10 puntos (2-3 en t3), para empatar en 65 (parcial de 21-12). Fue Levy quien siguió tirando del carro (12 puntos), para entrar al último cuatro arriba.

En un último período, Johnson se puso con cuatro en 3m40. Inmediatamente Vildoza se fue por cinco. Y fue como un despertar del local hubo doble de Ruiz y Flor, más triple de Robinson. Parcial 10-0 y siete arriba con 4m48.

Un buen pasaje de Corvalán, con gran defensa en primera línea, oxigenó a Bahía: 83-83.

Aunque Flor motorizó el juego del local: 87-83, máxime con la salida de Basualdo y Ruiz por faltas.

De ahí al final, para el infarto. Bahía dominó el rebote ofensivo en diferentes acciones y defendió muy bien, aunque no pudo capitalizarlo en ataque.

De todo se aprende. Que la derrota no signifique Flor de golpe para los que resta de la serie…